Alexis Tsipras también enfrentará, este domingo la "larga noche neoliberal" llamada "Tratado de Lisboa" o "Constitución Europea" que tiene dos "No" a cuestas. Ha llamado a un referéndum, invocado la soberanía, que radica en el pueblo. Su estrategia, ir enfrentando, capítulo a capítulo más que obra teatral, desmontando un parapeto llamado "austeridad" vaciada de su contenido "franciscano", que han convertido en un vulgar paquete económico, de recapitalización de la deuda privada, un cuasi-rescate, en fin una desnaturalización –de postulados y medidas- de lo es una política económica y social. Tsipras, prometió eso y está cumpliendo.
Se ve en el espejo de Latinoamérica, en la obra de los hoy próceres contemporáneos de la revolución e independencia y las luchas de los pueblos, que nos llevaron, al renacer del latir del corazón de la patria grande.
Desde el primer día del triunfo enfrenta al neoliberalismo. Alexis Tsipras –nacido un 28 de julio de 1974- el mismo día que Hugo Chávez. Su ascenso al poder por voto popular, inauguró "el Eurochavismo", no por coincidencia zodiacales, pero sino por enfrentar el programa de "depauperación" mal llamado por la Merkel "austeridad" que es un remedio peor que la enfermedad.
Tsipras, encendió el "motor constituyente" al invocar al "pueblo soberano" a un referéndum, para poner fin, después de tanta miseria, como el bajón de salarios y pensiones, alza de impuestos, desempleo e inequidad. Es un freno al capital financiero que creó una tramoya. No se descartan problemas estructurales, proyecciones fraudulentas en la presentación de la deuda griega. Entre tanto Tsipras, en defensa de los bienes inalienables del pueblo como es el salario y las pensiones, no irá contra el Estado-Nación, ni bajará la guardia ante el capital financiero, el Banco Central Europeo y los intereses de la Merkel.
El pueblo griego dirá "No" para frenar la recapitalización la banca europea hoy afligida por la "burbuja financiera" que crearon. Si ira el impuesto a las grandes fortunas, y de paso Putin entrará en escena. Ya veremos.
