Si, así es, la "serialización" supone como dice la palabra, series homogeneas de unidades. Pero, las unidades son, en este caso, la organizacion popular y el poder popular; los espacios bases donde se decide el destino de todos en sus elementos más concretos de acuerdo a la naturaleza (comunitaria, laboral, cultural, educativa, deportiva, etc.) de cada espacio.
Ahora... ¿Quién organiza? Las series, una vez avanzando el formateo legal (Constitución y leyes del Poder Popular) y lograda la legitimación política del gobierno en la dinámica histórica, ya no es el sujeto que organiza la serie desde ella misma sino los laberintos burocráticos externos y a la vez ligados a ellas. Nace entonces un verdadero movimiento popular administrado, pero organizado en series homogéneas (consejos comunales, cooperativas, comités, consejos de trabajadores, etc.) que va a tener una función primordial para muchos agentes corporativos del gobierno, cada serie no será más que una suma de unidades de un mismo formato de organización que en ningún momento se planteara romper la lógica de la serie fragmentada y hacer de ese conjunto un espacio autónomo del poder popular que se reúne y decide como conjunto abierto y político, por lo tanto diferenciado y hasta enfrentado al Estado.
¿Será que así tendremos un espacio liso y dinámico que va decidiendo su propio programa de liberación o carta de lucha concreta, que además, nos sirve para definir política, estrategia y participación en el proceso revolucionario? ¿O seguirán los enemigos internos? Ahora que la mayoría se "desdobló" en el grupo de los 154 del GPP a los estados y Distrito Capital, aunque existen dirigentes naturales en lugares de encuentros de partes de esas series, en territorios o espacios sociales específicos (parroquias, regiones pequeñas), en ningún momento estos “monstritos” dejarán que queden fuera de su tutela y de algunos organismos o partidos. Ante el irreverente avance, buscarán a como dé lugar sabotear dicha iniciativa mediante la lógica ancestral "divide y vencerás". Mucho menos llamarán a integrar series heterogéneas; encuentro de series distintas en su naturaleza que por su cantidad y fuerza representativa podrían perfectamente plantearse la posibilidad de constituir auténticos Consejos Territoriales populares o de lo que sea. Lo cierto es que, por todos lados, encontraremos series de organizaciones, en barrios, pueblos, espacios sociales de trabajadores, campesinos, donde lo que priva es la administración burocrática de estas series.
Como vemos el punto de "poder " se desplaza casi totalmente hacia arriba mientras que el esfuerzo queda abajo y bajo los hombros por lo general de hombres y mujeres que se quiebran la espalda en el recorrido de esta repetida odisea. Todo esto genera la posibilidad de que se esté entendiendo al gobierno como la gran corporación que va atando y fragmentando a cada una de las unidades de base cual si fueran pequeñas gerencias dirigidas y monitorizadas por las medianas y altas gerencias del mismo animal, dejando ciertas autonomías relativas, pero guardando una dirección estratégica en sus manos que a su vez fracasan por las propias luchas quebrantadas a lo interno del gobierno.
Hasta que persista esta lucha de serialización, en realidad, lo que se estará evidenciando es la lógica perversa de la "explotación de la plusvalía política del colectivo" quebrantándose la cooperación social potente, acumulativa, posible, para deshacerse en una fragmentación infinita del sujeto político revolucionario. Esto es obviamente, para que los brotes de rebelión antiburocrática, antiserializantes, no terminen de reventar. Es aquí donde también juega un papel "divino" el partido. La obediencia de esta lógica antes de la existencia del PSUV no estaba garantizada políticamente. Tal vez tampoco lo esté, pero en todo caso si hay un papel concreto y actual del partido o la mayoría de sus miembros es el de desbaratar en todo momento y espacio cualquier PULSION importante que se rebele contra los formateos y las serializaciones que nos asfixian por todos lados, incluso los que puedan estar promovidos por los militantes de las propias bases pero anarquizados.
SI NOS DESCUIDAMOS TODO LO ACONDICIONAN AUNQUE NO MUESTREN LOS GRILLOS NI LAS CADENAS.
Gracias Roland Denis, por tu excelentísima caracterización del tema de la serialización, en tu texto Las Tres Repúblicas.
*Zulay Gavidia.
Rebelde e irreverente con las y los que no muestren moral ni ética revolucionaria.
Vocera Nacional Promotora del GPP por los Consejos Comunales.