Luego de la masacre bajo el pretexto de armas químicas en Irak, con el solo fin de sacar a Husseim del gobierno, quedó al descubierto la farsa cuando no se encontró ni armas químicas ni de ningún otro tipo que usaron de pretexto para la invasión, demostrando que solo buscaban la salida de Saddam Husseim, e instalar un nuevo gobierno impuesto por la Casa Blanca.
Por su parte Siria, conducida por Bashar Al Assad, ha sabido soportar todo tipo de presiones y obstáculos, cuyo único fin que persigue el gobierno de Trump es derrocarlo; promoviendo y financiando el enfrentamiento entre el ejército Sirio y los Rebeldes. Misma situación que han intentado en Venezuela pero el pueblo en su mayoría y las fuerzas armadas han sido leales a Nicolás Maduro; hasta tal punto que ni siquiera han logrado organizar o importar un grupo armado para enfrentar al gobierno Bolivariano.
Trump acusa directamente a los Presidentes de Rusia e Irán de apoyar al gobierno de Bashar Al Assad en estos recientes ataques con armas químicas; pero ante la situación que se ha venido viviendo en Siria, ¿Quién puede creer tales aseveraciones del gobierno Norteamericano?, ¿Quién sería el más beneficiado en estos hechos, el Gobierno Sirio ante la mirada de todo el mundo a sabiendas que cualquier desliz provocaría una invasión del Gobierno Norteamericano y sus aliados?, o ¿Estados Unidos promoviendo una situación que le permita invadir y exterminar a media población Siria?
Estados Unidos busca acabar con todo el que se oponga a sus intereses y por ello su arremetida contra Siria, para fulminar los gobiernos de avanzada y antiimperialistas en el Medio Oriente; por otra parte también buscan fortalecer a Israel y a las monarquías de Arabia Saudita, Catar y Kuwait, entre otras, para mantener su control geopolítico en la región.
Tampoco debemos olvidar que Siria es otro de los países ricos en petróleo, la fuente energética que los imperios buscan monopolizar.
Trump y sus aliados también persiguen frenar los movimientos en Siria, Irán, Iraq y El Líbano con Hezbolá, lo que es esencial para fortalecer a las monarquías árabes pro occidentales que se oponen a luchas como la de la causa palestina y la creación de un Estado kurdo; de igual forma pretenden evitar la expansión de la influencia de Rusia y China en el Medio Oriente, situación en la que seguirían avanzando con la eliminación del Gobierno Sirio.
A todas estas, muchos dicen que se presentará un enfrentamiento estando en un bando Rusia y China y en el otro Estados Unidos, Inglaterra, Francia y el resto de sus aliados; situación que descarto a corto o mediano plazo porque hemos visto escenarios similares y lamentablemente los países más débiles han sucumbido ante la invasión Norteamericana, sin contar con apoyo real de ninguna potencia opuesta a USA.
