La sequia estadounidense y el plan euro viene destabilizando la economía mundial, marcando nuevas tasas arancelarias que marcan un aumento progresivo de los alimentos, carne bovina y caprina. Conllevando las nuevas tarifas fiscales que en materia arancelaria está tomando cuerpo en los muelles de europa y los asiáticos que mantienen una relación directa con EEUU como Taiwán. Mientras, en Venezuela se está reorientando una política de hábitat e inversión para disminuir la pobreza, generar empleo y aminorar los criterios a nivel de intermediarios. El gobierno bolivariano de Venezuela viene ofertando productos de la dieta diaria por debajo del cuarenta (40) por ciento de su valor real, beneficiando a un amplio sector del Estado y a los colectivos urbanos, nuestra Patria Soberana, busca abrirse al mercado del Sur a través de MERCOSUR y el presidente del Perú, Ollanta Humala como el bolivariano, Hugo Chávez Frías han logrado acuerdos fundamentales para librar de aranceles productos de vital importancia para ambos países.
Es una necesidad histórica proyectar un nuevo país, un Estado, donde todos tengamos una participación efectiva para lograr buenos frutos. Debemos, cruzar el tiempo con sus muros, ciclos y horizontes. Es el nuevo orden del Socialismo para nuestras futuras generaciones. Uno de los aspectos más interesantes en esta revolución bolivariana es la instalación de parques para energía eólica, donde los colectivos son los encargados de asistir como vigilar su mantenimiento, contando con personal especializado. Para lograr todo esto, un grupo de jóvenes, población indígena y adultos vienen preparándose con una verdadera ética socialista.
El consumo per cápita de los venezolanos ha aumentado, la población se desplaza constantemente a cualquier abasto para la adquisición de sus alimentos básicos y lo cancela con dinero proveniente de su jornal diario, aunque el gobierno bolivariano mantiene un plan de programas sociales para los más humildes. Comunidades agrícolas apoyando los programas, donde se les está dando financiamiento para la siembra, como de maquinarias, la idea es que los grupos zonales tengan su casa agrícola, tractores, semillas, urea y créditos para lograr sembrar en una extensión de tierra más amplia, donde no haga falta el intermediario que aumenta considerablemente los precios de cada producto o grano.
La idea es darle a los parceleros un buen financiamiento para convertirnos en una región de administración especial mirando hacia el Caribe y el Sur. Mientras, acá sembramos, a nivel internacional se está pensando en aves migratorias y en las palomas para utilizarla como un recurso alimentario por sus proteínas y muchas de estas aves son consideradas como una exquisitez, pero, peligra su extinción.
Es la patria fortaleciéndose. Necesitamos crear una disciplina agroalimentaria y empresarial que nos beneficie a todos y tengamos oportunidad de comprar al costo, con poca inflación, Es un programa que lleva tiempo, pero trae bienestar al pueblo y sectores medios, es la búsqueda de una vía para la sustentación agropecuaria, administrar bienes y servicios para el bienestar comunitario, aunque constituye un trayecto complejo, podemos visualizar imágenes presenciales de esa gran verdad. Hay que vincularse más con las políticas agrícolas del Estado Bolivariano de Venezuela. Se debe diferenciar el conocimiento agrícola del pecuario para calificar nuevas inversiones que tengan una verdadera competencia entre las ciudades vecinas. Existe un principio de corresponsabilidad para la justificación del cambio político, donde lo colectivo dominaría lo individual para reflejar equidad y solaridad con las comunidades y el poder comunal organizado, sin restricciones de clase política, será una figura amplia del nuevo modelo político que iremos manejando hacia los próximos años.
emvesua@gmail.com
