Hubiese preferido otra muerte… A 15 años de la salida de CAP

El 20 de mayo de 1993, el Tribunal Supremo de Justicia decide que hay méritos suficientes para enjuiciar al Presidente Carlos Andrés Pérez, por malversación de al menos 250 millones de dólares de la partida secreta. Este juicio fue iniciado por quien fuera Fiscal General de la República, Ramón Escobar Salón, ex compañero del partido Acción Democrática y quien fue su Canciller en el primer gobierno. Para algunos un pase de factura, ya que éste último fue despedido en forma abrupta de su cargo. CAP estuvo preso algunos meses y luego por su edad se le dio casa por cárcel, vino su expulsión del partido Acción Democrática y dio inicio a un partido de poca duración APERTURA, luego su auto exilio, que se ha mantenido durante todo el gobierno del Presidente Chávez.

El tiempo que transcurre desde la salida de CAP, el gobierno, interino de Ramón J. Velásquez hasta la elección de Caldera en diciembre de 1993, fueron de los meses más tensos en la vida política nacional. El ex presidente de la república y sus compañeros crearon toda una política de violencia, como los sobres bombas, atentados que causaron muchísimo temor en la población. Por primera vez en la historia política de Venezuela desde los Monagas un Presidente de la República es sacado del ejercicio del poder por acusación de corrupción. Los antecedentes de este suceso se remontan a toda la vida de un político que desde muy joven, pero sobre todo cuando le correspondió ser Ministro de Relaciones Interiores en el gobierno de Rómulo Betancourt, asumió la violencia, la represión sistemática contra los movimientos populares. Tanto en este periodo ministerial y más aún en su primera presidencia (1973-1978) las denuncias sobre violación a los Derechos Humanos fueron permanentes, pero la justicia cómplice nada hizo.

CAP llega a su segunda presidencia envuelto en la imagen de la bonanza de su primer período, la nacionalización petrolera y el pleno empleo. Todo ellos profundamente contradictorios y más de mito que de realidad, pero este seria tema de otro análisis. Apenas toma su segunda presidencia, después de la juramentación que se convirtió en una especie de coronación, en vista de lo fastuoso que fue éste acto, sólo dos semanas después anuncia la incorporación plena al neoliberalismo, la entrega absoluta al FMI, puesta en marcha en un paquete económico que afecto profundamente el ya debilitado ingreso familiar. Ya desde el viernes negro de 1983, Venezuela era otra, el festín petrolero que dio pié a los más denunciados casos de corrupción había entrado en crisis. La repuesta popular no se hizo esperar, el 27 y 28 de febrero de 1989 el pueblo toma las calles, y no llegó a tomar el poder por falta de organización. La repuesta del gobierno fue el asesinato y la represión compulsiva. Esto indignó y colmó los ánimos de los jóvenes militares, que junto a organizaciones políticas, venían ya desde hace tiempo planificando una conspiración contra el régimen semidemocrático, que además de represivo sólo beneficiaba a una elite. De esta manera se producen los alzamientos del 4 de febrero y el 27 de noviembre de 1992.

Toda esta inestabilidad política y social iba acompañada de una crisis económica cuyo indicadores más evidentes fueron la desenfrenada inflación, los índices llegaron cercanos al 100% y una tasa de interés que produjo la quiebra de empresarios y también de particulares, quienes vieron perder sus bienes. Esta crisis paradójicamente al tiempo que no cesan las denuncias de casos de corrupción. Todo este contexto forma parte del proceso que hizo posible que, por primera vez, por la vía legal, sin conspiraciones militares ni golpes de estados, saliera un presidente indigno de la máxima jefatura nacional.

