Luego de dos desastres naturales que han cobrado la vida de miles de colombianos, el gobierno de ese país sigue preocupado por los fracasos de la oposición en Venezuela. El portal digital del medio de comunicación Semana, publica en la media noche un análisis sesgado del fracaso de la marcha opositora el 19 de abril del año en curso. Lo inaudito del análisis sin firma de autor, es que presagia una masacre en Venezuela por culpa de las milicias, a quienes califica de matones pagados por el gobierno de Maduro: "Mal presagio: el principio del fin del gobierno del general Gustavo Rojas Pinilla fueron los hechos del 8 y 9 de junio de 1954. El 9 de junio un destacamento de soldados, pesimamente entrenados y peor comandados, disparó en la esquina de la carrera séptima con la avenida Jiménez, contra un grupo de estudiantes: murieron nueve de ellos." Luego de ese pronóstico remata diciendo lo siguiente: "El anuncio de los 500.000 milicianos, bajo las órdenes directas de Maduro, puede haber sido el "harakiri" del madurismo. Es bien sabido, que durante muchos años ha habido permanentes confrontaciones, recelos y diferencias entre el ejército, la marina y la aviación militar de Venezuela, con la guardia nacional. Con mayor razón, necesariamente tarde o temprano surgirán diferencias entre los tontons macoutes venezolanos y la fuerza armada de ese país, por más madurista que ésta sea y a pesar de que las milicias estén nominalmente dentro del organigrama militar."
El gobierno colombiano tiene deudas pendientes por delitos de lesa humanidad, no solo el genocidio contra los dirigentes del partido Unión Patriótica, sino también las masacres de campesinos financiadas por transnacionales y ejecutadas por el Estado colombiano a través de paramilitares. Lo inaceptable, es que el genocidio continúa con total impunidad, a pesar de tener un premio nobel de la Paz en la Casa de Nariño, pues mientras la oposición fracasaba en su intentona golpista el 19 de abril, en Colombia asesinaban al gobernador del Cabildo Kite Kiwe, Gerson Acosta Salazar, en la zona rural de Timbío, al sur del departamento del Cauca. Con este nuevo asesinato, ya son más de 30 los líderes sociales ultimados en Colombia en lo que va de año. ¡Alerta, el plan violento para intervenir Venezuela viene de Colombia!.
