Chávez y la Paz en América

Ilusos quienes piensan que la Paz solo es ausencia de guerras. Eso será sólo una forma de presentarse la Paz. La tumultuosa situación a que nos han sometido el ataque a las torres genelas de Nueva York, el ataque con bombas a la Estación de trenes en MADRID, contra seres que solo concurren a su cotidianidad laboral, en procura de la labor fecunda con la cual manda Dios al Hombre a ganarse su pan en el trabajo.

El evento ya reiterativo, de la rápida evacuación de aeropuertos en U.S.A, Inglaterra y España así en el emblemático Rockefeller Center nos transmite cuan honda es la guerra entre los seres humanos.

Ha sido repetitivo en la historia humana que los fanáticos religiosos de cualquier religión invoquen al Sagrado Altísimo para justificar precisamente actos aborrecibles como la lapidación de “una pecadora adultera”, u oprimir como lo hacen los gringos a todo un pueblo como el Iraquí, mediante la fuerza de las armas para poseer su petróleo.

Hitler y Stalín

Son imborrables por lo espantosos, recordar las escenas filmadas de los judíos intoxicados mediante gases en los satánicos campos de concentración de os nazi en la Segunda Guerra Mundial, o las barbaras caminatas a que José Stalin sometía a densos sectores de la población rusa de un lado al otro de la inmensa geografía soviética para que en un indudable acto genocida perecieran a los lados de caminos que cruzaban la “patriecita” buena y grande en el corazón de los eslavos, calcinados por un verano inclemente, o por el frío del invierno ruso, ese General sin tanques, ni cañones ni aviones que se ha dado el lujo de derrotar a guerreros como en Emperador Napoleon Bonaparte o al Mariscal Von Paulus, o los prisioneros iraquíes, sin derecho a habeas corpus, seres secuestrados por U.S.A como esclavos de guerra a la usanza de los bárbaros de Atila.

La Unión de los débiles

Parecer ser característico en los hombres, tratar erróneamente de oprimir la disidencia. Craso error, pues con ella se contrastan opiniones, surge la Libertad y por allí comienza la sabiduría madre ejemplar de la Moral, que es fuente eximia de la Justicia y el Derecho.

E indudable que esa primera contradicción surgió cuando los débiles cansados de la opresión, se dieron cuenta que sumados unos con los otros y actuando al unísono y mancomunadamente, derrotaban la opresión del más fuerte.

Y siendo igualmente débiles los victoriosos, entre ellos por naturaleza propia salió la idea de reglar las conductas dentro de la comunidad para que respetando a los demás se lograse Paz.

Ninguna comunidad puede progresar sólida y sostenidamente sin en ella no existe Paz como fruto de la Justicia. Así vemos que las sociedades más avanzadas son aquellas que practican un escrupuloso respeto de los Derechos Humanos de sus pobladores, desarrollándose con ello un ambiente propicio a una ascendente y cada día más desarrollada calidad de vida entre todos sus miembros.

Por el contrario, en aquellas donde se establece la convivencia basada en un terror de la fuerza y la barbarie, el clima opresivo elimina la posibilidad de que los oprimidos puedan desarrollar todas sus potencialidades interiores en provecho de la comunidad toda, y en el transcurso del tiempo el poder absoluto que allí se ejerce lo corrompe todo absolutamente, y la rebelión de los oprimidos no se hace esperar, y u sistema político basado en la fuerza se desmorona en instantes con trágicos eventos como el linchamiento del Dictador Benito Musolini al final de la Segunda Guerra Mundial, o el fusilamiento de los Esposos Ceacescu al final de la Dictadura Stalinista que instauraron en Rumania.

