Habían llegado militantes de todas partes del país, era su prueba de fuego en la línea electoral, la nueva fuerza comunista estaba haciendo gala de su lema de campaña: “imaginación contra dinero”. Un José Vicente te recibía de cuerpo entero con aquel afiche del otro José, el medico José Gregorio Hernández. El Nuevo Circo de Caracas estaba hasta los tequeteques, nosotros la ultra izquierda, la misma de aquella militancia bien vivida, nos habíamos parapetados cerca de la tarima para gritar ¡FLN! ¡FALN!.
Es el año
1973, antes de comenzar el mitin, Ali canta, le levanta la mano al candidato
del MAS y habla de la unidad de la izquierda con su himno unitario,
“Dispersos”
Veníamos de
la última confrontación política y del divorcio con los camaradas
de Douglas Bravo y el PRV. Salimos comisionados, el Cabito y el otro
Ali, el Ali Rodríguez que hoy conocemos, hablamos de unidad, de sus
comité por la unidad popular, aceptamos su sueño unitario y salimos
los CUP y la Tendencia Revolucionaria al PASO de Tirso Pinto, a marchar,
cantar y gritar consignas a favor del ahora nuestro candidato José
Vicente. Es el año 1983, nosotros militando y Ali cantado, hablando
y luchando.
Un día, de
esos que no se olvidan, me hablaron de tu trasnocho y tu guitarra
rota, y pensé en tu canto, ¡los que mueren por la vida no pueden llamarse
muerto! Hoy seguimos en esta militancia intensa por los tuyos y por
la vida, siempre recordándote.