La violencia de un pueblo resuelto a ser libre, es como un río crecido que destruye hasta lo indestructible y FEDECAMARAS lo sabe pero se hace la loca y no cesa de provocar y provocar, manipular y manipular la realidad y propalar mentiras y más mentiras tarde noche y día, sin cesar.
¡Qué sensación tan desgarradora era ver los ojos desorbitados de hombres mujeres y niños deambulando en busca de comida, durante el caracazo!
El saqueo es un espectáculo dantesco y ojalá jamás vuelva a ocurrir en Venezuela pero la burguesía capitalista dueña de medios de producción y de distribución de bienes y servicios, mayormente, apela a los resortes de la escasez para obligarnos a la esclavitud no obstante que estamos dispuestos a ser libres e independientes del tutelaje imperialista norteamericano.
Para ello, esa aristocracia elitesca y chupasangre pretende arrebatarnos, a la brava, el poder político y echarnos encima el poder de los cañones, la barbarie; hoy nos vienen con un tal Capriles, pretenden acorralar a nuestro pueblo, apabullarnos con sus medios de difusión de embustes, al tiempo que pretenden acallar la obra del gobierno revolucionario; embisten contra la cadena presidencial que Chávez utiliza legítimamente para dar a conocer la obra de gobierno (y así tiene que ser) porque quieren mantener al pueblo en la oscuridad.
No hay verdad más resplandeciente que ver un tractor ensamblado aquí en nuestra patria, o un búfalo pastando, o una “canaimita” en manos de cada mocosito, o el imponente Hospital Cardiológico Infantil, o la Misión Vivienda en pleno auge, en fin, la obra social en marcha y eso irrita a la oposición apátrida y criminal que quiere subyugarnos a la machimberra y no podrá.
La oposición teme a que el pueblo sepa la verdad, a eso juega porque a fin de cuentas propugna una guerra civil como la española en que la élite de la que Franco era capo, llamó a Hittler (Alemania) para bombardear al pueblo español así como ahora la MUD clama a Obama para que nos bombardee a nosotros.
¡Hay que tener riñones para ser tan pérfidos, eso es Capriles y toda la MUD!
Las manos del gran pintor Picasso inmortalizaron las consecuencias de esa guerra infernal, en el cuadro “Guernica” y Chávez describe a cada momento un retrato hablado de lo que es la guerra y de lo que debe ser la paz.
Y, fíjense que Chávez no proviene de una élite sino de un pueblo resuelto a ser libre. Es un Picasso de la política (aunque a veces pinta su cuadrito, no obstante).
Mientras tanto, el Capriles que proviene de la élite, es menos que un burro.
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