La Isla de Margarita tomada por los comerciantes árabes y musulmanes desde hace muchas décadas atrás se muestra apegada a sus propios métodos y procedimientos en eso de tratar al trabajador al cual siguen considerando como sujetos indefensos para su explotación donde no hay ni buenos sueldos, ni estabilidad, ni consideración y mucho menos socialismo y respeto para el trabajador. Esto se debe al enorme Poder Económico de estas familias dueñas de grandes, medianas y pequeñas empresas donde la unidad contra el trabajador nativo se une a su influencia, corrupción y manejo de las normas desde la perspectiva del dominio económico. Los margariteños saben de este Poder y además ven como las contribuciones hacia el Partido de Gobierno es mil millonario lo cual por cierto nada tiene que ver con la “ideología” de estos quienes solo buscan impunidad en sus acciones. Seguramente AD y COPEI en su momento también tomaron de este dulce veneno de la corrupción para alimentar a sus burochorocratas.
La cuestión es fácil de percibir sin recurrir a estadísticas o sentencias de los Tribunales del Trabajo y sobre todo por la estabilidad laboral a la vista. Un día vemos o visitamos varias tiendas conociendo unos cuantos empleados. Volvemos a la vuelta de unos meses y nos encontramos con que no hay ningunas de aquellos empleados lo cual comprueba la sospecha de esta elevada rotación de personal donde lo mejor es “botar” al trabajador que conservarlo. Con toda seguridad en términos Matemático-Contables le sale mas barato al empleador. Y para remate como en esta Isla existe un porcentaje dominante de desempleo y la mano de obra tiene poca calificación el destituido se abstiene de reclamar porque estos propietarios en Margarita juegan cuadro cerrado ante el nativo.
Igual ocurre en todas las ciudades del país con las panaderías donde aplican la misma de los comerciantes árabes salvo excepciones porque la Inspectoria del Trabajo debe estar ahogada en corrupción porque hasta expresan los dueños que le mojan la mano a quienes se encargan de recibir las denuncias para hacer una pareja feliz del poderoso con el burócrata y condenar al trabajador. ¿Y el socialismo ¿.Bien gracias. Y entonces uno ve Ministros, generales y afines recorriendo grandes Centros Comerciales para posar ante las cámaras de la Tele pero el problema del hombre es una menudencia para el burócrata porque según ellos con estos allanamientos y rebajas sin medidas destruyen el Capital cumpliendo la fantasía de una heroica batalla cuando de paso estos comerciantes se lucran de un proceso explotador y la plusvalía apropiada por el fabricante exportador que se embolsillo su dinero en cualquier parte del mundo mientras aquí el ESPECULADOR tiene años haciendo lo que en gana le viene y lo mas grave estafando al Fisco nacional con facturas sobre preciadas (Aduanas). Un show como el presentado tendría sabor humano si se preserva la estabilidad de los trabajadores de estas empresas y así en cada tienda o comercio con pocos o muchos empleados se cubre con fuero sindical al empleado según el numero o sea si hay diez se escogerá uno y si hay uno este se considerara como inamovible pero de verdad, verdad.Un delegado pues.La dictadura del proletariado.
Es bueno obligar, atacar y meter en cintura al especulador pero aquí hay millones de personas interesadas y necesitadas de apoyo del Estado y no son tomados en cuenta para su felicidad. Por algo los burócratas dicen en Margarita que el árabe es el mejor amigo del hombre y en otros lugares del país se cambia la consigna aplicándola como el portugués es el mejor amigo del empleado público. ¡Ojala¡ Los burócratas en algún momento se ocuparan de las necesidades mas inmediatas del pueblo se harán socialistas de verdad y todos nos beneficiaremos.