Que deben aprender los trabajadores de la empresa Kimberly Clark

Intervenida la empresa Kimberly Clark ahora viene un aprendizaje, los trabajadores aprenden rápido, no repetir los errores del pasado, asimilar las lecciones, ponerse al frente de las transformaciones sociales y económica de la empresa tomada por el Estado, aceptar el reto, los empresarios privado, el capitalismo no es único en hacer funcionar una empresa, en hacer productiva o rentable una empresa, ellos, los capitalistas saben que sin los trabajadores manuales e intelectuales ello no serían nadie, no podrán ejecutar todas las funciones de la empresa, los trabajadores tienen aliados intelectuales, académicos con quien contar, gerentes socialistas, capaces de asumir el reto de dirección con los trabajadores, emancipar el trabajo, asociar los trabajadores, emular, hacer más productiva las empresas con ese potencial liberado de los trabajadores para producir para la sociedad.

"En Venezuela se encuentran instaladas 27 plantas para la producción de harina precocida de maíz, de las cuales 18 son operadas por el gobierno de Nicolás Maduro y 9 por el sector privado. De las plantas privadas, 3 pertenecen a Alimentos Polar (harina PAN), 1 a Alimentos La Lucha C.A (Lucharepa), 1 a Asoportuguesa (Doña Emilia), 1 a Cayca Alimentos (harina Casa) y 2 al grupo mexicano Gruma: Molinos Nacionales (Monaca) y Demaseca productores de Harina Juana y Demasa, en proceso de expropiación y con "administradores especiales" nombrados por el gobierno desde 2013. Polar con tres plantas, tiene el 50% de la capacidad de producción. El resto las plantas están operadas por funcionarios del gobierno, incluyendo las que pertenecieron al Grupo Pro, expropiadas en el año 2009, que son Maizera Proarepa (Ricamasa) y Pronutrico (Doña Rosa). Pese este potencial productivo compartido entre la empresa privada y pública, ¿porque no se abastece el mercado de alimentos, porque persisten las colas, porque hay angustia creada por la escasez, la especulación y el bachaqueo? (1). Obsérvese, que Polar con menos ocupan el 50% de la capacidad de producción, lo cual quiere decir, que tiene un mayor potencia técnico concentrado.

Nos corresponde seguir indagando las causas del porque las empresas públicas (llamadas "socialistas") no abastecen el mercado, no cubren el consumo de la población, si la causa es una mala administración de la producción o simplemente si ellas responden a esa visión socialista, marxista de las relaciones sociales de producción. Veamos. Las plantas de Venalcasa en el 2015, es decir "La docena de plantas de producción de harina precocida de maíz de la estatal Venalcasa suman una capacidad de producción de 163.410 toneladas anuales. Tal cifra es el 13,4% de la capacidad de producción nacional. En el año 2015 produjeron en conjunto 24.164 toneladas, que significa el 14,7% de su capacidad instalada. Un desempeño absolutamente bochornoso" (2). En cambio; "Según datos publicados por Polar, produjeron en el año 2015 un total de 615 millones de kilogramos de harina precocida de maíz, (615 mil toneladas) con el 50% de la capacidad de producción nacional, en sus tres plantas. Tenemos entonces que la oferta instalada en Venezuela es de 1.215.000 toneladas, que puede abastecer un consumo aparente que en el año 2013 alcanzó la cifra de 1.076.118 según datos de Fedeagro" (3).

No hay duda; existe una capacidad instalada superior de la Polar, por encima del Gobierno, abarca el 50% de la capacidad de producción del mercado nacional, de allí la pregunta, como es que si disponemos de más del 90 de las petrodivisas, (El Gobierno) no tenemos un potencial superior en producción, una capacidad instalada superior al sector privado, ¿cómo es que el sector público, llamado socialista no ha construido ya sea por expropiación o no, un potencial productivo capaz de abastecer el mercado de alimentos?. La respuesta es sencilla, tiene que ver con el desempeño empresarial, en especial del manejo de las relaciones de trabajo, con la gestión de las empresas de alimentos, con "el dirigismo" de las empresas públicas, con el voluntarismo gerencial, con la falta de participación de los trabajadores, con la asunción de responsabilidades compartidas, y la falta de conocimientos de la economía socialista, del conocimiento de cálculo económico tomando en cuenta la relación costo-beneficio, la productividad y la rentabilidad de la empresa.

