Las cuentas adversas al judaísmo y cristianismo, tienden a disminuir debido a los argumentos descriptivos, para exponer el ya inexistente odio entre los nazis y judíos. Sin duda, la Edad Media debe entrelazarse con el siglo XX para abolir los fenómenos de estas viejas rencillas que solo se basa en mitos, que fue una consecuencia del resultado de un odio religioso entre aquellos judíos que mataron a Cristo.
Ahora, el problema es de contrariedad entre dirigentes de un solo parecer político y, la historia del migrante, como instrumento especulativo y herramienta para atraer votos, pero, en el fondo, todos buscan exponer que se trata una nueva amenaza para el cristianismo y el protestantismo. A fin de cuentas, estos pobladores que son obligados a salir de sus tierras, como los africanos que los hacen huir de las riquezas del Sahara, después del vil asesinato del presidente de Libia Muhammad Gadafi. De verdad, la globalización y sus espectros, nos ha traído una diversidad de expectativas, donde solo un núcleo de militares que dicen llamarse socialistas y sus aliados fascistas, son lo que buscan controlar el poder hacia el hemisferio occidental y el mundo africano.
Ahora, estos pseudodirigentes buscan refugios en voces, como judíos y cristianos, nazismo y fascismo, cristianismo y protestantismo, nazismo y fascismo.
Según la filósofa Hanna Arendt, esta explicación no es satisfactoria, pues de hecho, aunque hay varios ejemplos de persecuciones antisemitas durante los últimos cinco siglos, la mayor parte del tiempo las comunidades judías en Europa vivieron en relativa paz. Arendt explica este fenómeno en cambio como reacción a las fallas de la globalización. Los avances tecnológicos de finales del siglo XIX hicieron crecer el intercambio internacional de bienes de una manera sin precedentes; este crecimiento económico benefició a miles de personas, en especial a aquellas vinculadas con el comercio.
Cuando la crisis de 1929 azotó al mundo, una serie de líderes políticos no tardaron en culpar a la globalización y en proponer el nacionalismo y la xenofobia como antídotos a la crisis. Los judíos en Europa occidental, que no en Europa del Este, donde eran sumamente pobres, se convirtieron en un blanco perfecto, pues no sólo eran beneficiarios del proceso globalizador, sino ciudadanos cosmopolitas. Aunque es verdad que la mayor parte de ellos tenía ya una fuerte identidad nacional, la falta de vínculo entre región y nación permitió que los acusara de antipatrióticos.
Después de la recesión de 2008, hemos visto cómo en el mundo occidental los líderes de la derecha extrema, y no tan extrema, han recurrido de nuevo al nacionalismo como un arma para atraer votantes. Estos votantes, al igual que en la década de 1930, han visto cómo el proceso globalizador de los últimos 30 años ha beneficiado algunos y dejado atrás a otros. Esta crisis se ha visto exacerbada por la migración masiva de refugiados de África y el Medio Oriente.
Pero, lo más interesantes es que la historia se repite y, desde 1933, buscan un nombre para culparlo de todo y desearle todos los males del mundo, cuando en muchas oportunidades expresan la verdad. Así pasó con el presidente de Hungría, lo han mofado y escarchado de antipatriota, enemigo subrepticio, sin patria.
La idea de estos nuevos líderes, es desearle a su adversario de todos los males del mundo, pasar sobre los verdaderos dirigentes y consolidarse en el poder.
México, es el eje del nuevo comercio latinoamericano y centroamericano hacia Asia y Rusia.. Recientemente, el Secretario de Estado de La Unión Americana, Mike Pompeo, sostuvo reuniones conjuntas con el presidente Enrique Pena Nieto y con su sucesor, Andrés Manuel López Obrador, a su vez con sus asesores. Lo establecido, no es tanto lo político, sino el fundamento comercial, haciendo destacar el interés del gobierno del presidente Donald Trump, de lograr que haya una buena relación comercial y de amistad entre los dos países vecinos, lo que fue interpretado por sus anfitriones como un encuentro para conocerse personalmente. Sin olvidar, una tarea pendiente de Washington ante la Organización Mundial del comercio, (OMC), referido a los aranceles y las exportaciones de puerto a puerto.
