Retroceda en la historia. Sitúese en la Guerra de la Independencia contra el Imperio de España. Suponga que habían sido inventadas las computadoras, existía CNN y las agencias internacionales de noticias, empresas de comunicación que, mediante la manipulación y la tergiversación de la información, se alinean con la explotación y la esclavitud impuesta por el imperio español, tal cual como lo hacen actualmente con la potencia estadounidense.
Ubicado en el tiempo y el espacio sugerido, lea entonces esta información apócrifa redactada por el periodista colombiano Álvaro Uribe Vélez, corresponsal en Caracas de una agencia internacional de noticias.
Capturan computadora de Simón Bolívar
Caracas, marzo de 1815.
Álvaro Uribe Vélez, Reportero de la Casa de Nariño -RCN-, periodista al servicio del Imperio.
No hay que engañarse. El extremista venezolano Simón Bolívar es un ejemplo valedero del resentimiento de la subversión internacional contra España, reverendísima Madre Patria a la que le debemos admiración, amor y respeto. ¿Cuándo es que estos terroristas de oficio lograrán entender la noción de que estamos comprometidos de por vida a respetar la cultura y la erudición que representa España?
He aquí la prueba de lo que decimos sin ambages. En una rueda de prensa realizada ayer en Caracas, el jefe del gobierno de la Capitanía General de Venezuela, mariscal de campo Pablo Morillo y Morillo, conde de Cartagena conocido como El Pacificador, mostró a los periodistas de los diarios nacionales y corresponsales extranjeros una comprometedora computadora portátil propiedad del terrorista venezolano Simón Bolívar, en la que se encontraron documentos que demuestran la actividad subversiva que realiza este peligroso agente de la rebelión continental.
Apelando al dicho popular de “mírame, pero no me toques”, el mariscal de campo Morillo refirió que el citado ordenador fue capturado luego que se le cayera al forajido Bolívar en el momento de huír a galope tendido en su caballo blanco cuando cometía una de sus acostumbradas fechorías en el Campo de Carabobo, donde acostumbra esconderse para emboscar a las tropas españolas que actúan militarmente en el llamado Plan Venezuela.
El Capitán General, golpeando fuertemente con una lanza, demostró la capacidad de resistencia de la computadora fabricada en Irán y dotada de una batería de uranio empobrecido.
Al referirse a los documentos encontrados en el disco duro de la susodicha computadora, explicó que aparece el texto completo sobre un Decreto de Guerra a Muerte, que en el transcurso de los próximos días comenzarían a aplicar las hordas intolerantes que jefatura el fulano extremista Bolívar, alias El Libertador.
Morillo, en una incontrolable berrequera, leyó el documento en el que el subversivo decreta: “Todo español que no conspire contra la tiranía en favor de la justa causa por los medios más activos y eficaces, será tenido por enemigo y castigado como traidor a la patria, y por consecuencia será irremisiblemente pasado por las armas. Por el contrario, se concede un indulto general y absoluto a los que pasen a nuestro ejército con sus armas o sin ellas; a los que presten sus auxilios a los buenos ciudadanos que se están esforzando por sacudir el yugo de la tiranía”.
El mencionado documento bolivariano que se encontró en la bacana computadora portátil de quien se autodenomina “Brigadier de la Unión, General en Jefe del Ejército del Norte y Libertador de Venezuela”, expresa en su párrafo final lo siguiente: “Españoles y canarios, contad con la muerte, aun siendo indiferentes, si no obráis activamente en obsequio de la libertad de la América. Americanos, contad con la vida, aun cuando seáis culpables”. Morillo dijo que “de aplicarse este decreto, Bolívar sería llevado a la Corte Internacional de Justicia de La Haya acusado por crimen de lesa humanidad”. Considero, como periodista imparcial, que este es el momento histórico para declarar terroristas a las tropas que se autodenominan patriotas.
Además en la computadora de hallaron fotos digitalizadas de una mujer que fue identificada por los servicios secretos de España y del DAS como Manuela Sáenz Aispuru, calificada por Morillo como una “guerrillera ecuatoriana que mantiene relaciones amorosas con Bolívar”.
También se descubrió el Manifiesto de Cartagena, documento en el que Bolívar explica que “a cada conspiración y acto de corrupción y desobediencia, sucede el perdón que no hace más que mandar a hacer el crimen, más aún cuando la República se encuentra en construcción social y política” –apuntó Morillo.
Asimismo se encontró el documento insidioso que el hombre más buscado por el Imperio español leyó en el Congreso de Angostura. En el citado manuscrito, según lo leído por Morillo, el subversivo Simón Bolívar se califica sin ambigüedad como “un hijo de la infeliz Caracas”. En la citada arenga insurrecta, explicó el máximo jefe de la Capitanía General de Venezuela, el extremista anti español denunció “lo pernicioso que ha resultado que los legisladores se hayan preocupado más por tomar modelos políticos foráneos que por promover la unificación de la República, lo que contribuyen a su disolución, por cuanto los legisladores olvidan las consideraciones sociológicas, históricas y antropológicas de los pueblos de nuevo continente”.
Igualmente se halló una carta fechada en Jamaica dirigida a un personaje identificado como Henry Cullen, presunto súbdito británico residenciado en Falmouth, cerca de Montego Bay, en la costa norte de la isla de Jamaica. El mariscal Morillo dijo que los organismos de seguridad de España han efectuado varias visitas domiciliarias en Jamaica con la finalidad de dar con el paradero del sujeto referido como Henry Cullen, en lo que las autoridades españolas denominan como “la Carta de Jamaica”.
Morillo resaltó el peligroso racismo que representa Bolívar al mostrar una fotografía digital donde el jefe guerrillero venezolano aparece al lado del afro descendiente Alexander Petion, insurgente negro nativo de Haití.
Por sugerencia de este corresponsal realista, el linajudo mariscal Pablo Morillo aceptó enviar el computador que pertenecía al terrorista venezolano Simón Bolívar a Estados Unidos. De tal modo, los expertos agentes de la CIA examinarán los otros documentos subversivos que están en el disco duro de la computadora, ya que estos no quisieron abrir a pesar del trabajo altamente profesional realizado por conocidos hackers al servicio de la Corona de España.
Hasta aquí les dejo mi reportaje, ya que mañana viajaré a Ecuador, donde se encuentra activado subversivamente otro taliban y sedicioso venezolano conocido como Antonio José de Sucre, alias el Mariscal de Ayacucho, a quien las excelentes tropas realistas han detectado, mediante la utilización de satélites, durmiendo recostado a las paredes del volcán Cotopaxi, montaña que se mantiene cubierta de nieves perpetuas.
Seguiremos reportando, porque mi próximo viaje a Ecuador puede resultar un auténtico bombardeo mediático informativo.