Cuando el grito de la Patria llama, hasta el llanto de la madre calla”
Ante las últimas arremetidas del imperialismo norteamericano se hace necesario generar una formación amplia de todo el pueblo venezolano en materia de guerra en todos los sentidos: guerra económica, guerra mediática, guerra delincuencial y por supuesto la propia guerra militar tal como se conoce tradicionalmente. Venezuela se una al grupo de naciones petroleras amenazadas o invadidas por un impero ávido de petróleo para seguir manteniendo su irracional ritmo de vida consumista y alocado. Mientras, la industria del “entertaiment” hace lo suyo encegueciendo las conciencias del pueblo norteamericano.
La orden ejecutiva del presidente Obama es una maniobra, es una manera de profundizar la guerra psicológica y mediática, de someternos a presión permanente para desgastarnos y atemorizar a la población. Bien sabemos que militarmente no los vamos a derrotar. Pero el Presidente Chávez los derrotó políticamente una y otra vez. Es en ese campo donde hemos planteado la lucha pues políticamente no tienen razón. La política estadounidense siempre ha estado basada en mentiras y violencia. Tenemos que trabajar para evitar una ofensiva militar estadounidense. De lo contrario, la guerra popular prolongada, de la que saben los pueblos del mundo será inevitable. Y para ello también debemos prepararnos.
Esta decisión de Obama no es más que la continuación del empeño del imperio en cortar definitivamente con el ejemplo de luz que da la Revolución Bolivariana hacia los pueblos del mundo. Recordemos que hace 2 años, en 2.013, Obama había expresado que: “Hay informes que prueban que Venezuela no observa los principios básicos de derechos humanos, democracia, libertad de prensa y libertad de reunión”., lo cual generó una respuesta de la Cancillería venezolana que podemos ver acá: http://www.psuv.org.ve/portada/comunicado-oficial-republica-bolivariana-venezuela-rechazo-a-declaraciones-presidente-imperial-barack-obama/
Las fuerzas imperiales nos han declarado la guerra y han dado pasos firmes en esa dirección y el pueblo venezolano está al borde de enfrentar el peligro de una matanza generalizada. Yo espero que no sea así, pero puede ocurrir y la CELAC, UNASUR y el paraguas defensivo que laboriosamente fue tejiendo nuestro amado Comandante ya están haciendo pronunciamientos de alerta así como otras fuerzas continentales y mundiales están percibiendo el peligro.
El presidente Nicolás Maduro es el líder de la resistencia y lo está haciendo bien con el firme y competente respaldo de la institucionalidad revolucionaria (Asamblea nacional, Defensoría del Pueblo, Tribunal Supremo de Justicia, Fiscalía General de la República) y la activa Canciller Delcy Rodríguez.
No hay otra opción que unirse al liderazgo del presidente Maduro. Rodearlo firmemente de solidaridad y trabajar por la unidad del pueblo, chavista y no chavista, para enfrentar la agresión imperial.
La fortaleza y consolidación de cualquier emprendimiento está en la unidad organizada de manera permanente y amplia, sin sectarismo ni imposiciones y con mensajes claros, no solo en las acciones de contingencia o esporádica. El “manual” que nos dejó el camarada Comandante Chávez es muy claro en estas circunstancias y el compañero presidente Maduro ha sido incisivo en esto. Igualmente, así como se moviliza al pueblo y a las instancias internacionales, también sn lo interno es necesario poner en orden a la burguesía fascista capitalista venezolana que no son los dueños de Venezuela. En Venezuela el poder es del pueblo. Y eso debe hacerse cada vez más una realidad, más allá de la consigna,