Debemos avanzar hacia un plan común de trabajo para lograr una unidad de propósitos que nos evite en el futuro un error común. Hay que escuchar otros planteamientos ideológicos para avanzar a un nuevo escenario político para asentar las bases donde debe asentarse la nueva sociedad, debe ser un nuevo panorama que nos envuelva a todos, donde el proyecto Simón Bolívar contribuya a sembrar la libertad en nuestra conciencia y lograr una referencia social en los valores democráticos, teniendo como referencia la acción planificada para conjurar un Estado moderno en armonía con lo internacional. Con óptica democrática debemos avanzar hacia el voluntariado nacional y fortalecer las bases de nuestra democracia con la participación equitativa del pueblo en las funciones públicas, La prioridad es defender la creación de los consejos comunidades para hacerlos factibles a la lucha partidista, estamos obligados a defender los diversos factores de la economía regional y nacional para tener una visión clara del significado de la integridad territorial nuestra.
Hay que luchar por la cohesión social y la seguridad democrática a todos los niveles del poder público y la ciudadanía. Tenemos que apegarnos al socialismo internacional para lograr el avance económico de cada región y determinar un ideario político verdaderamente válido con los nuevos enfoques sociológicos que se vienen dando. Hay que ir a las comunidades para construir un nuevo pensamiento creativo y lograr el rescate de nuestra identidad nacional.
Latinoamérica despierta bajo la lupa de una libertad plena, donde el individuo debe ser ejemplo para asumir la historia del país donde reside y lograr desmentir los argumentos de la derecha sobre caudillismo y totalitarismo. El tema de la Reforma debe ser un punto de análisis de la nueva generación estudiantil y abocarse el pueblo a formar una nueva ideología de Estado, donde la estupidez no sea el tema entorpecedor de nuestra realidad política. La ética socialista debe ser una sola y conlleva una serie de principios democráticos que deben ser respetados por la mayoría para evitar en el futuro los remordimientos de conciencia.
Tenemos que ir a una sociedad colectiva afianzada en la constitucionalidad de la nación y en los consejos municipales para lograr, en este sentido, la mayoría absoluta en la creencia del poder popular. Nos debemos al pueblo y hacia ese fin debemos ir por medio de la ejecución de los proyectos ya establecidos y en plena ejecución para observar los resultados.
A los grupos sociales hay que prepararles su encuentro a través de la constitución y debemos involucrar a todos los sectores del centro del país para utilicen sus parlamentarios en la sociedad que transitamos hasta llegar a su modernización.
(*)Filósofo
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