El gobierno de Milei en la Argentina no ha tenido luna de miel; en el poco tiempo que lleva gobernando, ha tenido dos grandes concentraciones populares. La ultima del pasado 24 fue convocada por los sectores sindicales a una huelga general de 24 horas La última fue multimillonaria que se repitió en varias ciudades contra la Ley Omnibus, la inflación y el cerco económico que le ha impuesto al pueblo. Detrás de las cortinas se esconde, otro personaje, muchísimo más peligroso que se considera como uno de los ungidos por Dios para gobernar el mundo, con un sentido escatológico del futuro de la humanidad. Forma parte de los judíos ultra ortodoxos que anuncian que el mesías vendrá a salvar al pueblo de Israel.
Milei se presenta como un salvador de la Argentina, con un gobierno integrado por rabinos y sectores ligados al sionismo internacional. Fueron los mismos que al arribar a la presidencia fletaron un avión exclusivo para llevarlo a EEUU a presentarlo a las figuras más connotadas del sionismo gringo. En esa reunión se mostro totalmente de acuerdo con Israel y el genocidio brutal y asesino que lleva a cabo contra el pueblo indemne de Gaza. El pueblo América Latina que permanecía ajena a esa cultura guerrerista, puede convertirse en un portal de ingresos de los conflictos sionistas con Argentina a la cabeza, conformándola en un segundo Estado de Israel. En la Patagonia, se han visto jóvenes, que no están haciendo turismo, ni nada por estilo. Son militares israelitas; se hacen llamar "los mochileros sin fronteras"; se reúnen con la comunidad, dan charlas religiosas y políticas, llevan a cabo un cuidadoso levantamiento cartográfico de la región. Algo así como lo que pasaba con las Nuevas Tribus en nuestro país; que habían ingresado al Amazonas bajo la pantomima religiosa; pero su objetivo era registrar palmo a palmo esta vasta región. Finalmente fueron despachados para EEUU, su país de origen.
Milei es un fanático religioso que ni el papa Francisco se ha escapado de sus andanadas verbales. En una entrevista expreso con pelos y señales que "el papa Francisco juega políticamente. Tiene una afinidad con Castro y con Maduro. Está al lado de dictaduras sangrientas. Tiene afinidad con los comunistas asesinos" (sic)