¿Por qué inicia su investigación por el análisis de la mercancía?
Porque la riqueza de las sociedades en que impera el régimen capitalista se nos aparece como un inmenso arsenal de mercancías.
¿Desde qué puntos de vista puede considerarse la mercancía?
Como todo ente universal útil, la mercancía, en virtud de su pertenencia al todo universal posee el carácter paradójico que nace de la omnipresencia de los duetos de sus opuestos y complementarios semblantes no duales: contenido/forma, cualitativo/cuantitativo, absoluto/relativo, tangible/intangible, particular/general y concreto/abstracto, etc.
¿Por qué adjetiva no dual a estos duetos de semblantes de las mercancías?
Porque son una especie de siameses inseparables, ya que la existencia o carencia de uno de ellos implica la coexistencia o inexistencia del otro. En este sentido, por ejemplo, nos podríamos preguntar: ¿Puede tener forma algo que no tiene contenido? o ¿Puede tener contenido algo que no tiene forma?
¿De qué manera se refleja en las mercancías la presencia del dueto contenido/forma no dual?
El contenido se refleja en el valor de uso de las mercancías que se identifica con sus semblantes cualitativo, tangible, particular, absoluto y concreto, mientras que la forma se manifiesta en el valor de cambio que se equipara con sus fachas cuantitativa, absoluta, intangible, general, relativa y abstracta, en virtud de que el valor de uso de una mercancía es la cualidad, la imponderabilidad, la percepción precisa, la singularidad o individualidad y la exacta facultad que ella contiene dentro de sí para lograr el propósito utilitario que persiguen los bienes y servicios, así mismo como el valor de cambio de una mercancía es la cantidad, la condicionalidad, la inmaterialidad, lo común a todos y lo difícil de comprender que ella exterioriza para garantizar el intercambio de los bienes y servicios.
¿Qué tipo de relación existe entre estos duetos de facetas no duales de las mercancías?
Conforman estos duetos de semblantes opuestos y complementarios no duales de las mercancías una especie de un par de familias constituidas por unos elementos constituyentes cuya consanguinidad nace de las analogías que poseen sus significados. Y son las interacciones que entre ellas se establezcan y practiquen que surge la dinámica vivencial de las mercancías.
¿Quiere decir, entonces, que el contenido, lo cualitativo, lo absoluto, lo tangible, lo particular y lo concreto de las mercancías, constituyen una familia de semblantes opuesta y complementaria a la constituida por la forma, lo cuantitativo, lo relativo, lo intangible, lo general y lo abstracto de ellas?
Efectivamente, de eso se trata y este enfoque es esencial para la correcta utilización del método dialéctico.
¿Constituyen, entonces, el valor de uso y el valor de cambio, otro de los duelos opuestos y complementarios no duales de las mercancías?
Correctamente.
nicolasurdaneta@gmail.com
