El año 2007 comienza con condiciones meteorológicas adversas e inconvenientes para quienes hacen vida política en las pequeñas e incomunicadas islas del oposicionismo. De acuerdo a los pronósticos del Servicio Meteorológico Político Nacional, el partido Primero Justicia será uno de los islotes oposicionistas que se verá más afectado por los cambios climáticos que se producirán en los primeros meses de este año.

Pronóstico de precipitaciones

Según los pronosticadores, se producirán precipitaciones en la comarca de Primero Justicia. Estas lluvias pueden convertirse en fuertes temporales con graves inundaciones, que arrasarían totalmente con la endeble estructura de la organización lechuguina.

A finales del año 2006, esta franja del oposicionismo fue azotada por fuertes lluvias de un alto nivel pluviométrico que, con carga de rayos y truenos, asombró a los analistas más sesudos del Servicio Meteorológico Político Nacional. Uno de ellos, el opinólogo oposicionista monseñor Roberto Lückert León, arzobispo de Coro, dijo que “el partido Primero Justicia está dando el gran espectáculo. Resulta que es más de lo mismo el espectáculo que están dando, matándose por el poder y la figuración”.

En previsión a la caída de estos chaparrones, en algunos centros comerciales de Caracas, como San Ignacio, Tolón y el Sambil, la alta dirigencia lechuguina y petimetra fue vista haciendo compras nerviosas de paraguas y ropas adecuadas para poder sobrevivir al aguacero de protestas internas que se vislumbran en la cuna aurinegra. Perturbados muchos petimetres cantaban muy bajito: “Esta tarde vi llover, / vi gente correr…”.

No cabe duda, que estos figurines -muy dados a permanecer encerraditos en sus oficinas con aire acondicionado y pocos acostumbrados a subir cerros-, parece que la sobre exposición al sol durante la pasada campaña electoral les provocó un envejecimiento prematuro de la piel, por lo que se encuentran al borde de fuertes cambios en la textura de su delicada epidermis política.

Condiciones favorables para la formación de ciclones

Como se sabe, en cuanto al ambiente en esta área oposicionista, a finales del pasado año se respiró un aire contaminado y se detectó la presencia de una alta presión atmosférica.

La preexistencia de estas condiciones ambientales aumentó las posibilidades de la aparición de uno o varios ciclones tropicales, surgidos a raíz de las elecciones internas que se realizarán durante la primera semana del mes de febrero en esta parcela oposicionista.

Entre estas borrascas atolondradas que amenazaron con no dejar piedra sobre piedra en la comarca lechuguina, podemos mencionar a Leopoldo López, Gerardo Blyde, Liliana Hernández y Delsa Solórzano, quienes conjurados en un torbellino afirmaron que “el grupo que lidera Julio Borges abortó el proceso electoral interno de Primero Justicia”.

Antes que mencionar la presencia de ciclones dentro del islote aurinegro, Julio Borges ha preferido hablar de la figura de rachas internas, o sea del aumento brusco del viento divergente con respecto a su velocidad media tomada con cierto intervalo de tiempo.

Según Borges, coordinador del Observatorio Meteorológico de Primero Justicia, centro donde los responsables de este terruño evalúan las condiciones actuales del tiempo, lo que más se observó en esta zona política fue el fenómeno atmosférico conocido como calima. Es decir, la suspensión de pequeñas partículas discordantes que le dieron al aire un aspecto opaco, reduciendo la visibilidad de la atmósfera política en esta pequeña área opositora.

Presencia de sismos y tsunamis

Contradiciendo a la dirigencia de Primero Justicia, con imágenes digitales en las manos, que incluyen iconografías de radares y satélites meteorológicos, los expertos del Servicio Meteorológico Político Nacional han adelantado que los lechuguinos y petimetres no se encuentran preparados para enfrentar y controlar la llegada de una posible lluvia ácida, que podría causar daños materiales en la organización y alteraciones en las elecciones internas programadas para el mes de febrero.

Por más que lo nieguen, en la corteza terrestre de Primero Justicia se ha detectado movimientos vibratorios, los cuales han tenido como causa los choques de las tendencias presentes en las placas tectónicas de su alta dirigencia.

Según los especialistas, de crecer este movimiento sísmico podría generar un tsunami, que se propagaría en todas direcciones a partir de su punto de origen y al llegar a otras costas oposicionistas puede provocar marejadas y olas de gran altura en las demás organizaciones del sector oposicionista.

Pronóstico general del tiempo

Por lo visto, Primero Justicia se presenta como una pequeña comarca políticamente inestable, donde puede ocurrir cualquier fenómeno atmosférico inesperado. Por el ambiente político que se respira, el islote justiciero presenta las condiciones favorables para la formación de ciclones. Esto se agrava, porque al mismo tiempo es una zona donde convergen los vientos alisios de una dirigencia golpista derechista y otra ultraderechista fascista; es decir, el mismo musiú con distinto cachimbo. Igualmente, sucede respecto a la existencia y riesgo de llegada, más o menos inmediato, de terremotos de alta intensidad que propagarían sus ondas sísmicas a través de toda la oposición.

Por todo esto, como en toda la oposición, el ambiente en Primero Justicia se torna parcialmente nuboso, con la presencia de chubascos dispersos, ciclones en formación, alta presión atmosférica, tormentas dispersas, poca visibilidad y un terremoto político detrás de la pata de la oreja.

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