Chávez y su Influencia en América Latina

En América Latina brilla con esplendor, desde 1.999, la pacifica, justa, democrática y enaltecedora comunidad bolivariana establecida en Venezuela, como una comunidad respetuosa de las libertades ciudadanas, con escrupuloso respeto a la libertad de prensa ajena a la violencia que en las últimas tres décadas ha dominado a los Países centroamericanos con guerras intestinas que ofenden la conciencia y la historia de todos los hijos de Bolívar; y precisamente es allí donde se puede afirmar sin equivoco que existe dentro del continente latinoamericano un esfuerzo como el de la Misión Negra Hipólita, que trata de lograr una comunidad sin niños abandonados por sus padres en las calles de cualquier ciudad, sin nómadas esquilmados morales por la adicción a las drogas, sin pedigüeños dominados por el espíritu inmundo de la mendicidad, en razón de que existiendo aquí un esfuerzo de la Revolución Bolivariana por el respeto a la ley, tanto por los gobernados como los gobernantes, los capitales que fluyen del petróleo, de los tributos colectados por el Seniat, así como los capitales extranjeros frutos a su vez del trabajo honrado en otras latitudes buscan expansionarse en una Venezuela Bolivariana y Socialista, profundamente Cristiana, contribuyendo con esas inversiones gubernamentales, privadas, nacionales y extranjeras a crear empleos estables, justamente remunerados y creadores de riquezas sociales con beneficiosos efectos para todos los naturales de nuestro país, donde convivirán cinco tipos de propiedad: Pública, Social (directa e indirecta), Colectiva, Mixta y Privada.

Frutos de la Gestión Bolivariana

En nuestro continente sólo Venezuela puede mostrar orgullosa un esfuerzo de profunda transformación social sin que se haya desatado el terrorismo de Estado, ni siquiera se haya perseguido, encarcelado o asesinado a ningún ciudadano por ser opositor al Gobierno del Presidente Chávez, aunque en realidad todavía nuestro Sistema de Justicia adolecen de gravísimas fallas, rémoras y tardanzas que nos impiden todavía para calificar como país con ejemplar Imperio de la Ley, que es garantía de los derechos de cada ciudadano e instrumento del estado para disciplinar a aquellos que la violen.

El espanto del secuestro, en todas sus formas esta horadando el esfuerzo de todos los venezolanos de buena voluntad, por lograr fundar solidamente el Socialismo del Siglo XXI, y por eso apoyo ejemplares medidas legales draconianas contra los cuerpos policiales, militares, Abogados y Jueces resulten involucrados en ese delito, así como en los de la corrupción. Eventos delictivos todos que constituyen junto al de drogas, delitos de lesa patria y de lesa humanidad.

Del resto, aspiramos como operarios del Derecho contribuir a que se expanda el ejemplo venezolano bolivariano, constituido por el esfuerzo igualitario en lo humano, inclusivo en lo social para así lograr la eficacia de la Ley y la consecución de un ambiente de Paz y sosiego para todos.

Debemos comprender que es la Justicia el mejor medio de asegurar la prosperidad, la paz y la tranquilidad de sus pueblos, como ha sucedido con España, Portugal e Italia, países aliados de la Venezuela Bolivariana que antes eran naciones exhaustas por las conflagraciones que veían partir a sus hijos como emigrantes hacia a América, donde contribuirían a su progreso.

Hoy esos países son los que reciben inmigrantes de América y de África, dado el incremento sostenido de nuevos empleos que se van creando día a día, al punto de que respetando las peculiaridades de cada pueblo se han ido uniendo en aquellos aspectos que le son comunes y por allí emergen como una comunidad de incomparable respeto e importancia en la Comunidad Jurídica Mundial.

Solo la Justicia garantiza el progreso, a convivencia y como fruto de todos ellos la Paz.

Enemigos de Venezuela y América

El terrorismo, las mafias de la droga, la corrupción y el burocratismo, que indudablemente nos afectan actualmente en Venezuela, son el peor enemigo de la Revolución Bolivariana, y posibilitan el regreso a la bárbara opresión de las mayorías por el miedo a una muerte súbita, increíblemente dolorosa y disgregadora de la esencia comunitaria de cada ser humano. La cultura, la tolerancia y el respeto al derecho ajeno permitirán retomar, Dios mediante, la Paz en Venezuela, América Latina y el Mundo.



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Dr. Gastón Saldivia Dáger


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