Con el mayor respeto y consideración me permito enviarles las siguientes opiniones y sugerencias, con la intención de contribuir humildemente, en la construcción y consolidación de este, nuestro inédito proceso revolucionario.

1.- Estamos concientes de los grandes aportes y esfuerzos del Presidente en la conducción exitosa no solo de los destinos de Venezuela sino también para la integración de la patria grande. Los últimos anuncios que evidencian su esencia y compromiso revolucionario, con el lanzamiento de los 5 Motores constituyentes, la autentica nacionalización de los hidrocarburos y la recuperación de empresas privatizadas de manera fraudulenta como es el caso de CANTV y las empresas eléctricas, dan fe de esa férrea disposición de conducirnos a la Venezuela que soñaron nuestros mártires como Fabricio Ojeda, Lovera, el Chema Saher, Soto Rojas, Argimiro Gabaldon, Jorge Rodríguez y tantos miles de compatriotas vilmente asesinados, por los lacayos del imperio.

2.- Sin embargo, pensamos que con igual contundencia hace falta relanzar motores económicos, que de manera integral, coherente y organizada, nos lleve al diseño de una política industrial, agroindustrial, agrícola y turística, que garanticen mas allá del petróleo, la sustentabilidad del proceso revolucionario.

3.- El diseño de dichas políticas debe pasar por un serio y riguroso balance de gestión, por lo menos de los últimos cuatro o cinco años, de los más importantes planes y programas que el Presidente Chávez ha lanzado, para reactivar el aparato productivo y su real impacto en la economía. Creemos que dicho balance debe ser realizado y coordinado por equipos de técnicos y profesionales calificados, comprometidos con el proceso y no vinculados con los organismos responsables de la ejecución de los mismos, a fin de garantizar una evaluación objetiva, que incluya en su verdadera dimensión logros reales, errores y omisiones, que facilite la propuesta de correctivos y aportes positivos para la toma de decisiones, que coadyuven al diseño de un modelo económico sustentable y que junto con la habilitante, conduzca a la eliminación, redimensión o creación de nuevas estructuras operativas, incorporación y reforma de leyes, su reglamentación o algo muy simple: voluntad férrea en la aplicación de las ya existentes.

4.- Revisando el Informe Anual, de gestión del año 2006 presentado por nuestro Presidente, ante la Asamblea Nacional pudimos comprobar que muchos datos, cifras y logros señalados en el sector industrial, agrícola y turístico, en términos globales son buenos, sobre todo a nivel social, pero desde el punto de vista sectorial y estructural, sus resultados e impacto real en la economía SON DEFICIENTES Y CONTRADICTORIOS, si comparamos los inmensos recursos que el Presidente ha destinado para su reactivación y crecimiento.

Pensamos que muchas inversiones, financiamiento e incentivos económicos han servido solamente para hacer más ricos a los ricos, promover la corrupción y estrechar las relaciones de dominación capitalista. Casos como la Banca y sus excesivas ganancias, la industria automotriz, el oligopolio de las comercializadoras agrícolas, la industria farmacéutica, la desmedida importación de alimentos, y el crecimiento del comercio en general han percibido ganancias nunca antes vistas en el país, apalancados por las excesivas importaciones que, al no existir una política industrial, agrícola y agroindustrial coherente y nacionalista, nos ha convertido, prácticamente en una economía de puertos.

Sabemos que no es nada fácil convertir una economía petrolera en una economía productiva integral, pero debemos apuntar hacia allá, nuestro Profesor Maza Zavala, nos dice al respecto que “Hay tal complejidad de problemas, de contrasentidos y paradojas en la economía venezolana que uno no tiene la respuesta ni la explicación, uno trata de examinar, de indicar hasta donde sea posible en esa maraña. Ahora hay que poner orden en la maraña” como única salida para llegar victoriosos a la construcción del socialismo.

5.- Sabemos que la construcción del socialismo del siglo XXI, pasa por conformar una base económica y productiva sustentable, que reduzca las asimetrías y permita la utilización plena de todos los factores productivos, permitiendo así la incorporación de los excluidos a un sistema de igualdad, justicia y libertad


(*)Econ.

ExViceministro de Circuitos Agroproductivos 2003-04

hgarzon@cantv.net