Recordando cuando el 1° de junio de 1954 Marco Pérez Jiménez, firmó el decreto para la construcción del Hotel Humboldt.
Cuando uno entra a la publicidad que actualmente la gerencia del Hotel Humboldt mantiene para invitar a los futuros visitantes, se consigue con esta frase, "El Hotel es una isla en medio de un verde apabullante, un Faro que se divisa desde casi cualquier rincón de Caracas, un homenaje a la luz del trópico". Y de seguro, esa expresión gráfica es lo que este majestuoso sitio siempre ha representado para los caraqueños y para quien lo ha visitado.
Hotel Humboldt |
Marco Pérez Jiménez a pesar de haberse convertido en un feroz enemigo de sus opositores políticos, fue un gran modernizador de la Ciudad de Caracas. Entre tantas obras ejecutadas por el dictador, debemos recordar que el 1° de junio de 1954 aprobó el Proyecto para la construcción del Hotel Humboldt.
El nombre de Humboldt, fue en homenaje al berlinés Alexander Von Humboldt, quien a su paso por Venezuela nos dejó su profunda herencia histórica. El Hotel Humboldt se considera una de las obras de mayor significación arquitectónica del siglo XX en Venezuela.
En el Cerro Ávila ahora llamado el Waraira Repano por los medios oficialistas y no así por el pueblo caraqueño, se construyó esta portentosa obra, de mano del Arquitecto Tomás José Sanabria, creador también del Centro Libertador, el edificio del Banco Central de Venezuela y el edificio de la Electricidad de Caracas.
Desde el momento en que Pérez Jiménez firmó el decreto hasta su inauguración tan solo pasaron unos 48 meses, porque el 29 de diciembre de 1956, el Hotel Humboldt le abrió las puertas a todos los ciudadanos del país y el mundo que han tenido la dicha de visitarlo.
Y como lo refieren desde el Hotel, esta joya arquitectónica "es una cápsula del tiempo que nos lleva a los años cincuenta, donde la historia y la tecnología se unen para brindar una experiencia a más de 2.140 metros sobre el nivel del mar".