¿Sobre qué se basa una buena relación conyugal?
¿Sobre qué se basa una productiva y exitosa relación de negocio?
¿Sobre qué se basa una profunda y larga amistad?
Me imagino que todos hemos respondido: Se basa en la confianza, ¿verdad?
Entonces, pregunto:
¿Sobre qué se basa la confianza?
¿Qué es la confianza?
Me parece que la confianza tiene que ver con la honestidad, de saber que cuando uno comparte con su pareja, con su socio de negocio, o con su gran amigo, uno sabe con certeza que no le van a poner un cuchillo en la espalda, o que no le vendrán con una mala sorpresa, o que uno no tendrá que preocuparse de que le estén mintiendo.
Es decir, con esa persona de confianza, uno se siento confortable, relajado, respetado, confiado … uno no se siente ni traicionado, ni ofendido, ni abusado, ni engañado, ni enminisculado, o rebajado, disminuido, pequeño, o insignificante.
Uno se siente amado, querido, con valor.
¿Verdad?
Bueno, yo creo que nuestra Revolución humanista, la que Chávez empezó y propulsó, la cual tantos de nosotros --- alrededor de 60% de la población --- eventualmente aceptamos con brazos abiertos fue porque le tuvimos confianza a Chávez.
Chávez pudiera haber dicho y hecho las mismas cosas que dijo e hizo, pero si no le hubiéramos tenido confianza, si no hubiéramos sentido que él nos decía la verdad, que no nos engañaba, y que no nos tomaba por pendejos, o estúpidos, o bobos, nunca hubiéramos votado por él en mayoría.
Es más, tanto fue la confianza, demostrada y comprobada, que estoy convencido de que si Chávez se presentará hoy como candidato independiente para la presidencia, él ganaría con entre 66.66% y 88.88 % de los votos, porque hoy la mayoría de los tradicionales seguidores de la discombobulada oposición venezolana también votaría por Chávez.
Cuando Chávez vivía, esos seguidores de la oposición venezolana querían verlo muerto, fuera, desaparecido, porque no sabían lo que tenían, pero hoy, saben lo que perdieron.
Entonces, eso dicho …
NICMER, CHÁVEZ, Y MADURO
Recién leí el más reciente artículo de opinión de Nicmer Evans, donde menciona unas cifras muy importantes (ver más abajo).
Ahora, habiendo sido investigador de fraude durante muchos años, tengo la tendencia de no creer ninguna cifra a menos de poder averiguarla, su procedencia, y reconfirmar su veracidad, antes de utilizar la cifra como evidencia, y antes de considerarla como un hecho o una verdad concreta y palpable, real.
(También hay que poner las cifras dentro del contexto real y pertinente.)
En este caso, yo no sé de donde Nicmer sacó estas cifras, y no sé cuales son las fuentes originales, o en qué contexto se produjeron, o con qué fórmulas o parámetros matemáticos se midieron, lo cual es extremadamente importante para poder poner la información dentro de un contexto real, practico, y razonablemente, cercano de la verdad, pero a primera vista parecen bastante razonables/racionales.
Entonces, por esa razón, utilizaré esas cifras aquí.
Nicmer dice --- más o menos:
1- Que en el 2016 solo ingresaron 5.219 millones de dólares a los cofres del gobierno de Maduro, que en el 2015 ingresaron 13.323 millones de dólares, y que en el 2008 fueron 48.000 millones de dólares.
2- Que para importar alimentos y medicamentos, el país necesita alrededor de 17.000 millones de dólares anualmente.
3- Que el gobierno pagó 17.000 millones de dólares en deuda externa en el 2016.
4- Que solo 30% (o sea 5/17 mil millones de dólares) de lo que normalmente necesitamos en dólares fue lo que el gobierno permitió que pudiéramos disponer, eso, por haber pagado la deuda externa, lo cual causó la escasez y desabastecimiento (¿en el 2016 solamente?).
5- Nuestra economía es comparable a la situación de un país en guerra.
Ver: http://www.aporrea.org/movil/actualidad/a240286.html
Una cosa es absolutamente cierta, nuestra actual economía, desde hace alrededor de 3 años, es básicamente una economía de guerra, eso lo puedo confirmar ya que viví la primera guerra del golfo en carne propia (Kuwait, Iraq, Arabia Saudita), y trabajé más de 6 años en la logística de guerra en el medio oriente, sé precisamente lo que ocurre en guerra con los alimentos, los medicamentos, y la infraestructura estadal (electricidad, agua potable, transporte, instituciones, cuerpos de seguridad, etc.).
Igual está pasando en Venezuela, y todavía está pasando en Iraq, en Siria, en Libia, y en Afganistán. También ha ocurrido de manera recurrente en los últimos años en Palestina, en el Líbano, el Sudan, y Haití.
Ahora, con respecto a las cifras, me parecen bastante reales, ya que aparte de algunas incertidumbres (ej., qué pasó con el ingreso y la deuda externa entres 2009 y 2014?), generalmente, en mi estimación, coinciden con la desastrosa realidad que estamos viviendo en Venezuela desde la muerte de Chávez.
Ahá, entonces, ¿Cuál es el punto que quiero tocar aquí?
El punto es muy sencillo …
Si todo lo largo de la crisis, desde agosto-septiembre del 2013 hasta hoy en día, Maduro no ha estado diciendo que la razón del desastre económico/social que estamos viviendo es culpa de “la guerra económica,” y si las cifras que Nicmer presentó son medianamente precisas, entonces la más realista conclusión a la cual puedo llegar es que Maduro nos ha estado básicamente mintiendo desde que empezó todo este miserable y trágico asunto.
