Con un esfuerzo de alegría, marcada de insinceridad radiante como un
cándido de lo extraño por venir: el inestable de Capriles con un
reconcilio de paz de viveza espiritual, echó a un lado su anarquía de
fascista, engullida de vicios politiqueros y, con humildad
irreconocible: salió en los medios de Venezuela a ofrecer un tate
quieto de amistad que lo alejarían de las rumbas guarimberas en que
los estudiantes insólitos de capuchas incendiarias que en auxilio de
la oposición venezolana que quieren el poder, han sembrado de
angustias a la población en general, en su capricho de
desestabilización que a como sea, han querido dar al traste con el
objetivo fundamental de salir del Gobierno Nacional, según órdenes
precisas de Leopoldo López y, de María Corina Machado, al empujarlos
con rabia vivencial de mantener en vilo permanente el desorden
callejero de desconocimiento del presidente Maduro.

Con un desparpajo de incongruencia, el gobernador Capriles, frente a
su pesado modo de proceder al que nos tenía acostumbrados y, ahora con
un planteamiento de fugaz sentido de paz y, con alejamiento de
actitudes agresivas del que solía vanagloriarse como líder de la
derecha oligárquica y, que en una resurrección de antagonismos en suma
de pluralidades con la buena o mala intención -no lo sabemos- de
mantenerse y seguir siendo el líder que la MUD necesita, se enrumba
con lecciones precavidas en mantenerse a cómo sea en el pódium de su
liderazgo bastante incierto y, que según su pensar de contradecir las
expresiones maliciosas de otros líderes de la misma cadena política,
ha visto con desdén la aparición de, Lorenzo Mendoza, como presidente
de Empresas Mendoza, quien soltó la espumosa habilidad de su
imaginación en la intervención que hizo en la conferencia nacional de
paz en Miraflores y, que de inmediato alborotó a los políticos
altaneros cuando sentenció que el problema esencial de Venezuela era
más económico que político, lo que sin duda alguna, no dejó dormir a
Capriles al eyacular varias veces de rabia solitaria sobre esa tajante
aparición del connotado empresario.

Después de su asistencia e intervención del empresario, Lorenzo
Mendoza, en la conferencia que con la ausencia de los líderes de la
MUD y de él mismo Capriles: hubieran podido ellos, frente a él rebatir
lo dicho por el empresario y , así remendar el capote de su inocencia,
además, aquél propuso una agenda de doce puntos para la comisión, lo
que acabó de inundar de tempestades imprecisas a los que quieren a una
Venezuela en constante embrollos que nos presenten delante el mundo
como un país sin gobierno y dirigido por un presidente irresponsable
y, dada la importancia y acogida que tuvo el inicio de la conferencia
con la participación de la pluralidad de los líderes empresariales al
lado de otros importantes invitados de la vida nacional, quedaron bien
mal indigestados de inconformismo por el respaldo que obtuvo el
presidente Maduro de la misma.

La rabia cundió y el odio se duplicó al quedar al descubierto la unión
emprendedora que, empezaba por buen camino de comprensión, lo que
ellos han tildado de complicidad económica con una sencillez de
infantil explicación, por lo que a María Corina, la angustia se le
encrespó por los vasos vacilantes de su oprobio tormentoso, se plantó
y arengó a su hordas grupales a mantenerse alertas y seguir con la
misma furia demostrada en sus actos vandálicos de días y, le pasó el
testigo de su incomodidad a Capriles, ya que L.L estaba enjaulado, por
lo que el caprichoso, primero de consulta internacional, luego sacó su
disfraz de gorila imperial y, con resolución de precavido no dejó
pasar los días de carnaval que, aunque se negaron a celebrar por
contrariedad al régimen actual, por lo que él no se perdonaría dejar
de ser lo que siempre ha querido ser y, que no está preparado ni moral
ni intelectualmente para ello, se dejó llevar por las ideas que vienen
más de Miami y, de Alvaro Uribe, quien está bien pendiente del preso
de Ramos Verde y, además de apoyar las guarimbas del este, no le ha
dado la cara al Gobierno Nacional de resguardar su estado en favor de
su habitantes y, por su envidia enfermiza salteada de mentiras, ha
comenzado a desarrollar su tesis que dentro de la oligarquía no puede
haber alguien, ni otro más dilecto que lo haga desistir de obtener el
poder a cómo sea que de lo demás se encargarán los yanquis que, para
eso están en el mundo, para poner la ley y el orden bajo su servilismo
y, él es y seguirá siendo uno más de ellos y, como en su modo de
proceder se vale de todo con tal de desestabilizar y hacerse del poder
hasta que las ganas aguanten y, ganas es lo que le sobra de jugar
sucio irresponsablemente y, ese golpe continuado de alguna manera hay
que mantenerlo como él y, sus compinches sólo lo entienden por
supuesto y, sigue sin enderezarle el rumbo a su estado Miranda que,
está bajo la fuerza criminal de la derecha que de alguna manera es
obra del pensamiento y la acción de su compañero Leopoldo López que no
lo deja en paz, tal cual, su epicentro de confrontación en que ha
metido a su gente de lleno.

Mientras uno sueña preso, el otro sale a dar la cara y, cansado de
tantas mentiras que le han metido al mundo de mil maneras, por demás,
a sus seguidores como a detractores, enjuicia el momento que se brinda
de farra a lo ucraniano y, hasta piensa en la unión europea como
amigos, pero que va, el sendero lo tiene perdido y, por más que le
hayan atizado miedo a la población sin brújula de aceptación del
pueblo se han quedado, desamparados de su acompañamiento como
quisieran.

Y, lo otro que lo aterroriza es que, comienza a ver a, Lorenzo
Mendoza, como su enemigo potencial de una posible candidatura a futuro
que como un oso polar lo ha emborrachado de precaución adelantada al
lado del gobierno y él como aquaman de la Atlántida del futuro dará la
cara, aunque lo descubran por mal disfrazado.