Que la opción del NO en el referendo del pasado 15 Febrero sacase más votos que la opción del SI en algunos estados era de esperarse, pero el hecho de que en el Táchira la votación por la posición retrógrada de la población haya avanzado, y que en Mérida haya incluso superado la votación favorable al proceso durante la elección de gobernadores y alcaldes de Noviembre 2008, plantea la necesidad de una profunda investigación por parte de la dirigencia del PSUV; una investigación que arroje conclusiones concretas y creíbles, y que además señale responsables, por comisión o por omisión, pero responsables al fin.
Una comisión investigadora debería empezar por plantear preguntas como las siguientes:
1. ¿Qué sucedió en Táchira y Mérida desde el 23-11-2008 hasta el 15-02-2009?
Y para ayudarles a buscar la respuesta a la anterior pregunta planteamos la segunda,
2. ¿Qué sucedió en el Zulia y Carabobo durante este mismo periodo?
Y continuamos,
3. ¿Qué motivó a aquellos que votaron por el proceso o se abstuvieron en las elecciones de N-2008, en Táchira y Mérida a cambiar su postura?
4. ¿Qué mejoró o qué empeoró, en Táchira con un gobernador de la oposición, y en Mérida con un gobernador del proceso?
5. ¿Qué ocurrió en aquellas alcaldías en las que triunfó el proceso en N-2008 y ahora la gente tiró la burra al monte?
6. ¿Qué ocurrió en aquellas alcaldías en las que se montó un alcalde opuesto y ahora la votación escuálida aumentó?
Yo no quiero darle ideas de las posibles respuestas a la hipotética Comisión Investigadora, pero simples sondeos en los diferentes estratos sociales de la población de los diferentes municipios de estos dos estados, podrían enrumbarlos por el derrotero correcto.
Después de que se analicen las causas y fríamente se establezcan responsabilidades, debe haber una re-estructuración de los cuadros directivos del partido, a todos los niveles. Debe haber, al menos, llamadas de atención en algunos casos, sanciones y, por supuesto expulsiones en otros.
No podemos achacarle los resultados solamente a los fallos o aciertos de las campañas, porque, aunque los diseñadores, directores y supervisores de las campañas deben también ser objeto de una investigación por parte de la Comisión Investigadora, las posibles fallas o errores que aquí se encontrasen no serían sino un pequeño haz de luz en todo el panorama a descubrir, analizar y reflejar en un extenso informe, que sea utilizado, desde el nivel central, para dar un paso más hacia la depuración de las líneas directrices de este proceso; o mejor dicho, hacia la detección de los tumores malignos que aún le quedan a la Revolución Bolivariana, y que amenazan con generar una metástasis generalizada en todo el sistema si no los extirpamos ahora y para siempre!
Por supuesto, los resultados de las elecciones de N-2008 deben también ser objeto de una profunda investigación. No en aquellos estados ya gobernados por la oposición, sino en el Táchira específicamente. ¿Cómo es posible que se pierda un estado en el que el gobernador había tenido todo el apoyo del gobierno central? ¿Qué hizo, o qué no hizo, el gobernador del Táchira, para que en la capital del estado solamente la oposición sacara la abrumadora ventaja de 30,000 votos? Creo que a estas alturas, las respuestas a estas últimas preguntas ya deben ser voz populi entre los directivos del PSUV (¿lo sabrá el presidente?); sólo falta que se tomen las medidas correctivas correspondientes, ya que no podemos solidarizarnos con quien, por inocencia o negligencia, equivoco los guiones centrales del partido.
PATRIA, SOCIALISMO O MUERTE!
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