No cabe la menor duda que desde hace once años con el arribo del Comandante Chávez al poder se inició un proceso político que ha generado en un sector amplio de la sociedad venezolana un deseo profundo de participar directamente en la toma de las grandes decisiones que impactarán socialmente en la vida de la nación. Desde la consigna “Con Chávez manda el Pueblo” hasta la consigna “El Pueblo pa la Asamblea” el camino político que se ha recorrido desde las bases militantes de nuestro proceso bolivariano ha ido demostrado que la permanencia en el poder del único líder posible de la revolución bolivariana no deriva del entusiasmo de vitorear consignas sino que se sustenta en la corresponsabilidad que mantienen un pueblo y su líder al procurar la solvencia de los principios éticos que bajo ninguna circunstancia deberán abandonarse jamás. Es la lealtad hacia las ideas que prefiguran la construcción de la patria socialista lo que mantiene el vínculo entre el pueblo militante de la revolución bolivariana y la estructura del Partido Socialista Unido de Venezuela, organización sobre la cual el Comandante Chávez colocó el anhelo como impronta de que fuese un partido caracterizado por el accionar de los nuevos liderazgos reconocidos por la base, este anhelo compartido por nuestro pueblo en la ciudad de Maracaibo a la víspera de otro nuevo proceso electoral navideño aun no se cumple.
Pero hay esperanzas de que la organización popular logre revertir la suerte política del proceso bolivariano en Maracaibo, ya se están dando pasos cautelosos y firmes en tal sentido, con acciones respetuosas de los lineamientos políticos que a falta de una orientación legítima en el Estado Zulia se imparten desde Caracas. Sin embargo habrá que esperar el desenlace de las elecciones del 5 de Diciembre, cuyo resultado será definitorio para que en consecuencia se configure un espacio para la discusión de una propuestas legítima que esté fortalecida por el apoyo popular y cuya orientación la determine el poder comunal, garantizándose así una gestión honesta desde la Alcaldía de Maracaibo con la finalidad suprema de proporcionar la mayor suma de felicidad posible al pueblo marabino.
Mientras tanto la sabiduría de las bases del partido en Maracaibo seguirá el espontaneo proceso de autodepuración y regeneración y esto demuestra la vigorosa voluntad de un pueblo que se mantiene vigente en los cambios de paradigmas. La militancia de base del Partido Socialista Unido de Venezuela en Maracaibo no se traicionará a si misma, nunca lo ha hecho, y seguirá demostrando que su elevado nivel de autocrítica está produciendo un cambio cualitativo en la manera de hacer la política. Solo así con un partido de mujeres y hombres viviendo dignamente se podrán desempeñar tareas comunitarias honestas en pos de objetivos políticos legítimos y a ese nivel de la militancia solo podrán acceder los candidatos probos merecedores del respaldo del pueblo.
*Militante raso del Psuv