La postura política latinoamericana se radicaliza, luego del fallecimiento del General en jefe Raúl Isaías Baduel. Las alianzas se posesionan contra el sentimiento asertivo de los países pro izquierda y, en sentido la extrema se unifica con la derecha para recorrer nuevos caminos ya que, el terrorismo, los intentos de magnicidio, las invasiones mercenarias y el golpismo en sí toman voz, por lo tanto, Perú y Venezuela ya sienten esta desconfianza, donde los partidos neofascistas asumen un fortalecimiento en su lucha para lograr el control del poder.
En la República Bolivariana de Venezuela se abre una gesta histórica para determinar los niveles de competencia de sus cuerpos de seguridad y cada componente institucional, donde los lineamientos están muy claros sobre las motivaciones a futuro que deben tener cada nivel institucional de nuestra patria.
Nadie, puede instituirse sobre un territorio y querer controlarlo a través del miedo a que es sometido el pueblo. Hay que tomar una postura oficial sobre el presente. Es asunto de administración y, solo las comunidades tienen la potestad de redactar una constitución democrática, bajo la cual, cualquier gobierno no debe asumir represalia contra los opositores, cualquiera tiene el derecho al ejercicio de ser libre.
Lo único cierto, es que hemos observado en contra del Estado, una crueldad, porque los campos energéticos no funcionan, Existe un descalabro en el mantenimiento de las redes y, la banca federal no es soberana, está sometida a los daños que les repara entes gubernamentales.
Hay un salto en el vacío. Hay practicantes cuyas ideas y objetivos es restarle objetividad y credibilidad a nuestras FANB para buscar eliminar a su cuerpo ´élite castrense, que han sido dominados en el campo supersticioso porque no hay otra razón. Muchos solo sirven para crear polémicas y no estarse en paz.
De modo que el margen de las negociaciones se viene estrechando y nuestros líderes jóvenes se van al exilio, a defender abiertamente sus ideas y de profesionalización. Con el paso del tiempo, nos quedamos solos y con un enfoque mediatizado donde la identidad política, social, cultural, religiosa, económica y lingüística se viene perdiendo.
Lo que implica defender las ideas que se den en nuestro territorio. Pensamiento motivado por el máximo líder de nuestra democracia, Nicolás Maduro Moros.
Así que busquemos eliminar cualquier conflicto que se de en nuestro territorio
Hablando del Perú. Y es qué hasta Pedro Castillo en Perú, el cual está dando más tumbos que caminatas, no solo juró que nada tenía que ver con Maduro, sino que sabe muy bien que al mínimo espacio en que llegue a tener alguna afiliación madurista, el Congreso de ese país lo echará del poder, como ha sido en la historia reciente de la nación inca con otros presidentes.
Ya Lula, de Brasil, luce como un desconocido como un hombre de izquierda al igual que Sebastián Piñera de Chile. La mayoría de los pueblos les detestan al igual que EEUU, porque no reordenan el plan civilista y de construcción de las plataformas empresariales de la Nación- Estado.
