En un seguimiento informativo realizado al candidato del George W. Bush, hemos observado que en sus visitas realizadas a los estados Anzoátegui, Lara y la muy reciente a Vargas que, según las reseñas de la propia prensa oposicionista, sólo ha podido reunir en total a seiscientas personas en las concentraciones (¿concentraciones?) antes citadas.
Para confirmar lo dicho, presentamos un párrafo de la reseña periodística publicada por el diario El Nacional en su edición del miércoles 6 de agosto del año en curso, página A2, sobre la visita cumplida por Rosalito en el litoral varguense.
En tal sentido, el citado rotativo informa que “la concentración se realizó en la entrada del barrio La Lucha. A eso de las 2:30 de la tarde ya había aproximadamente 200 personas con banderas de azul, verde y naranja y franela con el eslogan Atrévete, antiguos gobernantes de oposición y un gran equipo de sonido que repetía el reggaeton adaptado para impulsar la campaña de Rosales”.
Ya son conocidas las notas divulgadas por El Universal (03-09-2006, página 1-10) y por el semanario La Razón (27-08-2006, página A2), sobre las concentraciones efectuadas por el candidato del imperio a los estados Anzoátegui y Lara, respectivamente, donde sólo alcanzó “reunir a más de 200 personas”.
En conclusión, Rosalito únicamente ha podido congregar 600 personas en tres concentraciones, celebradas en igual total de entidades federales. Esto es un verdadero récord, porque cifras tan ínfimas no habían sido alcanzadas ni siquiera en las concentraciones efectuadas por los candidatos presidenciales Germán Borregales (0,34% de los votos en 1968), el general Oswaldo Sujú Rafo (0,04% en 1998), Alejandro Peña Esclusa (0,04% en 1998) y Doménico Tanzi, 0,03% en 1998), quienes no contaron con la multimillonaria inversión propagandística que hoy tiene el abanderado del imperio.
Entonces, será porque se las está viendo bastante negras en la campaña electoral, que Rosalito inventó desesperadamente una tarjeta de débito que se llamará precisamente "Mi Negra", a través de la cual propone demagógicamente distribuir la quinta parte de la renta petrolera. Debe ser así, porque no hallamos otra explicación.
Sin embargo, tratando de ocultar este oscuro panorama, el ahora vidente, shaman y aprendiz de brujo electoral, Enrique Ochoa Antich, alias Hermes, miembro del comando de campaña de Rosalito, tuvo el caradurismo de declarar al diario carabobeño Notitarde el pasado 29 de agosto que “la tendencia que todas las encuestas comienzan a mostrar es que el candidato unitario de la oposición, Manuel Rosales, empatará al candidato del gobierno en octubre y en noviembre punteará los sondeos de opinión”.
Según lo manifestado por EOA, queda demostrado que, ante el inevitable triunfo del presidente Chávez, la gente de Rosalito ha comenzado a manipular y deformar los resultados de los sondeos de opinión sobre las elecciones del 3D. Por lo tanto, disfrazados de videntes electorales, desde ya anuncian de manera obscena cuales serán los futuros resultados de las encuestas.
¿Cuál es el objetivo de esta socarronería, marrullería, engaño, que está en pleno desarrollo de su montaje, de su embalaje, mediático? Nada más y nada menos que, echándole mano estas cifras manipuladas, gritar a todo gañote a las 12 de la noche del 3D: “¡Fraude!”. Luego armar el caos en todo el país e inmediatamente solicitar la intervención internacional en Venezuela, intromisión que ha ocurrido en países donde los candidatos financiados por EEUU han sido derrotados aplastantemente.
Reconociendo que las elecciones del 3D son atípicas, y en las que Bush tiene mucho que perder y mucho que ganar, debemos ser críticos y estar vigilantes ante todos los resultados que presentan las encuestadoras oposicionistas, ya que estas empresas también forman parte del plan de desestabilización contra el proceso revolucionario que vive actualmente Venezuela.
Como Julián Rovira, expresamos que debemos “convertirnos en una suerte de centinelas garantes, en la medida de lo posible, de la verdad y siempre dispuestos a enfrentar el reto de hacer frente a la desinformación y manipulación”.
Sin embargo, nos gustaría conocer, según la puesta en escena divulgada por Ochoa Antich, alias Hermes, ¿cuáles son esas supuestas encuestadoras que se prestarán para manipular las cifras reales de los sondeos de opinión que se hacen en Venezuela?
En nombre de la honestidad, el augur, el nigromante, el mago, el brujo, el shaman, el oráculo, el vidente de nuevo cuño, Enrique Ochoa Antich, alias Hermes, debiera aceptar públicamente lo que los periodistas de El Universal, El Nacional y La Razón han escrito sobre los eventos electorales en los que ha participado el candidato de la CIA: ¡Señores, Rosalito está mal! ¡Se las está viendo negras!
Ante esta innegable realidad, con sobrada razón a Rosalito el electorado venezolano ahora lo conoce con el mote del “Candidato Secreto 000200”, pues sus opacas concentraciones apenas han podido superar las 200 personas, sin llegar a las 300.
Igualmente, comenzamos a entender por qué Rosalito emplea propaganda subliminal: Su presencia ha pasado desapercibida, inadvertida, omitida, en los lugares que visita.
Como el candidato del imperio se las está viendo verdaderamente negras, le decimos a George W. Bush: “¡Recoge tu gallo muerto!”. Pero Bush, mientras recoge el cadáver político de Rosalito, debe cantar un conocido vallenato de Rafael Valencia, llamado la Caja Negra: “Ay, el hombre que trabaja y bebe / déjenlo gozar la vida / porque eso es lo que lleva / si tarde o temprano muere; / después de la caja negra, compadre, / creo que más nada se lleve”. Ni siguiera su cacareada oscura tarjeta de débito.