La nueva cara con que el usurpador del premio nobel de la paz Barack Obama se le presenta al mundo al liberar a los cinco antiterroristas cubanos que de por si el mundo entero lo celebra, no es más que querer quedar bien ante una opinión pública mundial la cual se encuentra pujante en un momento cuando el escándalo de las torturas de la CIA que eran conocidas pero jamás cuestionados con tanta vehemencia por un sector del gobierno de los EEUU y sus aliados mismos en Europa, cuando miles de ciudadanos protestan frente a una política interna que va desde la represión hasta el silenciamiento por parte de los medios trasnacionales al servicio del capital imperial, cuando manda a degollar a sus propios ciudadanos a manos de mercenarios del ejército islámico con una actuación fabricada en los grandes escenarios de Hollywood. El cinismo al decir que la política hacia Cuba ha sido la más equivocada después de 50 años de un cruel bloqueo deja ver como el inquilino de la Casa Blanca busca entretener los hechos y que los medios con una desviación mediática inundada de propaganda enfocan la imagen del causante de miles de muertos en Libia y Siria.
Llama bastante la atención el show mediático global con el que le han dado cobertura las cadenas y prensa de comunicación global, es decir como endiosan a quien en América quiere un reacomodo de las políticas neoliberales para avanzar y reconquistar espacios perdidos en los últimos diez años y en el medio oriente ordena lanzar misiles "inteligentes" sobre países que no dan la autorización de bombardear en su territorio (caso Libia) con la excusa de luchar contra el terrorismo. Como estos mismos medios intentan borrar la imagen de quien se dice orgulloso de apoyar al régimen sionista del gobierno de Israel y seguir suministrándoles armas cuando las reservas se encuentran agotadas cuando estas son usadas en la matanza de miles de ancianos, mujeres y niños. Estos últimos en gran escala, como si se tratara de borrar el futuro de un pueblo.
Este intento de engaño de la política imperialista de los EEUU va acompañado de un interés más que por humanista que para nada ni el gobierno de San Obama ni ninguno de sus predecesores en la historia política de ese país han tenido señal alguna de respetar los derechos humanos. Entonces este interés lleva como objetivo levantar la imagen de un partido político bastante destrozado como lo están los republicanos y así calar en el pueblo pobre y humilde que son millones en los Estados Unidos. El desastre al que han llevado a Europa con las políticas del Fondo Monetario Internacional bajo las ordenes de Washington, cumplidas por sus esbirros capitalistas donde estos han sido los responsables del colapso social de millones de personas que son empujadas a vivir en la miseria, desechados por unas políticas que históricamente han beneficiado solo a unos cuantos enterrando sin vida ni historia a cientos de miles.
Será que los asesores en política de Obama y los medios a sus servicios, creen y piensan que mientras amenazan al mundo con un apocalipsis de guerra en el este de Europa haciendo rearme, movilizando e instalando sendas bases de misiles en países que se han arrodillado al encanto de occidente; pueden al otro lado del mundo mostrar un rostro generoso. Tendrá el gobierno de Washington tener la misma voluntad de reconocer que las políticas del Fondo Monetario Internacional, así como las políticas del ALCA para América del Sur son aberrantes, asesinas y empobrecedoras de los pueblos y que por lo tanto se olvidara de seguir aplicándolas. Dejará los Estados Unidos la hostilidad hacia los países del ALBA que construyen la edificación de una América Unida en función de principios de igualdad, fraternidad, solidaridad entre los hombres y así mismo con el medio ambiente
La carrera con la que empuja el reloj la Casa Blanca solo inicia y nace en su nueva estrategia de guerra silenciosa basada en golpear suavemente las economías de quienes se resisten a los ataques del conjunto imperial y sus tentáculos legales que históricamente han sido usados para avasallar y pisotear a los países que reclaman soberanía y libertad. Toda esta andanada mediática aunada al anuncio de San Obama no es más que la muestra hipócrita del lobo que está detrás de la cara de oveja que gobierna desde la Casa Blanca.
