El diario español "El País", a través de un artículo el 4 de enero afirmó que, el 10 de enero será el mandatario Nicolás Maduro quien se juramente como presidente en Venezuela y no el excandidato de la ultraderecha y prófugo de la justicia Edmundo González Urrutia; acérrimo enemigo de Venezuela ese medio hispano de comunicación impresa adversario extremista contra la revolución socialista bolivariana y antiimperialista, no pierde oportunidad de denostar a lo realizado por Chávez y Maduro, no le agrada a "El País" el empoderamiento del pueblo y los anuncios múltiples de elecciones, contrasta ese diario monárquico español con la exitosa actuación de la diplomacia venezolana exhibiendo ante el mundo el diario acontecer de nosotros, confianza recogida por cientos de medios mundiales y con admiración comprobada de millones de personas.
Donde "El País" se desborda es disimulando la escasa concurrencia a los actos promovidos con motivo de la muy gris gira emprendida por el opositor tembleque e indeciso, el Edmundo, por varios países del continente americano, la cual tiene como objetivo empañar la toma de posesión de Maduro el 10 de enero y desviar la atención. El artículo de "El País" resalta que, González Urrutia, desde hace un mes, insiste en la idea de ser él y no Maduro quien se cruce sobre el pecho la banda presidencial, aunque no ha dicho la manera en la que eso, podría ser posible.
Este afán no inserta como información que, las autoridades venezolanas anunciaron una recompensa de 100 mil dólares a quien facilite la captura de González Urrutia. En los U S A el senador republicano Bernie Moreno afirmó "el presidente electo Donald Trump, trabajará con el mandatario venezolano Nicolás Maduro, pues es él quien va a tomar posesión del cargo el 10 de enero y es la nación estadounidense quien elige las relaciones así éstas sean complicadas, son los líderes de los países y la gente, pero al final los intereses de los U S A para detener el tráfico de drogas y que reciban de vuelta a todos los venezolanos ilegales en este país".
Aprecie bien este argumento gringo de viejísima data, estructurado por funcionarios de la dictadura capitalista salvaje desde Washington, reiterándole a sus votantes internos engañados, ser ellos los del voraz salvajismo quienes en el tórrido atosigamiento comunicacional se jactan de ser libertadores de gobiernos no considerados por ellos en su arrogancia dignos de ayuda o consejos, lo hacen estos gringos de mier…coles y de todos los días de la semana irrespetuosos para con la soberanía de cualquier nación a la cual sus gobiernos se le alcen a Washington siempre arrogante exigiendo gobernantes al servicio exclusivo de las decisiones y desplantes de los ocupantes de La Casa Blanca, mientras la prensa mundial atosiga ayudada por las redes sociales en planificación global mintiendo sobre una supuesta anormalidad venezolana, cuando por lo contrario estamos en paz con decisión y esperanza en el 2025.
La mediática mundial pro gringa estruendosa inunda de mentiras y desinformación a los habitantes mundiales pendientes de sus teléfonos e ignaros de la vida absolutamente normal en Venezuela 2025, lo de ellos es hacerle creer al mundo por ejemplo un supuesto temor al regreso oficial a clases este 7 de enero, hay entrevistas planificadas para jugar con la libertad de prensa, ir a la radio, la TV y dar declaraciones o redactar noticias recogidas por medios poseedores de un largo incumplimiento a una Ley de 1963, la obligación oficial de dar acceso a las cadenas gubernamentales de información.
Hay medios que desde hace años sin dar cobertura a los eventos oficiales venezolanos se esconden tras la libertad de realizar programas grabados a los cuales no pueden interrumpir, método para quedar excusados engañando al gobierno y haciendo lo que les venga en gana siempre y cuando sea hacia el disimulo en el accionar contrarrevolucionario opositor creador de sufrimientos. La demostración más clara es el saboteo disimulado al retorno a clases oficialmente el 7 de enero, con sus hackers mentales desinforman la envidiable seguridad a los alumnos en sus respectivas aulas, desde el exterior crean balas perdidas, desquiciados en su disociación, no pasarán, no pueden ni siquiera demostrar su nada pulcro deseo de violentarle el arribo a las aulas a los niños, no se lo perdonarán ni sus hijos cuando estén en capacidad de entender la anomalía mental de sus padres virulentos.
