Una vez anunciados, la semana pasada, los ajustes cambiarios por parte del Ministro Ramírez, y luego de las declaraciones de Alejandro Fleming, Presidente del CONACEX, debe hacerse un verdadero análisis y llamado a conciencia de las medidas adoptadas por parte del Ejecutivo Nacional, y en este caso, me refiero a los cupos para viajeros al exterior del país.
Ciertamente llama la atención varios aspectos, uno de ellos, es las cifras en alza con picos bruscos que sufrió la asignación de divisas para las personas naturales (compras electrónicas, pagos en el exterior para consumo con tarjetas de créditos, afectivo para viajeros, y efectivos para viajes de menores al exterior del país) en el año 2013 con respecto a los años inmediatamente anteriores.
De igual forma, si se analiza dichos datos, con los aportados por el Director Nacional del SAIME, donde reseña que de igual forma, hubo en el año 2013, un salto exponencial en la solicitudes de pasaportes con respecto a los años anteriores, entonces se puede pensar ciertamente, que existe un sector de la población, o grupos de mafias, que efectivamente están detrás del despilfarro de las divisas asignados por CADIVI, es decir, los llamados “raspa cupos”.
Otro dato a considerar, es que en el año 2013 se asigno cerca de 8 mil 500 millones de dolares por ese concepto, y si se compara con la asignación en préstamo por parte de la Troika (BCE, Comisión Europea y FMI) a Grecia, para un rescate financiero de su economía, en el marco de una crisis estructural de su modelo económico, este rescate no supero en su primer aporte, los 7 mil millones de dolares. Entonces, quiere decir, que efectivamente en nuestro país, el tema de fuga de divisas por este concepto es bastante grosero.
Sin embargo, el gobierno por ineficiencia, ineficacia y falta de la capacidad técnica debida, no es capaz de desglosar y detallar dicho dato, a fin de tomar las decisiones correctas, oportunas, y sobre todo que busquen el equilibrio, entre quienes si hacemos (como personas naturales) uso efectivo y en cumplimiento de la ley de las divisas otorgadas y adoptar medidas correctivas contra quienes efectivamente hacen uso ilícito de las mismas.
De esos 8 mil 500 millones de dolares, sabemos que 3 mil millones se adeudan al sector aeronáutico (lineas aéreas), el restante seria para los dolares de viajes (tarjetas de crédito, compras electrónicas y efectivo de viajes, adultos y menores). En función de dichos datos macros, uno se pregunta: Que estudió y datos se tienen para determinar cuáles son los países de mayor demanda?; que datos se tienen para determinar en cuáles destinos se gastan más las divisas?; qué datos se pueden tener para determinar que los viajeros “adoptan” niños para solicitar el cupo de efectivo para menores de edad? Tal como lo señalo Alejandro Fleming, para justificar que ahora la nueva providencia señala que independientemente del numero de menores que pueda tener el grupo familiar, el cupo se reduce a uno sólo (entre 300 y 500 dolares, según el destino de viaje). Es decir, una soberana estupidez y locura de argumento sin argumento, y que sin duda afecta sobremanera a las familias.
Ciertamente, coincido con el Dr. Eliezaer Alvaro en su escrito por este medio (http://www.aporrea.org/
Todo parece indicar, además de datos que uno va conociendo en las instancias correspondientes, donde se hicieron las reuniones técnicas preparatorias para la toma de decisiones, que lo que existió fueron directrices políticas de algunos irresponsables gubernamentales, con sesgos políticos, sin los datos, estadísticas y análisis científicos serio, que pudiesen demostrar las fallas del sistema, a fin de tomar los correctivos necesarios y sobre todo para tomar las decisiones políticamente más correctas en beneficio de la clase trabajadora (media y popular).
En distintos escritos, Carlos Lanz Rodríguez, específicamente en uno que trata sobre la eficacia y calidad en la gestión pública (http://www.aporrea.org/
Esta situación es la más franca demostración de ello. Las decisiones en materia cambiaria, están afectando a la clase trabajadora, los correctivos no se toman en las áreas medulares, y ello es porque realmente no existe voluntad técnica de hacer las cosas bien. Las decisiones adoptadas y anunciadas meten a todos en un mismo saco. Las medidas apuntan a controlar a los infractores, pero en ello pagamos la mayoría de los venezolanos que respetamos la legalidad. Son decisiones y políticas punitivas y no correctivas.
Finalmente, como lo ha señalado Alberto Noria en su columna Cianuro en Gotas N° 60 (http://www.aporrea.org/
Por ello, rescatar la Misión Eficiencia o Nada es fundamental, dotar a los directivos públicos de las herramientas técnicas es medular, y dejar de rotar a los mismos ineptos de siempre en los cargos de decisión política es trascendental para desarrollar y consolidar la revolución.
josermendoza@hotmail.com