Como indica Nicmer en su artículo --- creo que deberían leerlo --- el gobierno de Maduro decidió pagar la deuda externa de 17 mil millones de dólares en el 2016 … básicamente a costilla de la población … al detrimento de nuestra sociedad, dejándonos con las miguitas, con el mínimo, y a los [¿ricachones?] acreedores con el máximo … ¡como si no pudieran esperarse un poco!
Es más, ¿Cuántos miles de millones de dólares pagó el gobierno de Maduro en deudas externas en el 2013, 2014, y 2015?
Si en el 2016, en la terrible situación económica que estábamos viviendo, el gobierno de Maduro pudo pagar 17 mil millones (70%), y quedarse con solamente 5 mil millones (30%), entonces …
¿Cuanto fueron capaces de pagar cuando las cosas estaban muy malas, pero no tan malas, digamos en el 2013 y 2014?
¿Cuánto piensa Maduro pagar en deudas externas en el 2017?
¿70% de la capacidad financiera, como lo hizo en el 2016?
¿Matándonos, sacrificándonos aun más?
Si Maduro hubiera anticipado, planificado, y utilizado su cerebro un poco más, hubiera puesto de lado, o negociado con los acreedores, digamos unos 5 mil millones de dólares en el 2013, 2014, y 2015, lo que significa que hoy tendríamos 15 mil millones de dólares … casi los suficiente para que todos comamos nutritivamente y que pudiéramos curarnos de enfermedades curables.
Pero, para mí no es tanto un asunto de cifras, es un asunto de confianza.
Es decir, todo este tiempo Maduro le ha estado echando la culpa a los demás, no a su gobierno … así nos lo ha estado repitiendo sin cesar desde hace más de 3 años, bla, bla, bla, básicamente engañándonos, en vez de decirlo como es.
Es así que lo percibo … Maduro no ha estado engañando …
Para confirmar lo que digo, y si no me equivoco, desde que empezó este desastre, ni el Banco Central de Venezuela (BCV), ni las instituciones gubernamentales, ni el gobierno de Maduro, nos han proveído datos o estadísticas relevantes o verdaderos con respecto a la real y verdadera situación económica-financiera del gobierno, o de la nación, es decir, han estado ocultando preciosa información necesaria para el positivo desenvolvimiento de nuestra (o cualquier) sociedad.
Sin datos precisos no se puede tomar buenas decisiones.
Más bien, en octubre del 2015, Maduro mintió descaradamente diciendo que el nivel de inflación para el 2015 podría llegar al 80% cuando era evidente para cualquier ciudadano que sabe contar que la tasa de inflación era de por le menos el 500%.
Ver: http://www.noticias24.com/venezuela/noticia/299564/maduro-estima-que-inflacion-podria-cerrar-este-ano-en-80/)
Es más, el mismo BCV, la máxima “autoridad” en asuntos de la banca, moneda, y economía del país, en el comienzo del 2016, dijo que la tasa de inflación para el año 2015 era de 141,5%, lo cual era una absoluta y total mentira.
Ver: http://www.aporrea.org/movil/contraloria/a221399.html
Bueno …
¿Por qué Maduro y sus compinches han estado ocultando la verdad?
¿No es generalmente verdad que si una persona esconde algo, es porque está tratando de tapar la verdad?
¿Qué está escondiendo Maduro?
¿Por qué no nos dice la verdad?
¿Somos tan bobos?
¿No somos capaces de entender la realidad, o de lidiar y componer con ella cuando sea necesario, cuando las cosas van mal, y muy mal, de colaborar, mano en mano, con la confianza que merecemos?
¿Para Maduro y su cuerda de prepotentes somos niños de guardería a quienes hay que mentirles y ocultar la verdad, como para “protegerlos?”
… mentiras como el asunto de la inflación, y de los billetes de 100 Bs., y otras …
¿O será que somos para Maduro unos adultos con defectos del cerebro?
¿Somos realmente tan incapaces, y Maduro y sus altos sacerdotes son unos grandes sabios con inmensos talentos de súper héroes, como los gigantes Nefilim, hijos de Dios que se cogieron las “comunes y corrientes” hijas de los hombres, esos visitantes de los cielos del libro de Génesis de la biblia cristiana?
Ver: Nefilim - Wikipedia, la enciclopedia libre
O … como dijo Maduro recientemente, que el gobierno hizo milagros en el 2016, lo cual es totalmente absurdo, contradictorio, y arrogante.
Chávez nos decía la verdad, y no andaba diciendo que hacia milagros, él confiaba en nosotros, en nuestra capacidad de entendimiento, en nuestra capacidad de discernimiento, de lucha, pero de frente, no a-la escondite, o con media mentiras.
¿Por qué Maduro no lo hace?
¿Se cree superior al Pueblo?
Maduro me hace sentir pequeño, muy pequeño, insignificante … y creo que no soy el único en sentirme así.
Chávez nos hacia sentir bien, importantes, significantes.
Bueno, mi conclusión es que al igual que una pareja que monta cachos, o un socio que no te dice la cifra real de ventas, o un amigo que esconde el hecho de que es tu amigo solo para tener acceso a tu mujer, no veo como poder tenerle confianza a Maduro.
Y obviamente, Maduro no nos tiene confianza.
Digo yo: No se puede hacer Revolución si no se confía en el líder, y si el líder no confía en nosotros.