No tengo, lo reconozco, toda la información necesaria para llegar a esta conclusión; a pesar de ello, me atrevo a hacerla porque he escuchado y he vivido en “carne propia”: las angustias, los malestares, las protestas y las críticas cotidianas de nuestro pueblo, en los estados Táchira y Zulia. No sé si en otras partes del país esto ocurre, pero no me extrañaría. Voy a ser breve. Creo que está demás explayarse en explicaciones. Sólo voy a mencionar: hechos, situaciones, reflexiones que se hacen en las colas, “brollos que no cesan” y reclamos que he escuchado, en distintas lugares.
Los Bancos, en lugar de aumentar el monto para retirar efectivo lo disminuyen cada vez más. Ejemplo, en el Mercantil de Táriba, hace unos meses daban 30 mil, hace una semana 20 mil y esta semana 15 mil. Y para sorpresa de muchos, a veces, te obligan a recibir billetes de baja denominación (10, 20 y 50) incluso a los pensionados ¿Dónde está SUDEBAN y las órdenes del Presidente Maduro, del Ministro Lobo, de la Directiva del BCV y demás órganos del gobierno?
Cada día más negocios o comerciantes, que usaban tarjeta de débito, han eliminado este servicio porque otros bandidos se roban los cables de CANTV o de fibra óptica -que los venden luego en la frontera con Colombia- o tienen cualquier otro pretexto; se atreven, incluso, a cobrar una comisión o, sencillamente, ya no les funciona el punto, siempre está muy lento y terminan forzándote a pagar en efectivo sino olvídate de hacer la compra. Por otra parte, cuando funciona el punto, te obligan, muchos de ellos, a tener que decirles, abiertamente, tu clave secreta o incluso pagar una comisión adicional. Increible: ¿Verdad?
Los avances de efectivo con el uso de tarjeta de débitos son casi imposibles o cada día te cobran un mayor porcentaje y Chíiito.
En algunos bancos, para depositar grandes cantidades en efectivo, los cajeros (empleados), muchas veces, ponen como condición el pago de una comisión al depositante (lo he visto) o hacen una transacción particular, para quedarse con el efectivo, suponemos con la complacencia y acuerdo previo con los gerentes de los bancos. Lo cual es una contradicción: necesitando efectivo para entregar a los clientes que lo requieren, a la vez, no los quieren recibir para negociarlos ¿Y entonces, cómo es esto?
Los cajeros automáticos sólo entregan cantidades limitadas de dinero durante el día y hay que hacer largas colas para poder sacar 10 mil bolívares (en el caso del Mercantil de Táriba) lo que genera mucho malestar, incomodidades y pérdidas de tiempo que afecta la productividad y la salud social. De paso, no se sabe si como parte de un plan premeditado o por la molestia de algún usuario, ahora muchos cajeros están dañados o no funcionan. De tres cajeros sólo uno funciona.
La gente comenta en las colas de los bancos y de los cajeros: “Lo que nos permiten sacar no nos alcanzan ni para un cartón de huevos”. No sé si es totalmente cierto, pero me acaba de llegar este mensaje que me impulsó a escribir este artículo:
“Una gandola con 36 mil litros de gasolina vale 36 mil bolívares y un cartón de huevos de 36 huevos vale 38 mil bolívares”
Poco más o menos por ahí van los tiros ¿Cuánto cuesta una botellita de agua? Vale mucho más que un tanque de gasolina. Me dijeron que una pimpina de gasolina la pagan en el otro lado de la frontera en 200 mil bolívares ¿Cuánto vale en Venezuela? Creo que no es necesario ahondar en este tema. Lo que está a la vista no necesita anteojos, necesita acción.
Numerosos venezolanos y colombianos viven del tráfico de gasolina hacia Colombia y dicen que numerosos militares, algunos de alto rango, se han hecho millonarios con este sencillo negocio ¿Hasta cuándo lo vamos a permitir? ¿Quién le pone el cascabel al gato? ¿Quiénes se benefician con el “negocio” del contrabando de gasolina en la frontera?
En los bancos se ve gente entrar y salir con grandes cantidades de dinero mientras cientos o miles de usuarios, buena parte de la tercera edad, viven haciendo largas colas y pasan muchas incomodidades: me consta.
Los servicios que prestan los bancos por vía internet cada día están más lentos y son casi misión imposible acceder a algunos de ellos. Pretextos: se daño la plataforma, se cayó el sistema, se robaron la fibra óptica y paremos de contar. Los bancos parecen inventar mil maneras de evitar que los usuarios puedan sacar su dinero en forma fácil y oportuna. Terminamos con un dinero retenido que cada día se devalúa mucho más.
En el Táchira, existen larguísimas colas para poder llenar el tanque de la gasolina y hay cobro de comisiones para poder obtenerla con facilidad.
Seguramente, estas son pequeñeces frente a problemas más profundos que existen. Probablemente, usted, estimado lector tiene muchos más ejemplos que contar. Esto sólo es una ilustrativa muestra.
En fin, son sólo algunos detalles que, de no corregirse antes del 15 de Octubre, no tenemos que ser adivinos, profetas o brujos para saber que esta pudiera ser la gran oportunidad de much@s venezolan@s que están loc@s por pasar factura y poner en su sitio a quienes no pudieron enfrentar los problemas económicos en forma efectiva, creativa y oportuna. El partido termina en el noveno inning, no antes.
El tiempo parece agotarse. Y también la paciencia. Sé que much@s venezolan@s nos mantendremos resistiendo y confiando ¿Hasta cuándo? No lo sé. Lo que si estoy seguro es que hay que actuar con prontitud y creo que estas tres medidas radicales, contundentes, de alto impacto pudieran ser favorables para el triunfo electoral y para realizar ajustes que pudieran mejorar la economía en el corto plazo:
1. Nacionalizar o estatizar la Banca: Oferta hecha y no cumplida.
2. Aumentar, sustancialmente, el precio de la gasolina y garantizar un servicio normal, eficiente y seguro en las gasolineras del país.
3. Establecer y hacer cumplir, con rigor, leyes reguladoras para evitar la corrupción en los servicios bancarios y en el contrabando de gasolina. O ponemos orden o se incrementará la entropía social.
Si no lo hacemos rápido, incluso antes del 15 de Octubre, los resultados electorales nos serán desfavorables y la economía no logrará despegar como estaba previsto. Es lo que intuyo. Me hago vocero de much@s venezolan@s que ya no soportan tanto ofrecimiento incumplido. Por supuesto, esta propuesta es una apuesta y pudiera no resultar, por lo que ya deberían haber estudios previos sobre sus ventajas y desventajas, así como sus consecuencias, en distintos contextos o escenarios.
No tengo dudas que en estos años hay un sector privilegiado de la población que se ha beneficiado de las operaciones bancarias y de las especulaciones financieras, del contrabando de extracción, especialmente de la gasolina y de la debilidad e ineficiencia de los mecanismos de seguimiento, monitoreo y control de los mismos ¿Hasta cuándo?
Acaso ¿no será que parte de la llamada “guerra económica” la propiciamos nosotros mismos cuando no tomamos decisiones oportunas sobre temas sobre los cuales tenemos gobernabilidad? ¿En qué anda la Comisión de Economía de la ANC? ¿En qué quedaron las medidas económicas presentadas por el Presidente Nicolás Maduro a la ANC?
Póngase las pilas y quítense las alpargatas porque lo que viene no es joropo ni vallenato, si seguimos así, viene Rock y del ácido.