"A Saab no solo lo quieren "enterrar" en una cárcel estadounidense, sino que su actitud valiente los obliga a confundir, manipular y engañar, eso reafirma que no lo han podido quebrar"
Primero se desplegó una inusual campaña mundial para colocar a Alex Saab como "el testaferro estrella", el personaje que revelaría al mundo la "terrorífica" forma de un gobierno revolucionario evadir un bloqueo imperialista y conseguir alimentos y medicinas a su pueblo. ¡Claro! Jamás dijeron la verdad, pero vendieron a Saab como un verdadero "terrorista" agente de la más infernal operación en el planeta... ¡Comprar medicinas y alimentos donde se pudiera! No sobraban los sitios que se arriesgaron a vendernos cosas; los empresarios mexicanos pegaron la carrera al oír los primeros triquitraques, no los culpamos, son capitalistas y el apego al dinero en gente con esa mentalidad es fuerte. Para ellos proteger su dinero a como dé lugar es su vida. Pero surgió un personaje extraño que se arriesgó, que ha soportado todo tipo de vejámenes y por la narrativa imperial el hombre se ha puesto más duro que sancocho de pato. Ahora resulta que la DEA, CIA y Cia, el imperio pues, donde la separación de poderes es un cuento chino, con el perdón de los chinos, para hacerse propaganda, permiten, así de sencillo, que se revele y se desnude a "uno de sus agentes". Porque Alex Saab es tan arrecho que se cala ese montón de coñazos, agresiones a él y a su familia para terminar siendo agente de los que le están dando coñazos... ¡Verga, le echaron bola al invento! Pero, siempre hay un pero cuando se trata de mentir, así como no hay crimen perfecto, tampoco hay coba perfecta, pero esta de que Alex Saab es agente de la DEA, o colaborador con la DEA es algo así cómo intentar convencer que un dolor de muelas se te quita si te destruyes la cara con una piedra y sin anestesia.
Elucubrando un poco, me permito afirmar que al imperio se le enredó el papagayo con eso de Alex Saab; la agresión a este personaje generó un afecto del pueblo venezolano al mismo, y no solo del venezolano, sino de otras partes del mundo. Como es tan raro conseguir actos de esta naturaleza, es decir, actos donde un empresario se arriesga a perder incluso su libertad, además de su dinero... Se olvidaron de la carta de Saab donde revela, cosa que la derecha no desmintió, cómo se le pedía parar el suministro de alimentos al país por unos meses, con el objeto de darnos el golpe mortal y hacer efectivo totalmente el cerco al que pretenden someternos. Pero el hombre se la jugó, y quien se juega con los fascistas del imperio asumen sus consecuencias graves y Alex Saab lo asumió.
Permítanme decirles algo; eso que hizo Saab, si no hay una conciencia revolucionaria, una profunda humanidad, un enorme sentido de la ética, jamás se hace. El problema es que el imperio supone que todo tiene un precio, porque ellos si lo tienen; el revolucionario es de otra pasta, tiene otro sentido de la vida y por eso es que lograremos derrotar a cualquier imperio por poderoso que éste sea. Si las cosas las hiciéramos por dinero, la oposición en Venezuela sería mayoría, porque si en algún movimiento político se mueve a borbotones el billete es en los partidos de la derecha, especialmente aquellos que le mueven la colita al imperio.
Por eso y por muchas cosas más, sigo sosteniendo, como hombre del pueblo, como revolucionario lo que escribí sobre Alex Saab y que me permito agregar el enlace https://www.aporrea.org/actualidad/a306346.html