Con satisfacción leemos en nuestra prensa los lazos que han ido surgiendo en la región, más concretamente entre los países del Mercosur, generando compromisos en el trabajo conjunto en diferentes áreas que van a permitir asumir en equipo y en forma planificada la solución a problemas que nos son comunes, así como generar iniciativas encaminadas a estudiar cada día más los lazos entre nuestras naciones, razón de ser de estos organismos regionales. Es así como vemos que el ministro de Relaciones Interiores y Justicia Rodríguez torres asumió las riendas del Mercosur en materia de seguridad y justicia, esto va a permitir poder discutir y generar políticas para combatir todo tipo de delitos en la región, desde el narcotráfico, secuestro, trata de personas etc. Sin duda es una forma de que nuestros países puedan unir todo tipo de esfuerzos en una tarea tan importante en la región. Siguiendo esta muy buena iniciativa nuestra ministra de salud asumió la presidencia pro tempore del Consejo de Salud de Mercosur, donde en el anterior caso también trabajará con todos los ministros de salud de los países del Mercosur en función de atender todo lo relacionado a la salud desde la prevención hasta el ataque decidido y frontal a las causas que generan estas enfermedades, así como el intercambio de experiencias sobre las situaciones sociales y económicas que generan e incrementan estos factores de riesgos. También en la última reunión de ministros de cultura del Mercosur se aprobó la comisión para la creación de las Artes que garantizará la libre circulación de maestros y estudiantes de todos los niveles de formación de los países miembros del bloque, aquí se tratarán todos los temas, iniciativas y planes culturales regionales lo cual desde ya presagia dada la diversidad cultural de nuestros países una gran oportunidad para aprovechar esta gran riqueza que atesoran nuestros países.
Como es de notar, este esfuerzo integrador el cual es posible gracias a la visión de nuestro comandante eterno Hugo Chávez, quien sembró la idea y bregó duro para que nuestros países trabajaran hermanados, será lo que poco a poco nos va a consolidar como la patria grande de Bolívar, Chávez y muchos otros luchadores nuestros que dieron su vida por ese objetivo de unirnos para ser fuertes e independientes, dueños de nuestros recursos, de nuestras ideas y en consecuencia de nuestro futuro.
Lo positivo de estos acuerdos nos hace sentir optimistas sobre los logros que puedan alcanzar, pero creemos que también hay que trabajar por la integración o los necesarios acuerdos en materia laboral, si bien no es fácil una integración por las especificidades de cada realidad, si es posible y sobre todo necesario buscar la forma de comenzar a tratar de ver como intercambiar experiencias que vayan poniendo los cimientos para futuras jornadas conjuntas entre los trabajadores que formamos parte del Mercosur por muy difícil que pueda ser-que no lo es- existen elementos que sirven de estímulo para este fin integrador, la acción depredadora del capitalismo sobre la base de la explotación al trabajador, el maltrato y expoliación de las transnacionales que exprimen y consumen la fuerza de trabajo de hombres y mujeres en la región, la amenaza imperial contra nuestros gobiernos por atreverse a desarrollar políticas contrarias al voraz apetito del mercado capitalista, éstas y muchas miles de razones tenemos los latinoamericanos para desde ya iniciar una cruzada por un trabajo en el seno de los trabajadores de de América Latina con miras a crear en primer lugar un sentimiento aglutinador de esfuerzos, ideas y acciones para que estos procesos revolucionarios que han venido surgiendo tengan el respaldo de una masa obrera continental fuerte y conscientes de su papel histórico en la transformación social de estos pueblos de nuestra América.
Es necesario tomar conciencia de la importancia de que los obreros de América Latina trabajemos por la creación de un bloque unido en el pensamiento y acción para darle un fuerte respaldo a ese gran esfuerzo que vienen haciendo nuestros líderes en función de una mayor autonomía e independencia en el manejo de nuestras políticas y nuestros recursos. Es peligroso olvidar que nuestro enemigo no descansa y que usa todas las armas a su disposición contra nuestra lucha; hagamos nosotros igual utilizando las únicas pero más poderosas armas que tenemos que son la unidad de todas nuestras fuerzas, el espíritu combativo en la defensa de nuestras soberanías, así como el legado independentista que nos dejaron nuestros libertadores y más recientemente, nuestro comandante eterno Hugo Chávez.
En la medida en que nuestros procesos revolucionarios avancen y se consoliden, el enemigo incrementará su asedio, maniobras y todo tipo de presión contra nuestros gobiernos, lo sucedido con el presidente Boliviano Evo Morales es una muestra de hasta donde pueden llegar los imperialistas capitaneados por Estados Unidos. Los acontecimientos nos exigen mayor responsabilidad ante este escenario, la unidad de la clase obrera en nuestra América requiere de algo organizado y sistematizado independientemente de los encuentros y eventos temporales, que son importantes pero que no garantizan el seguimiento, la coordinación e integración de ideas y planes de un organismo continental con un funcionamiento permanente y equipos de trabajo que respondan a las exigencias del momento y de las políticas revolucionarias y antiimperialistas que hoy recorre la geografía latinoamericana en hombros de mujeres y hombres que decidimos no seguir siendo patio trasero de nadie.
Vamos ahora, que no se nos haga tarde.
Ramón Blasco (Guameño)
Julio 2013