El pueblo tiene que estar alerta, y no dejar que le pongan otra venda en sus ojos, como ocurrió en las décadas pasadas.
Bien a la final los gritos de victoria ¡GANAMOS!, ahora vamos a celebrar, como siempre hemos celebrado, ¡ganamos! Tenemos especialización en estas lides, decían, tienen que echarle bolas estos currutacos, se les oía a estos pseudos revolucionarios, en medio de su “celebración”, pongo en comillas celebración, porque ellos “triunfaron” el sábado 20 a punta de dinero, un triunfo con sabor a derrota, porque es el pueblo quien va a regir las riendas de este gran país y no un pequeño grupo, de pseudos dirigentes que a punta de real tratan de comprar conciencia, para obtener beneficios personales, que después que consiguen lo que quieren se olvidan.
Y el Presidente Chávez imaginándose otra cosa, claro se imagina otra cosa porque nuestro presidente esta claro, con sus ideas y con el compromiso que tiene con su pueblo. Y que nuestro presidente en cada una de sus alocuciones busca que el militante del Partido Socialista Unido de Venezuela sea propietario de la nueva CONCIENCIA REVOLUCIONARIA, en sentido de la solidaridad, el humanismo y sobre todo ese socialismo que debe comenzar a dar pasos sólidos a partir de enero del 2008. Pero para que haya el cambio que todos queremos, tenemos que estar alerta, y no dejar que esos camaleones, que irresponsablemente se han colado, en este proceso hagan lo que les venga en gana. Yo percibo que estos camaleones, quieren a como de lugar, mantener al MVR como partido, como lo dice el camarada José Sant Roz, en uno de sus artículos “… hay un Miquilena muy vivito”. Con esta elección del pasado 20 de octubre, parece que estos camaleones se resisten a morir, y no quieren ceder, para dar paso al nuevo hombre y a la nueva mujer, con conciencia revolucionaria.
Hay un artículo de mi autoría que anda en nuestro libro abierto, aporrea, tiene como titulo “la honrosa tarea de conquistar el socialismo”. Y me voy a permitir tomar un párrafo, de este articulo.
“Tenemos que lograr elevar el papel rector del Partido Socialista Unido de Venezuela y, así ejecutar la línea de masas, es posible proteger y efectuar de modo invariable las exigencias e intereses fundamentales de las masas populares venezolanas, según una correcta estrategia podemos llevar a feliz término la revolución Bolivariana y la construcción del País que todos queremos, poniendo en plena acción nuestra fuerza creadora y erradicando el burocratismo y la corrupción. Asegurar la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela, donde estas líneas salgan de la base y, así ejecutar la línea revolucionaria de masas, que no es otro que el principio fundamental, que se debe mantener en el curso de la construcción del socialismo bolivariano.
Los órganos del Poder Popular a todos los niveles deben realizar sus actividades bajo la dirección del único líder Hugo Rafael Chávez Frías y según la línea política de éste, y aplicando la línea revolucionaria de masas, perfeccionar de modo ininterrumpido el sistema y el método de trabajo político y social, para consolidar esta revolución bolivariana.
El espíritu y el método creado por nuestro presidente, representa el más revolucionario y democrático principio de dirección de masas y método de trabajo, visto a nivel mundial, que se deben combinar con acierto en la dirección del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Los funcionarios de los órganos del Poder Popular, compenetrándose en todo momento con las masas y efectuando una enérgica labor política entre ellos según las exigencias de este espíritu y método, tienen que agruparlas con firmeza en torno al proyecto de país presentado por nuestro presidente y llevar a la práctica la línea y política de éste, apelando a sus valores y a su talento.
Asimismo, deben ser auténticos y fieles servidores, honestos servidores del pueblo, que con el cálido afecto y espíritu de consagración abnegada le dediquen todo su ser compartiendo con él mismo pueblo las penas y alegrías.”
Ciudadano presidente usted debe enterarse de lo que esta pasando, con el poder constituido, y los pseudos dirigentes políticos, que buscan de una u otra forma mantenerse en la repartición del cambur, cambur este que tiene dueño, y que todos sabemos que el dueño de ese cambur es el pueblo venezolano. Que irresponsabilidad, de estos camaleones, pseudos dirigentes, esos mismos que se abrogaron que su partido aportó tantos votos para la elección de Chávez, cosa que me da pena ajena, ya que los votos son de Chávez y el poder es del pueblo.
A estos señores, si se pueden llamar señores, lo vemos un ratico vestidos de rojo y otro buen rato jugando a la desestabilización.
Pues, hasta trabajo les ofrecieron a muchos jóvenes, muchachos, amigos, que por voluntad propia y de su batallón quedaron electos como comisionados, y a los voceros de las circunscripciones les ofrecieron efectivo para que declinaran a su compromiso, o en su defecto votar a favor de sus candidatos. Camaradas, ahora sí ofrecieron trabajo, dinero, rumbas, becas, cupos en universidades.
Hay una propuesta que ya es una realidad en el país como lo es la siembra en el corazón del pueblo humilde.
Estos pseudos dirigentes conviven con los escuálidos, porque sencillamente son caimanes del mismo pozo, no porque no tenemos que convivir con ellos, sino porque son iguales en el fondo y allí, donde no llega luz moral, y donde se fragua toda clase de anomalías, con el único fin de obtener el poder. Andan como locos estos pseudos dirigentes, porque han notado el avance significativo de algunos líderes comunitarios, o mejor dicho de la base o del pueblo, que se decidieron a dar la pelea adentro y aportar en la construcción de un sólido instrumento político electoral y referencia ética en el mundo, llamado Partido Socialista Unido de Venezuela. (PSUV).
Estuvimos ante la presencia del mayor y más interesante ejemplo de democracia participativa y protagónica, jamás visto a nivel mundial, el pasado 20 de octubre, y en lo que muchos se empeñan de empañar, con las viejas prácticas de politiquería barata, de los otrora dirigentes políticos.
Insisto que este proceso, y momento histórico no se debe prestarse, alquilarse, empeñarse o venderse a los impostores que tratan de pescar en rió revuelto.
El pueblo tiene que estar claro, fuerte, crecido y con la firme convicción que la patria nos reclama, nos llama y espera de nosotros lo mejor. Nos decía el cantor del pueblo, “hagamos la historia, y que otros la escriban en un mundo mejor” que sabio nuestro “Ali Primera”; por eso necesario es vencer. Hasta la victoria siempre.
Patria Socialismo o muerte. Venceremos
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