¡Asustado y con el corazón "trancado" por el Trancazo que unos 10 o 12 vecinos de Asoprieto iniciaron esta mañana a las 8 am más o menos, impidiendo el paso de los padres quienes debían llevar a sus niños al CDI Los Cedros o a la Guardería que funciona en el sector Bella Vista de nuestra ciudad de Ejido!
Me acerqué nervioso a pedirle a una señora que me dejara pasar para llevar a mi niña de 3 años a la Guardería y me dijo que no, que me bajara del carro para "luchar" por esa "criatura tuya" y para liberar a Venezuela de esta feroz dictadura.
Decidí "recular" con mi vehículo y buscar otra alternativa de llegar hasta la guardería. Quedé pasmado de la sorpresa cuando mi otra niña de casi 6 años, a quien debía llevar a su escuela, me preguntó: "¿Por qué esa señora me dijo "criatura"? Yo no soy ninguna criatura. Yo soy una niña." Y luego continuó: "¿Esa señora quiere libertad quemando a Venezuela?"
A esta hora, amigos, ya van 21 fallecidos (falleció la Sra Amelina Carrillo, luego de ser golpeada en la cabeza por una botella de agua congelada que fue lanzada desde las alturas de un edificio en Caracas) por causa de la "violencia" que estos señores dirigentes opositores han decidido imponer en nuestra querida Venezuela.
No hay duda que el daño más trágico que se está haciendo al pueblo venezolano es el envenenamiento del cerebro. Mucho se ha hablado, escrito, televisado, sobre la triste realidad que está viviendo el pueblo desde la llegada del comandante eterno y ahora con la presidencia del Presidente obrero Nicolás Maduro: nos están aplicando una guerra no convencional o de Cuarta Generación, que no hace uso de cañones, bombas, ametralladoras, tanques, y de todo eso que usted imagina se usa en la guerra. Esta guerra se hace desde los centros de comunicación mundiales y locales donde se diseña todo lo que debe "salir al aire" y que va dirigido a lo que los especialistas llaman el "cerebro reptil" con la única idea de generar odio, rabia, desconsolación, desasosiego, temor. Este odio y rabia es sabiamente manipulado para eventualmente conducirlo a su climax y propiciar respuestas de agresión al otro, al amigo, al vecino, al marido, al hermano, entre compatriotas. ¡Nos están conduciendo a una guerra de perros!
Ya lo hemos visto en las recientes acciones terroristas. Han golpeado hasta el cansancio a jóvenes que han marchado con ellos por la sospecha de ser "infiltrados chavistas" en la marcha opositora. Recientemente lanzaron al río Guaire a dos jóvenes quienes también les acompañaban porque a alguien se le ocurrió pensar que estos dos jóvenes eran Chavistas infiltrados. El ataque a la Maternidad del Valle Hugo Chávez es lo que podríamos calificar como el acto más bochornoso de los terroristas contratados y de los planificadores identificados. El simple acto de esta mañana, de esa señora, al no dejarme pasar es, sin duda, la prueba más clara de cómo esa campaña de Guerra Psicológica ha penetrado en la Psiquis del venezolano común y lo está llevando a cometer los más abominables actos de deshumanización que tanto daño le ha hecho a otras naciones, en esta locura Americana por asegurarse las fuentes de energía que tanto van a necesitar en los años por venir.
Es momento de que nos agrupemos todos a luchar en contra de ese monstruo imperial que está allí, sentado, esperando a que sus ya "domados" venezolanos le hagan el trabajo sucio para luego ellos venir a limpiar todo y "vivir todos felices y contentos" El ser humano será siempre más fuerte que cualquier técnica.
La lucha por lo social y pensar en el hombre como el centro de todos los esfuerzos es posible y se hará realidad.
Me ha provocado terminar con una advertencia de Herbert Schiller, crítico estadounidense del papel de los Medios de Comunicación e información (5 de Noviembre, 1919 - 29 de Enero, 2000): "Una nación cuyos medios masivos de difusión están dominados por el extranjero no es una nación."
¡Viva la Paz! ¡Agrupémonos todos unidos en Paz!