La antropología es la base de toda ideología política y, efectivamente el credo neoliberal justifica un obcecado individualismo que en oportunidades raya en la violencia y nos lleva a una degenarión totalitaria. Cuya existencia se prolonga en períodos largos o cortos para reflejarnos en algunas ocasiones, la podredumbre que justifica algunos gobiernos locales o nacionales. Me pregunto, si el gobierno bolivariano de Venezuela, será el último del socialista Nicolás Maduro Moros, porque desde adentro se olvidaron del hombre social y dañaron lo que representa para un sistema la conciencia genérica.
Abordar la pobreza no es fácil en el país y jamás al pueblo se le puede dar poder, porque interpreta mal los términos de lucha social y la ominosa herencia dejada por el caudillo Alfara Ucero ha sido quebrantada. Hoy, el país luce en ruinas y un problema eléctrico que se traduce en robo de los dólares de inversión para el sector energético por parte de un ex ministro que fue promocionado a un alto cargo de alto nivel diplomático y, que solo hombres conocedores de la realidad internacional pueden ejercer esos cargos. El ex ministro Jesse Chacón, debe ser llamado a la actual Asamblea Nacional para que declare sobre el particular.
El país aborda un problema de lenguaje y comunicación. Es necesario revisar los símbolos que determinan nuestra pobreza física y conceptual y que han hecho los gobernantes, en su mayoría militares para solventar toda esta gran problemática.
Jamás la ideología socialista es culpable de todo esto, debemos volver nuestra mirada a Inglaterra, Francia, y los países nórdicos para saber interpretar esta nueva fase de la historia bolivariana de Venezuela, desde muy joven he sido bolivariano y me duele como un mínimo grupo de civiles y una mayoría castrense han destruido el país. La carencia de mano tecnificada han daño el campo productivo y la creciente tecnificación que el Comandante Hugo Chávez Frías inició desde su visión de país, le toco modernizar los programas de Reformas del Estado, que el Doctor Rafael Caldera engavetó por tener mirada diferente a la socialdemocracia, aunque venía ideológicamente manejando un patrón común de discursos que tienen su base militante en Alemania.
Por culpa de la capacidad de un hombre en los manejos políticos del Estado, vemos el quiebre de la unidad latinoamericana y, en el plano de los hechos, las tendencias envuelven a los presidentes del Continente Sureño por el mal manejo de los dólares y las manifestaciones ya se vienen manifestando hacia un cambio social y de reformas.
La ideología es fundamental porque crea disciplina ética y moral, desconozco que instrumentos utilizaron algunos militares para destabilizar el Estado Bolivariano de Venezuela, la impunidad y la corrupción nos dañaron, sumados a una alineación injusta de los poderes públicos.
La crueldad y la miseria nos atacan fuertemente. Vienen ocultándose los intereses del país y el Capitalismo de Mercado viene dañando progresivamente nuestra economía y la idolatría por el dios- dinero nos arrebata el deseo progresista de muchos venezolanos., hombres plagados de maldad predican el socialismo, pero, en sus designios encontramos una tendencia abierta al neoliberalismo y la utopía de vivir mejor, nos ha colapsado. Hemos sido transculturizado por el Estado Delictivo Y un ala civil como policial.
El Estado Bolivariano de Venezuela es inoperante y sus dirigentes ocultan los verdaderos intereses del país, persiguen otras finalidades y obviaron a izquierdistas preparados que siempre sustentaron sus tesis hacia el progreso del Estado y no cuidaron al Comandante Hugo Chávez Frías, pero, si les gusta ejercer funciones de gobierno local y nacional.
Han dado por descrédito la ideología socialista. Han desorientado a muchos hombres de base comunal que olvidaron su servicio social y vienen promocionando desordenes en la estructura del Estado, porque el sistema ha sido siempre capitalista, más no socialista.
Existe un desvarío en las conceptualizaciones pro socialistas y el cuerpo industrial del Estado se encuentra paralizado, solo las transnacionales y Polar producen alimentos para los venezolanos, aunque sea simplificado. Estamos estimulando una pereza colectiva en cada sector productivo y los motores del desarrollo no terminan de arrancar.
Estamos siendo motivados por una espacialidad y temporalidad óptico- lumínica que nos impide interpretar las modalidades y organizaciones de la alteridad social. Sumado a esto, el factor de la guerra económica que nos ataca y por el otro lado, la confrontación cuántica de la guerra fenomenológica de la comunicación verbal y lingüística, donde los directores de los canales televisivos bolivarianos venezolanos lucen encriptados en una sola parrilla comunicacional por desconocedores de la misma confrontación ideológica militar que mueve a los países desarrollados al control globalizado de los países del tercer mundo y sub desarrollados.
Aquí, no hay mediación entre palabras e ideas, el daño es a todo el ámbito humano y debemos configurar con urgencia un comportamiento de sintaxis e instrumental que nos permita entender lo antropomórfico y antropocéntrico del ser humano y su individualidad. Lamentablemente los militares deben regresar a sus cuarteles y prepararse para estos tres tipos de guerra en tercera dimensión, donde un simple laboratorio es capaz de provocar un temblor o un terremoto, como lo ocurrido en el Ecuador e Indonesia, cuna de piratas y carreteros del mar, que cobran excesivas sumas de dinero para dejar avanzar los buques mercantes sobre sus puntos de control de piratería internacional.