“Operadores” del Imperio (Los estrategas diseñadores de las guerras secretas) han trazado una nueva estrategia contra la revolución venezolana. Dirigida particularmente a los “Araguatos” o “Pichones de gorilas” –y como dice Alberto Nolia; con el perdón de los araguatos y los gorilas ; jóvenes pitiyanquis, a quienes les harán sentirse como “Luchadores de la libertad” “
Se han propuesto relacionar al proceso revolucionario bolivariano con el fascismo, a través de un razonamiento válido pero falso. Este consistiría en calificar como “nacionalismo” las posiciones antiimperialistas de Venezuela y como el fascismo es nacionalista, la revolución venezolana es fascista…
En el desarrollo de esta campaña imperial por la captación de los jóvenes de las capas medias, y a aquellos de menores recursos que "se creen", lo "mejor del barrio" y para eso, como ustedes pueden ( salvando la distancia con el excelente programa de los Robertos ) ver en paredes del Instituto Pedagógico en EL Paraiso y en otras zonas de Caracas y del país, algunas pintas que tienen el propósito de manipular a la opinión publica al distorsionar la realidad mediante la mentira más cínica y descarada , al tiempo muestran marcada subestimación a la inteligencia de “sus muchachos”
Sobre ella se erige todo un aparataje de falsedades, como nos tienen acostumbrados esos “sesudos estrategas”; dirigidas, en primer lugar, a aquellos jóvenes que se ufanan de pitiyanquis, y hacerlos sentir luchadores por la “Libertad”, combatientes anti-fascistas o anti-nazis. Esto acompañado de documentales sobre Hitler, con sus imágenes y el audio –en alemán, por supuesto– de esas imágenes, pero con comentarios descontextualizados. En blanco y negro por supuesto, para hacerlas más tétricas. No sólo en videos , también escogen el color negro en su vestimenta
Utilizan diversas redes del internet donde algunos de las capas medias y “ los que se creen” desposeídos se sienten” “in”, allí escriben mercenarios o contratistas, y lanzan sus “matrices de opinión”, que son elaboradas en laboratorios de la guerra sucia del Imperio. También cuentan con los tarifados especialistas en manipulación de la conducta humana de los medios de comunicación privados en este caso. Campaña que se basa en la guerra de la cuarta generación al utilizar el sometimiento público
Entre sus características se observan algunos signos, como el viejo puño cerrado OTPOR, símbolo que viene de la Revolución de Colores usado por el Imperialismo Yanqui en los Balcanes. En esta ocasión manipulan la idea de la guerra civil española donde el puño era símbolo de !libertad¡ Cobra interés aquí, recordar cuando la abogada Eva Golinger dio cuenta de este símbolo y denunció su origen, entonces abrieron las dos manos se las pintaron de blanco y aparecieron “Las Manitos Blancas”. Hoy, sin empacho vuelven a cerrar el puño ; como “luchadores por la libertad”, son “duros” e implacables.
Como esta campaña, entre sus objetivos trata de equiparar “el chavismo” con el fascismo, es necesario repasar la diferencia entre la izquierda y la derecha . Aunque el término izquierda está hoy algo desprestigiado, porque cualquier insensato se autodenomina así, siendo sicarios del Imperio, entre ellos, los desertores ,o conversos. E incluso otros que no son pitiyanquis, pero usan el mismo razonamiento de los presidentes de Estados Unidos como Democracia, libertad, pensamiento plural, en defensa del status. Sin embargo van con él el color negro, de ingrata recordación para la historia de la humanidad ya que fue el color por excelencia del fascismo.
L a respuesta a ese tipo de acciones debe darse con eficiencia y prontitud por los brillantes intelectuales, investigadores, comunicadores que acompañan el Proceso Revolucionario Venezolano, descifrar y combatir esa cruzada de signos y semiología del imperialismo con la contundencia que merecen estos mercantiles de la ultraderecha.