No es suficiente, "la lealtad socialista", se requiere capacitación y acompañamiento en la gestión de las empresas, seguimiento y control, gerencia de nuevo tipo, gerencia socialista, gerencia d elas relaciones de trabajo socialista, planificación y control socialista de procesos de trabajo, manejo flexible del presupuesto de las empresas, contraloría social, participación de los trabajadores en los procesos no solo de producción, sino también de planificación, control y dirección como también en la organización de la empresa, puesto que la conciencia socialista deviene como resultado de esa conversión de la conciencia social que surge del cambio de las relaciones sociales del trabajo, de la ética del trabajo, de la modificación del metabolismo de las mercancías y la lógica del capital, además seguimos transfiriendo la renta petrolera al sector privado, debemos detener este proceso, desngra el país, profundiza la dependencia, la revolución bolivariana debe romper con el rentísmo, no solo capitalista sino también socialista (público), se trata de minimizar el potenciamiento de la capacidad privada, ampliar las nuestras, las públicas, potenciar la capacidad del Estado y el de la propiedad social.

Veamos; "El Banco Central de Venezuela indica que en 2015 la producción de alimentos y bebidas en la agroindustria que maneja el sector público se redujo 5,3% respecto a 2014, mientras que la memoria y cuenta del Ministerio de Alimentación registra datos en rojo. De acuerdo con las cifras oficiales del despacho de Alimentación, en 2015 Industrias Diana, Lácteos Los Andes, Mercal (Unidades Productivas y Carnes Venezuela) y Venalcasa produjeron 418 mil 293 toneladas de alimentos, cifra que representa un declive de 14% respecto a 2014 y de 23% respecto a 2013. Al mismo tiempo, al contrastar 2015 con 2014, la producción de las plantas empaquetadoras se contrae: en la planta de granos Quíbor cae 52%, en la planta de granos Urachiche 30%, en la planta empaquetadora de azúcar Mampote 28%, en la planta empaquetadora de azúcar y granos Hugo Chávez 46% y en la empaquetadora de granos, azúcar y leche en polvo Tinaquillo 19,6%. En la producción de las plantas procesadoras de harina de maíz precocida también hay descensos importantes en la producción al contrastar 2015 con 2014: en la planta Guanare hubo una contracción de 9%, en la planta Zamora Vive de 51%, en la planta San Francisco de 3,5%, en la planta la Colonia de 10% y en la planta Juana Ramírez la Avanzadora de 6%. Además, la producción de la procesadora de Harina de Arroz Barinas cae 34% y la de la Planta Procesadora de Harina de Pasta Turen 23%" (4)..

¿Por qué hay descenso de la producción, de empaquetamientos, de envasamientos de parte de las empresas públicas, socialistas? Se supone, la concepción administrativista, lejos del cálculo económico, "el crecimiento desproporcionado del número de trabajadores y precios controlados que no reportan rentabilidad… el Estado cubre las pérdidas por el ingreso que obtiene a través del cobro de impuestos y la renta petrolera, hay pocos incentivos para reducir costos,…En marzo de 2014, Jorge Giordani, en ese entonces ministro de Planificación, le entregó a Nicolás Maduro un documento donde alertó: "No existe suficiente contraloría para los recursos que insumen las empresas públicas, los numerosos programas de los ministerios y otros organismos públicos, y la demanda de importaciones públicas, entre otros gastos, con lo que estos han crecido sin suficiente control y en muchos casos sin los resultados que se prometieron (5). Como vemos, tenemos que hacer productivas las empresas públicas, conviene a todos, hacerlas eficientes y eficaces, hacerlas exitosas en conformidad con lo que espera el pueblo consumidor, satisfacer la mayor suma de sus necesidades. La batalla es por una conciencia socialista eficiente y eficaz para liberarse de los soportes fiscales y rentísticos de dependencia asumiendo la autonomía de gestión y la cultura del trabajo productivo.

Por otra parte; aclaramos el significado del socialismo empresarial, para el economista Hernán Torres, "….el socialismo real del siglo XX, hizo de la expropiación total de los medios de producción privados y su traspaso al Estado el eje de la economía socialista (deformación del socialismo debido a los tiempos de "economía de guerra", la nota es mía). En ningún momento, se planteó el traspaso del Estado a los trabajadores de la propiedad de los medios de producción expropiados. (Momento de "economía de paz", la nota es mía). De esta manera, la plusvalía generada por el trabajo humano se transfirió a las arcas del Estado, y la dirección de las empresas estatizadas quedó en manos de una burocracia que se convirtió en una nueva clase privilegiada. Muchos defensores del socialismo marxista, señalan que lo que se dio en el socialismo real del siglo XX, fue una deformación de los principios socialistas, a mi modo de ver fue la consecuencia lógica de la aplicación en la práctica de la teoría de la plusvalía" (6). Vale decir; del enajenamiento producto de la lógica del capital.

