Era un día triste y lúgubre, era un día lleno de nubes, el viento traía noticias de dolor y esperanzas rotas, fue el fuego, el humo, la pólvora y el dolor, la etiqueta de ese nefasto día, 11 de septiembre de 1973. Ese fue el día, de uno mas, de un artero golpe de estado más, de una ingerencia norte americana más, pero algo si es seguro amigos, no fue una muerte más.

Salvador Allende Gossnes, medico de profesión, político de convicción, revolucionario de corazón. Hombre grande, hombre de letras, hombre de leyes, tu gran amor a la paz, y a la conciencia social fue tu perdición, no armar a tu pueblo tu gran error, pero tu gran ejemplo moral, la entrega de tu alma, la máxima demostración de amor universal.

Chile, tierra de fuego, tierra de grandes cipreses, tierra de Lucila Godoy y Neftali Reyes, tierra de grandes cumbres y hermosas costas, patria del mas grande luchador revolucionario de paz que América del sur dio, tierra tuya Allende, tierra de letras, apadrinadas por Andrés Bello, tierra hermosa, tierra buena, tierra donde una vil rata llamada Pinochet, a las manos del imperio permitió actuar.

Fue un día triste, fue un día doloroso, murió un hombre sin igual, murió la voz de un pueblo, murió la dignidad del sur, corrió la sangre de grandes luchadores sociales, como olvidar a Víctor Jara, hoy en este homenaje a ti mi gran héroe social, Salvador Allende.

Ese día murió el hombre, se acabo la voz, se pudrió la carne, pero nació el dios, nació el mito, nació el ejemplo, renació la esperanza social en la América toda, esa esperanza que estuvo acallada por treinta años, pero que hace diez resurgió, con fuerza y con luz propia, con luz de amor y dignidad revolucionaria.

Hoy el faro de la dignidad y de la esperanza suramericana esta al norte, pero al norte del sur, esta en Venezuela, donde nuestro comandante, veinte años después de tu desaparición, irrumpió en nuestra vidas, aquel inolvidable 4 de febrero, irrepetible día, donde la esperanza del espíritu de Allende renació, en la vida de nuestro comandante Hugo Chávez.

Hoy en día, el ejemplo de Allende esta mas vivo que nunca, hoy Allende vive en Venezuela, en el ejemplo pacifista de nuestro gran comandante, el ejemplo de Allende vive en Evo, y en la hermosa republica de Bolivia, Allende vive en el corazón de Correa, en esa gran patria del Ecuador, hoy su alma esta mas viva que nunca.

El tiempo inclemente y poderoso, una vez mas demuestra, que solo aquellos de digno ejemplo y de vida buena, subsisten en el tiempo y traspasan esa frontera inmaterial del recuerdo, calan en los corazones jóvenes, reviven cada vez que una llama social se enciende, son esos hombres, los que perduran en el tiempo, los que renacen constantemente, son héroes de la inmortalidad.

Allende, hoy mas que nunca vive, vive en nuestros corazones, vive en nuestros gobiernos, vive en nuestras alegrías, pero también vive en nuestros dolores, y si Allende fue un hombre de letras, un hombre de razones, y por eso hasta el ultimo dia decidio resistir el solo, y no ensangrentar a su pueblo en las oscuras manos de los malditos agresores, hoy la nueva luz de la revolución, en su doloroso error a aprendido.

Hoy la revolución, al igual que ayer, es pacífica, es con ideas, es con palabras, es con leyes, pero ojo, la dolorosa lección de Allende se aprendió, y se aprendió con sangre, con carne viva, con hueso descarnado, se aprendió en las entrañas, en las fosas comunes, en los desaparecidos, hoy la revolución es pacífica, pero no desarmada.

Hoy mas que nunca el ejemplo de Allende está vivo, hoy que una artera rata, nacida en las entrañas hondureñas, con el nuevo apoyo del imperio, trata de iniciar un nuevo proceso violento en la América toda, un proceso que se vivió en carne propia, en la América del sur, en los años setenta, y que costó la vida de ese prócer y padre de patria, llamado Salvador Allende.

Camaradas socialistas de la América toda, recordemos el sacrificio de Allende, ese sacrificio que no fue en vano, fue su sacrificio el que nos permitió entender después de mucho tiempo, cual era la vía a seguir, cual era la vía de la dignidad, de la razón, de la fuerza y de la perdurabilidad de la vida de la revolución.

Camaradas, el ejemplo de Allende fue claro, al igual que cristo puso la otra mejilla, y al igual que el, ofrendó su vida por su pueblo y por sus ideales, pero hoy en día camaradas socialistas americanos, cuando nos toque colocar la otra mejilla, recuerden ir cerrando el puño, porque esta revolución es de amor, es de razón, es de ideas, pero no está desarmada.

Viva Allende, viva Gabriela Mistral, viva Pablo Neruda, viva el pueblo de Chile, pero que vivan también, Evo, Correa y Chávez, que viva su ejemplo, que viva su lucha, que viva nuestra hermosa REVOLUCION.



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