El pueblo venezolano tiene que sufrir el acaparamiento y la intensa especulación que se ha cernido sobre el país ya que los pulperos no respetan el control de precios. Las clases excluidas viven mal mientras los especuladores obtienen márgenes altísimos de ganancias, mientras el dólar paralelo fluctúa libremente. Y cada día que el dólar sube la comida del pueblo es cada vez más cara.
Mientras esto sucede, los Ministros de la Economía se sienten muy satisfechos por su logro de haber alcanzado un crecimiento del (…) del PNB el cual ha significado mayor pobreza en las clases bajas y medias. Estos funcionarios sólo se detienen en el signo de lo feliz de su política económica. Pero no llegan a percibir la honda ansiedad social creada, a través de la cual puede penetrar el caos y la anarquía y hacer naufragar el Proceso.
Y si a esto añadimos el mal ejemplo dado por la burguesía parasitaria y las “elites boliburgueses”, los que en estas circunstancias pide sacrificios a todo mientras viven en la opulencia, viajan constantemente al exterior, (con los dólares sustraídos de Cadive) exhiben el espectáculo bufo de sus BlackBerry. Si observamos todo esto, hay pocas esperanzas. Estamos sobre un volcán pronto a explotar si el gobierno se niega a escuchar, a implementar cambios, a hacer cesar el destructor malestar social producido por el acaparamiento y la especulación. El pueblo está sufriendo y el socialismo no se puede construir con seriedad si éste no responde a las necesidades, sino le permite vivir con dignidad y realizarse humana y espiritualmente.
De allí que nuestros dirigentes en estos cruciales momentos están en la obligación de no olvidar la admonición del Libertador, dicha el 15 de febrero de 1819, ante el Congreso de Angostura: “El sistema de gobierno más perfecto, es aquel que produce mayor suma de felicidad posible, mayor suma de seguridad social y mayor suma de estabilidad política”. Y el socialismo, aunque nos duela decirlo, no ha logrado en todos estos años de Revolución ofrecer una posibilidad de realización a todos, no ha dotado al pueblo de una verdadera seguridad social. Con lo cual por la falta de cojones de los gobernantes del chavismo un grupo de ambiciosos desesperados de la Mafia amarilla, rompe con la estabilidad política.
La escisión entre el esfuerzo y el logro conduce a dos comportamientos adicionales, la pasividad y el consumismo. La pasividad, pues no se entiende que es necesario activarse en un esfuerzo para poder obtener las metas de bienestar o riqueza deseadas; consumismo, porque ni se conoce la importancia de la producción ni se valora el producto obtenido, simplemente esa tendencia propia de la burguesía parasitaria se agudiza en todos los sectores sociales, pues es la manera como se entiende que llega la riqueza petrolera, es una situación donde hay consumo sin producción (aunque esto no quiere decir sin trabajo).
La competencia por la renta adquiere las formas del dilema: la burguesía compite a través de la actividad económica, mientras el gobierno lo hace con política social. Los distintos sectores de las clases se organizan para ver cómo obtienen su parte y lo hacen en reclamo de un derecho que se piensa adquirido, el de disfrutar de la riqueza petrolera. Las políticas sociales se orientan a una exigencia de equidad distribucionista; pero no sobre la riqueza creada en las actividades económicas regulares, sino en el ingreso del Estado proveniente del petróleo, es decir de la renta que debe ser apropiada. Esta dinámica de la competencia crea un tipo de conducta entre las clases que pudiera caracterizarse por tres rasgos fundamentales: la no relación esfuerzo-logro, la pasividad y el consumismo.
Solamente cuando aprenda-mos a establecernos metas sucesivas y acumulativas en el tiempo, y las unamos en una propuesta sólida y colectiva a decisiones sobre el dilema de siempre, estaremos en posibilidad de hacernos una política de futuro.
El comportamiento rentista de la burguesía amarilla y los rojo-rojitos presumen, como corolario de todo lo anterior, que es posible obtener beneficios sin costos, sacrificando al pueblo.
¡Gringos Go Home! ¡Libertad para los cuatro antiterrorista cubanos héroes de la Humanidad!
¡Chávez Vive, la Lucha sigue!
¡Patria Socialista o Muerte!
¡Venceremos!