Nunca olvidaré aquél 01 de febrero del año 2009, el cual por muchas razones para mí tienen un valor supremo, en primer lugar porque ese día es el cumpleaños de mi madre, una mujer trabajadora y luchadora, quien vivió al igual que muchos, años de frustración y decepción hasta que emergió en la escena política el Comandante Chávez, y desde ese día mi madre empezó a creer en la política y se convenció de que sacar adelante al país era posible, claro está, con el Comandante dirigiéndolo.
Volviendo al 01 de febrero del 2009, recuerdo encontrarme en los espacios abiertos del Teatro Teresa Carreño, los cuales se estaban tomados por muchos stands de los Ministerios que presentaban en aquél entonces los logros que se habían alcanzado, gracias a la cooperación del pueblo cubano. Ese día me encontré al profesor Navarro, con quien estuve conversando brevemente, quien tuvo la cortesía de presentarme al profesor Farruco y a Diosdado Cabello, con quien sólo cruce un saludo y un estrechón de manos.
En ese instante veo que una multitud se abalanza hacía donde me encontraba, al punto de dejarme sofocado por la presión que ejercían sobre mi humanidad, y al darme cuenta tenía justo a mi lado a aquél fabuloso hombre que conocí un 04 de febrero de 1992, al cual desde ese día teniendo apenas 09 años admiré y lo hice mi héroe. Yo me quedé estupefacto, incrédulo, viendo la agilidad y facilidad con que se dirigía a los medios, como enamoraba a todo aquél que se le acercaba, como irradiaba energía, como salía al paso a la más malintencionada pregunta proveniente de algunos medios voceros de la oposición, y como teníamos al frente a un hombre que luchaba por nosotros contra los demonios y los derrotaba haciéndolos morder el polvo.
Yo me encontraba con la “boca abierta” disfrutando ese momento, hasta que un gran pellizco me trajo de vuelta a la tierra, cuando me viré a ver quién me había pellizcado, veo a una señora bajita con un camarógrafo al lado quien intentaba tomar mi posición sin éxito, pues la multitud no me dejaba mover. La señora me dijo: Soy Teresa Maniglia y necesito que te quites ya, pues me estas dañando la toma, yo le explicaba que no podía moverme, sin embargo ella insistía no sólo de palabra, sino que repetía los pellizcos, en eso varios “Guardaespaldas” que estaban cerca empezaron a intimidarme invitándome a retirarme, y les repetía que no podía moverme, y todo esto pasaba a las espaldas del Comandante, hasta que les dije que iba a gritar que me estaban maltratando para que el Presidente interviniera; en ese preciso momento casualmente voltea el Presidente Chávez y se me queda viendo, y Teresita Maniglia me ve, creyendo tal vez que protestaría por lo que estaba sucediendo a la espaldas del Presidente; sin embargo al ver a Chávez frente a mí, honestamente pensé en no desperdiciar mis 2 minutos(seguro fue menos) frente a él y decírsele algo trascendental, algo que pudiera ser un mensaje para él, algo épico o heroico, era el momento que deseaba tener con él desde hace muchísimo tiempo, era mi encuentro con Bolívar, mi encuentro con la Historia, mi encuentro con la Patria. En ese instante quedamos él y yo de frente y toda esa multitud –para mí- habían desaparecido, pues no había más nadie sino él y yo, Chávez tomó la iniciativa y recuerdo haberme dado una palma en el hombro y extendió su mano para estrechar la mía, sin dudar y de forma automática extendí mi mano y cuando apreté la suya, sentí una energía inexplicable, sentí que tomaba la mano de un ser de otro mundo, sentí que tenía al frente un hombre que no era cualquier hombre, tenía al frente a una persona que pasaría a la historia y yo era parte de esa historia, debo confesarles que por un momento sentí desvanecerme y comprendí lo que sentían esas personas que se desmayan frente a sus ídolos, sin embargo esto era distinto, no era un “Rock-Star” , era una persona con una energía y un aura que no cabía en recinto donde nos encontrábamos y yo había sentido esa “super energía”.
El Presidente Chávez sosteniendo mi mano me saludo y quedó esperando mis palabras, las cuales había ensayado hace bastante tiempo en mis encuentros ficticios con el Comandante, sin embargo le dije con total seguridad y claridad: ¡COMANDANTE MI MAMA ESTA CUMPLIENDO AÑOS HOY!, a lo que Chávez responde: ¿Cómo se llama tú mamá y de donde es?, yo le respondí: MARÍA PERDOMO, DE CASALTA 3, el Presidente volteo enseguida con una agilidad, seguridad y carisma impresionante, como el mejor presentador de TV que haya visto, y frente a las cámaras dijo . MARIA PERDOMO DE CASALTA 3, ESTA CUMPLIENDO 15, TE FELICITO!, en ese instante se volteo, me dio nuevamente una palmada y se retiro, y toda la multitud se fue dejándome sólo, con la satisfacción de haberle dado el mejor regalo que hubiera podido darle a mi mamá, envuelto en una mezcla de emociones barbarás.
Enseguida empecé a recibir llamadas de muchas personas para comentar sobre el reciente incidente, y para pedir el número telefónico de mi mamá para felicitarla. Luego, horas más tarde me llamo mi mamá para comentarme sobre lo que había pasado, me dijo: Hijo de verdad que no hay regalo que superé el que me has dado, aquí en Casalta 3 he sido objeto de la atención de todos los vecinos, pues soy la única a la que el Presidente felicita en Cadena Nacional el día de su cumpleaños, jamás había recibido tantas felicitaciones, imagínate que me han llamado hasta del interior para felicitarme familiares que nunca lo habían hecho, por otra parte debo decirte que lamento no haberlo visto cuando me felicitaba; y yo le dije que si no lo había visto como se entero, a lo que respondió: hijo yo iba caminando por la zona y si notaba que mucha gente que apenas me conocen sabían de mi cumpleaños y me felicitaban, cuestión que me causo curiosidad, por lo cual interrogue a uno para que me explicara como sabía de mi cumpleaños, quien me respondió: ¿No lo viste maría?, el hijo tuyo, el catire estaba con el Presidente y en Cadena Nacional te felicito en tú cumpleaños, mi mamá me comenta que por varios días recibió llamadas y felicitaciones como nunca en su vida, pero que nunca olvidará que él hombre a quien admiraba y amaba incondicionalmente se había dirigido a ella, frente a toda la nación para rendirle honores en su cumpleaños.
Este relato es apena uno de los miles que seguro habrán, donde se demuestra la humildad, sencillez y humanidad de ese “Comandante Supremo”, que aunque les duela a muchos que al igual que cuando Jesucristo y Bolívar estuvieron en la tierra, no lo comprendieron e inclusive se les opusieron, quienes tuvimos la fortuna de seguirlo sabemos que fue un Ser Supremo que vino a enseñarnos el camino hacia la “Suprema Felicidad”, sé que esto sonará como si lo escribiera un fanático religioso, sin embargo debo decirles que all margen de las religiones que conocemos, que al igual que otros ámbitos de la vida humana, dividen al mundo; estoy convencido de que el Presidente Chávez fue un Ser de una Altura Extraordinaria , que doy gracias por haber coocido y seguido desde aquél 04 de febrero.
Gracias Comandante, yo tampoco lo olvido y quiero que sepas en cualquier lugar en donde te encuentres, porque sé que toda esa energía de la que fui testigo no se pierde sino se transforma, que no ha pasado un día sin que piense en ti, seguimos en la lucha, Que tú Sacrifico y Entrega no se pierda, Hasta Siempre Hugo!
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