Ahora con el mayor cinismo y descaro, como si gobierno y pueblo no tuvieran memoria, salen los secuaces de CAP a solicitar se le permita al ex presidente --como una medida de gracia- pasar sus últimos años de vida en su tierra natal. Como si ignoráramos las causas por las cuales ese ex presidente está fuera del país, las causas de la salida de su gobierno y porque no decirlo por todas las razones históricas por las que lamentablemente no fue enjuiciado, pero que no olvidamos. Como si fuera poco éste hombre que es puesto hoy a la imagen pública como “el pobre ancianito” que pide clemencia, se ha dedicado desde el exterior hasta el día de hoy a propulsar una campaña conspirativa para incitar a factores internos y externos a la salida por la fuerza del gobierno del Presidente Chávez. Traidores y asesinos de la patria NO VOLVERAN.

prodriguezrojas@hotmail.com


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Pedro Rodríguez Rojas

Sociólogo e historiador (UCV). Magister en Historia Económica (UCV). Maestría en Tecnología Educativa (UNESR). Doctorado en Ciencias Económicas y Sociales. (UCV). Doctorado en Historia (UCV). Ha sido docente de Pre y Postrado en la UCLA, UNA, UPEL. Actualmente de la UNESR en la categoría de Titular. Ha sido investigador del Centro de Historia para la América Latina y el Caribe, OEA, CELARG, Congreso de la República, Centro OPEP, entre otros. Ha sido Asistente de Investigación de los Doctores Ramón J. Velásquez, Federico Brito Figueroa, Héctor Malavé Mata y D.F. Maza Zavala, entre otros. Ex-Director de Postrado de la Universidad Simón Rodríguez-.Barquisimeto. Ex Coordinador del postgrado en Gerencia Cultural. Coordinador del doctorado de educación UNESR. Coordinador de la Línea de Investigación Filosofía y Sociopolítica de la Educación del Doctorado en Ciencias de la Educación. Presidente de la Asociación Civil Museo Histórico Lisandro Alvarado 2002-2010. El Tocuyo. Miembro fundador de la comisión de recursos hídricos de El Estado Lara .Asesor de la Misión Sucre y Aldea Universitaria de Morán. Vocero asesor de consejo comunal Los tres brazos y San Pedro. Entre los reconocimientos recibidos podemos mencionar: Premio Regional (Lara) sobre la obra de Andrés Eloy Blanco (1996). Premio Estimulo al Investigador UNESR, mayor productividad Científica del Núcleo Barquisimeto desde 1997 hasta la actualidad. Investigador ONCIT PEI Nivel. C. Premio CONABA. Premio Ensayo Histórico: Federico Brito Figueroa, Aragua 2001. Premio Ensayo Antonio Arráez: 450 años de la fundación de Barquisimeto, .2002. Premio Ensayo Educativo, Universidad de Oriente, 2004, Premio Primer Concurso Historia de Barrio Adentro del Ministerio de la Cultura, 2009. Premio sobre Legado de Chávez, Maturín, (2013). Premio Literario Rafael María Baralt, Maracaibo (2014). Más de sesenta publicaciones entre libros y artículos en revistas arbitradas a nivel nacional e internacional sobre ciencias sociales y filosofía. Es articulista en varios periódicos a nivel nacional. Coordinador de la Revista de filosofía de la educación TERÊ. Entre sus libros podemos mencionar: Juan Pablo Pérez Alfonzo, La economía venezolana, La Universidad frente a la globalización y la posmodernidad, Pensar América latina, América latina en la globalización, Educación para el Siglo XXI y La Ética Socialista. Junto a Janette García Yépez ha escrito varios libros sobre la historia de El Tocuyo, a saber: Personalidades tocuyanas, La cultura tocuyana, La cañicultura en El Tocuyo, El café y los resguardos indígenas en Morán, Crónicas tocuyanas, El Rio Tocuyo, la educación secundaria en El Tocuyo, La vida cotidiana en El Tocuyo, Memoria fotográfica de El Tocuyo, La Personalidad Intima de Lisandro Alvarado y Cultura y Tradiciones Tocuyanas.

 pedrorodriguezrojas@gmail.com

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