Estamos diciendo que el enajenamiento del trabajador comienza con la alienación de los medios de producción social, de la participación de los trabajadores en las empresas públicas, de los órganos decisorios, en la resolución de los conflictos, de los atolladeros de la empresa pública, la reducción de los trabajadores como simples operarios, dicha política en nada es congruente con el modelo marxista, sobre todo con la nueva visión renovada del socialismo del siglo XXI, que viene a rescatar el ser social frente al metabolismo del capital, el individualismo, el beneficio propio por encima del colectivo, concepción del socialismo científico que rompe con el Estado paternalista, donde "El estado solo cumpliría una función coadyuvante supervisora mientras se lograba el salto definitorio. Pero no ocurrió así, las empresas o fábricas siguieron el viejo modelo capitalista patronal, antes el dueño era un señor inversionista, ahora, era el estado convertido en paternalista de estado, creando un monstruo burocrático, quizás peor que el anterior, y que solo se diferenciaba de este por el mote de "Empresas Socialistas" (7). Tal es la debilidad o las fallas de la revolución bolivariana en la gestión empresarial.

En verdad, la idea del socialismo chavista es crear "….un país de propietarios, (colectivos e individuales, la nota es mía) y allí estaban presentes obreros, trabajadores, operarios y empleados, mujeres y hombres, juntos con las comunidades y el ecosistema aledaños a las fábricas…. fortalecida, con un nivel de vida que facilitara el buen vivir y el vivir viviendo" (8). Objetivos muy contrarios a las ideas del desabastecimiento, las colas en que ha forzado la guerra económica del capitalismo contra la revolución bolivariana, sumergiéndola en un periodo especial, de economía de guerra, socavando la base económica de Venezuela, los precios del petróleo, el bloqueo internacional a las fuentes financieras, la presión del endeudamiento externo, la guerra del dólar paralelo, el bachaquerismo corporativo, la guerra de precios, la inflación, toda panoplia con tal de destruir los índices de desarrollo de la revolución bolivariana.

Así lo justifica Jose Toro Hardy: "El Socialismo del Siglo XXI se viene a pique cuando muere Chávez, los precios del petróleo venezolano se derrumban de $ 116 el barril a un nivel inferior a los 30 y la economía colapsa…..Venezuela ha entrado en su propio "período especial". La escasez de alimentos y de medicinas es dramática. Las colas en los automercados y en las farmacias así lo evidencian. Nada se consigue" (9) El neorentismo socialista está en crisis, el capitalismo y el socialismo rentista colapsó, "el rentísmo petrolero", el modelo sustitutivo de importación", "el modelo dependentista centro periferia" y con ello el capitalismo dependiente, las importaciones están en picada, el socialismo ahora tiene que demostrar que también con bajos precios del petróleo, es capaz de resistir y vencer la guerra económica y no solo con altos precios del petróleo puede sostener los logros sociales del chavismo.

Fuentes consultadas:

1.-La Madurada, "El monumental fracaso de las 18 plantas del gobierno que apenas producen harina de maíz", 04-06- 2016.

2.-Idems.

3.-Idems.

4.-Salmerón, Víctor "¿Qué está pasando con las empresas en manos del Gobierno?", Prodavinci, 20-05-2016

5.-Idems.

6.-Torres, Hernán "¿Expropiar es sinónimo de Socialismo?", Aporrea, 15/11/2010

7.- Patiño, Pedro, "Freddy Bernal… "Un Error las Expropiaciones"… No Freddy, No fue error, fue mala Instrumentación", Aporrea, 05/07/2016

8.-Idems.

9.- Toro, Hardy , " La URSS y Venezuela", Runrunes, 07-03-2016.



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Alexander Kórdan Acosta R.

Economista. Magíster en Gerencia de Servicios Administrativos. Doctor en Ciencias Estratégicas para el Desarrollo. Profesor de la Universidad Bolivariana de Venezuela (UBV). Instructor de Cooperativismo Comunitario.

 kordankovki@gmail.com

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