Es el tiempo de las grandes consultas, entrando en juego Turquía, China y Canadá, tomando en cuenta a la Unión Europea, quienes a su vez, vienen aplicando aranceles a las importaciones estadounidenses en represalia por las que Trump les impuso, teniendo como resultante una exacerbación del comercio y una inflación de precios muy exagerados que, repercute en productos agrícolas y de facturación local.
Es tiempo de consultas de una manera muy generalizada y, América Latina exige una respuesta. Quién viene resultando afectado de todo esto, es el pueblo, quien luce empobrecido y es pasto de las grandes mafias que incluye la órbita militar y civil. Haciéndose necesario una reforma del Estado y que los partidos políticos de la región se dediquen a un verdadero proselitismo en los meses venideros para dar paso a las Reformas Comerciales y jurídicas de cada Nación- Estado.
Los ciudadanos de cualquier país del mundo vienen alejándose de las organizaciones políticas y, las consecuencias ya se dejan ver para reconstruir a los países referidos por la causa democrática, en el caso venezolano, el partido socialista unido tiene exclusivamente un carácter electoral y no de organización y estructura, aunque tiene en su haber muchos nombres para un hacer en particular una tarea popular.
Em México, el PRI tuvo una aplastante derrota en las elecciones recientes y perdió las presidenciales, ocho gubernaturas, la jefatura de gobierno de la Ciudad Capital, mayoría en el Congreso de La Unión y, en 18 de las 32 entidades federativas. Todo por un lastre proveniente de la corrupción de la que no es fácil sacudirse.
Este lío comercial, refleja una gran trifulca, donde las propuestas en torno a reglas de origen y contenido exclusivo, determina un conjunto de cláusulas a favor de USA. Donde el TCLAN refleja sus mecanismos amañados para controlar las ventanas estacionales del sistema agropecuario a nivel bilateral.
De modo que los acuerdos bilaterales vuelven aflorar entre los equipos comerciales electos por Donald Trump y AMLO.
No obstante, si EEUU, invoca el artículo 2250 para hacer un nuevo tratado bilateral, México quedaría contra las cuerdas ante la fuerza del ventajoso gigante comercial y la historia del nefasto acuerdo azucarero podría repetirse, sin olvidar que ya Cuba y las Repúblicas bananeras producen azúcar, maíz y plátanos como antes.
Hay dos puntos a resaltar. Trump viene utilizando sus equipos de inteligencia para determinar los nuevos horizontes geopolíticos y territoriales a nivel mundial, como una forma de control para la injerencia de cualquier país hacia Estados Unidos de Norteamérica, los rusos en esta nueva fase histórica desean intercambiar diálogos con país Iberoamericanos, como los del Sur.
Hay mucho flujo de información. Los hechos hablan por sí solos, Trump y Putin haciendo gala de las empresas de espionajes Norteña y del Oriente, manifestaron su interés de coordinar los asuntos comerciales con mucha mesura., Todavía se sigue con la consulta del Brexit. En estas noches, hubo gran manifestación, afuera de La Casa Blanca, para recordarle al presidente Trump que su trabajo es defender los intereses
En estos días, hubo una gran manifestación, afuera de la Casa Blanca, para recordarle al presidente Trump que su trabajo es defender los intereses de Estados Unidos y no los de Putin.
El segundo punto, más espinoso todavía, fue el que hizo Trump cuando dijo que entre Estados Unidos y Rusia concentraban el 90% del arsenal nuclear y el mundo quiere "que nos llevemos bien".
Y así, Trump dio la espalda a los aliados; les dijo a los países miembros de la Unión Europea que el viejo pacto de la OTAN no era significativo para esta administración de la Casa Blanca. ¡Que se las vieran con los ejércitos de Putin! Dicho en buen castellano. Nos olvidamos que es empresarial.
Trump se equivoca al equiparar el arsenal nuclear con la solvencia política y moral para usarlo. Pasa por alto las tropelías antidemocráticas rusas y sella el destino de su gestión a los caprichos de un enemigo de Europa. Hacía tiempo que no veíamos un reajuste histórico tan contundente ni tan desafortunado
