Chávez nos invitó, exigió, sugirió, y concretamente nos ordenó, estudiar nuestra realidad cotidiana y profunda, hostil y bonita, incierta y esperanzadora, dura y prometedora, capitalista y en camino al socialismo. Esta fue su solicitud.... “Hay que leer y leer, no sólo en los libros, sino en la realidad circundante. Es innegable la poderosa incidencia de la lectura en la formación de una nueva subjetividad: lo que necesitamos para construir de verdad verdad nuestra sociedad”. Hugo Chávez (*).
En tal sentido, refiero que desde el día lunes 15 de agosto, ha aparecido por las redes sociales, una convocatoria e invitación a hacerle un boicot a dos productos, que forman parte de la dieta diaria del venezolano: el platano y el cambur. El primero ha llegado a tener un precio de hasta 1.000,oo Bf por unidad, mientras que el cambur se vende el kilo hasta por 800 bolivares. Esto sucede en un país que es productor de platanos y cambures.
Frente a la guerra económica-alimentaria, que nos ha declarado el gran capital y la burguesía -con Lorenzo Mendoza a la cabeza-; nuestro pueblo está aprendiendo a hacer las arepas con insumos distintos a la harina pan, ya que esta ha ido perdiendo seguidores por escurridiza, por cara, por prestarse al bachaqueo y por tener el pedigree del malinche Mendoza.
Nuestra gente está haciendo arepa e' platanos: lo sancochan, lo trituran, lo amasan, le dan su hermosa forma redondita y pal' budare; cuando ya suena como un tamborcito, añádale mantequilla y queso blanco rallao. Eso lo que queda es mi amor. Pues bien, subieron los platanos.
Lo mismo ocurrió con la yuca; arepa e' yuca -como decía Chávez-, pero la subieron a 700 bolos.
.- A esta sardinita la acompañamos con ensaladita y guineo sancochao,
.- Guineo? Qué es eso?
.- Cambur veeeerde, caraqueño; como se ve que ustedes lo que comen es comida chatarra.
La gente ha ido dejando de tomar refrescos para hacer jugos. Pues subieron las frutas y escondieron el azucar. Bueeeno, tomaremos papelón con limón. Entonces nos subieron el limón a 900 y la panela de papelón la pusieron en 4.000 bolivares; si señor, asi mismito, a cuatro mil bolos.
Es que nos tienen agarraos por las que te conté. El gobierno coñazos con ellos y ellos patá y kun-fu con nosotros, con nuestras mujeres y madres. Entonces se tendrán que meter varios de sus productos por el orificio de la audición, porque....
Vamos a hacer boicot a los productos con los que nos están golpeando. Devolvámosle la papa caliente, hasta que bajen los precios. Corramos la voz y hagamos el uno x diez (1 x 10) con esta información:
del 15 al 21: dejaremos de comprar platanos y cambur;
del 22 al 29: nada de tomates ni pimentón;
del 30 al 6 de septiembre: nos olvidamos de la cebolla y el papelón;
del 7 al 15: cero Cebollín y ajos.
Por otro lado; Que esta iniciativa sirva para estudiar nuestro comportamiento como pueblo y como consumidores, en medio de este asedio alimentario. Si esta propuesta tiene acogida y receptividad, deberíamos educarnos en ella, para luego ir definiendio la posibilidad de ir ajustando la estrategia del boicot como arma revolucionaria y de contraofensiva. Vayamos a los lugares de expendio de platanos y cambures a ver si se ha logrado el objetivo.
Convirtámonos en consumidores conscientes.
Por el derecho a la alimentación y a los precios justos.
Venceremos
atencionsocialista@gmail.com
