Al parecer la oposición se quiere mudar de la plaza Altamira para Ciudad Bolívar, pero la gente de Guayana no son los que viven o visitan Altamira, ni menos desconocen al que históricamente ha cantado fraude, exceptuando en la elección presidencial que señalan que le entregó a Caldera.
La oposición en Venezuela posee dos visiones: los que están en Caracas piensan que son un nuevo camino y los que están en el interior de la república han hecho un camino con trampa, engaño y dolo justo con los mismos elementos que hoy señalan.
La oposición en la Venezuela Bolivariana históricamente siempre se han equivocado por su ceguera ontológica (el no saber que no saben) al desconocer sistemáticamente a los OTROS que gran parte de esos OTROS son la gran mayoría que acompañan lo que hoy si se puede llamar chavismo, ya que en esta última elección ha surgido como una identidad cultural con su modelo de inclusión, cuestión que la oposición sigue desconociendo.
Venezuela se expreso el 7 “O” igual el 16 “D” y ha señalado muy claro que no desea un cambio de modelo, lo que pide es eficiencia y esto lo reconoció el propio presidente y para eso vamos; pero debemos desde luego asumir ese compromiso desde todos los niveles ya que esta no es de un sólo individuo más bien es de un colectivo con conciencia.
Este grupúsculo que llama a los ciudadanos a la calle y que piden que desconozcan la victoria de Rangel no es más que una vieja y viciada táctica rómulera que se implantó en el modelo arcaico de los sindicatos, esos que chantajeaban al patrono y a sus compañeros para seguir viviendo de ambos, no es de extrañar que se trate desconocer el triunfo de Rangel Gómez como no es extraño que la vieja oposición quiera conservar por cualquier vía su presencia en el estado más estratégico del país.
Hemos visto en Ciudad Bolívar a los distintos asambleístas de la oposición haciendo turismo de micrófono utilizando las armas de la anarquía y de la antidemocracia, en un llamado muy similar al 11 de abril del 2002. El gran fracaso de esta oposición es que siguen creyendo que tres estados que ostenta son más que los veinte estados que apoyan y creen en este proceso. La oposición se ha autoalimentado por los medios de comunicación pero nosotros con la inclusión, es ésta la diferencia en esta nueva Resignificación.
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