Managua, (Nicaragua) despierta ante Latinoamérica y el presidente y Comandante, Daniel Ortega Saavedra, logra que su homólogo, Vladimir Putin, (Rusia), reconsidere a este país suramericano, como el centro de operaciones para el Continente Sureño y, de esta manera lograr una cooperación económica aceptable, al igual que militar, en el sentido de entregar una flotilla de tanques y armamentos de última generación y livianos.
El ejército nicaragüense, viene superando en disciplina castrense a muchos Estados periféricos, incluso, con aquellos que reflejan un mismo sentir ideológico
Las relaciones ruso-nicas se reactivaron en 2007, cuando el mandatario sandinista regresó al poder. El estrechamiento de ellas fue reanudado después de la derrota del sandinismo en 1990 y la caída de la extinta Unión Soviética. Putin empezó a enviar a Nicaragua granos básicos (especialmente trigo), y vehículos de transporte (taxis y autobuses). Sin embargo, los envíos moscovitas pronto llamaron la atención regional. En esa oportunidad, Ortega Saavedra indicó:" Es una agenda muy amplia la que tenemos con usted, con su pueblo, en la que hemos venido avanzando de manera sostenida",
Además de los tanques, Nicaragua ha recibido cuatro lanchas patrulleras rápidas Mirazh 14310 con ametralladoras, dos barcos misileros 1241.8, y un número no especificado de aviones de combate y entrenamiento Yak-130. La justificación oficial es el combate al narcotráfico y la protección de las aguas del Caribe, cuya jurisdicción fue dada a Nicaragua por la Corte Internacional de Justicia, tras un largo diferendo con Colombia.
El principal socio comercial de Nicaragua, Estados Unidos, también ha comenzado a inquietarse con la relación de Putin y Ortega. El Kremlin instala en Nicaragua el sistema satelital Glonass, una versión del GPS norteamericano. La reciente construcción de una estación en el borde del cráter de la laguna de Nejapa, en la capital nica, levantó sospechas en Washington.
El comandante Ortega, a pesar de ser un hombre de izquierda, mantiene cuotas de participación política y convenios industriales con Donald Trump, al igual que el indio Evo Morales, de Bolivia.
Los analistas de seguridad, ven los movimientos militares en Centroamérica como una posible refutación a la creciente presencia militar estadounidense en Europa del Este, mostrando que Rusia también puede apoyarse en el patio trasero de Estados Unidos.
Pero, Rusia tiene grandes reservas con Venezuela, (Nicolás Maduro Moros), y Cuba, (Raúl Castro). La actitud de ambos, ya no es de confiar por el aumento de la corrupción, inflación y el bajo nivel de estabilidad social que tiene el pueblo.
Juan González, quien fue subsecretario adjunto de Estado para Asuntos del hemisferio occidental durante la administración del presidente Barack Obama, alertó que la presencia rusa en Nicaragua debería "alarmar". "Nicaragua ofrece una cabeza de playa para Rusia para ampliar sus capacidades de inteligencia, elección e intromisión cerca de los Estados Unidos", dijo.
El exvicecanciller de Nicaragua, Víctor Hugo Tinoco, dijo a Univisión Noticias que en esta relación Moscú–Managua convergen dos intereses distintos. Por un lado, los de Putin: "Los rusos buscan cómo desarrollar su plataforma para tener una especie de carta de negociación frente al gobierno norteamericano, ahora que demanden que liberen de presión algunas zonas cercanas a sus fronteras".
Mientras que el de Ortega tiene que ver más con su propia supervivencia: "El interés ruso se complementa o coincide con el interés de Ortega de que necesita tener un socio fuerte del cual colgarse. Piensa que puede colgarse para conseguir algún tipo de ayuda económica, algún tipo de crédito, ahora con la fuerte disminución de la cooperación venezolana", analizó Tinoco.
Serían solo cuatro naciones sancionadas en el mundo, entre ellas Nicaragua. Ortega reconoció a los países separatistas de Georgia en 2008, cuando empezaba su coqueteo con Putin. Estados Unidos considera a estos países "territorios georgianos ocupados por Rusia".
La Ley HR 244, Consolidated Appropriations Act, tendría efecto inmediato y prohíbe a representantes estadounidenses en organismos financieros internacionales apoyar programas que "violen la integridad territorial y la soberanía de Georgia.
"Esa decisión de Ortega de reconocer esos territorios estaba dentro del plan de irse colgando del poder ruso poco a poco", alertó Tinoco. "Ahora se ha revertido y amenaza a lo inmediato algunos flujos económicos. Fue una medida descabellada".
El exvicecanciller afirma que durante la Guerra Fría Nicaragua jugó un papel de peón entre ambas potencias. Pero en la actualidad es diferente. Ve menos ideológico el asunto.
Algunos representantes comunistas obvian que Las sociedades globales son capitalistas todas, el problema es que Ortega busca colgarse de Rusia para mantener su régimen sin fin. Ortega mete a Nicaragua en una situación entre dos súper potencias en la que debería no estar.
Los gobiernos de Ortega y Putin intercambian constantemente felicitaciones y loas a través de comunicados oficiales. Por ahora, la relación se mantiene sin contratiempos.
Putin, ya no esta muy interesado en Caracas y La Habana, menos ahora, menos cuando el gobierno bolivariano esta super endeudado con la potencia China y Xi, máximo representante de ese buro pro liberal y socialista en su estructura social.
El hecho de que Putin haya sido el primer presidente ruso en visitar Nicaragua varias veces, es un reflejo de la apuesta rusa en este país centroamericano. Aunque la estadía del mandatario ruso apenas dure unas horas, Ortega dejó clara su admiración por él: "Admiramos y reconocemos y acompañamos las iniciativas que el presidente Putin ha tomado a favor de la paz ante los conflictos mundiales y en particular frente los conflictos que se han venido multiplicando en su región".