Hoy es el día en el que se repite el descuartizamiento de Guaicaipuro, pero esta vez en la Venezuela Revolucionaria, en la que la lucha por la tierra sigue costando la muerte (1).
Eran las 7:00 PM cuando nos informan que lo habían herido a él y a su esposa Lucía. Una hora más tarde, nos confirmaron que había sido asesinado. Eran las 9:00 PM cuando su cuerpo yacía todavía en el Tokuko, a la espera de las mismas autoridades que muchas veces sirvieron-sirven de cama para que se violaran-violen los derechos de nuestros hermanos ancestrales.
El diario Panorama había publicado una noticia según la cual la muerte había sido a causa de una riña con otros caciques que lo adversaban, los mismos que sentían vergüenza por lo que fueran "a pensar los ganaderos de ellos" (2). La noticia fue eliminada para dar paso a la versión oficial.
Un poco después de las 11:00 PM, el ministro de comunicación Ernesto Villegas lo confirma a través de su cuenta en twitter según la noticia publicada en la Agencia Venezolana de Noticias (3). A esa hora ya habíamos hablado con varios compañeros que, nudo en el cuello, ratificaban la información.
Nos llamaron también por lo mismo ¿Es cierto? Incluso le llegué a preguntar a quien nos dio la noticia, "pero ¿tú lo viste?". Todos lloramos, los que hablaban, los que escuchaban, los que callamos.
Sabino es el símbolo de la resistencia no sólo indígena, sino campesina, de clase, ante los arrebatos del neoliberalismo empoderado. Lo hicieron preso, fue víctima de múltiples atentados, su familia fue diezmada, se burlaron de su lucha en TV nacional, lo invisibilizaron, hasta que lo mataron.
Pasada la medianoche. Todavía no se conoce "oficialmente" el móvil del homicidio. Según el mismo Villegas, los organismos de seguridad del Estado ahora sí harán su trabajo e investigarán lo ocurrido.
En una entrevista que realizáramos al cacique yukpa el 14 de mayo del 2012 en La Brújula del Sur, Sabino creía que si lo mataban, los indígenas se alzarían en la Sierra de Perijá (4) ¿Qué pasará? ¿Qué haremos en Caracas?
Por lo pronto los movimientos sociales se autoconvocaron para mañana después de mediodía frente a la Fiscalía, para exigir justicia, para hacer lo mismo de siempre y recibir la misma respuesta de siempre.
A esta hora, el asesinato de Sabino ya es noticia en todos los portales y diferentes medios de comunicación. Necesitan informarlo: Ha muerto la astilla en el zapato. Jamás recibió tanta prensa oficial, ni privada, el nombre de uno de los símbolos de sangre de esta época que nos arropa, y a veces nos invisibiliza con una manta roja.
Podría terminar con una frase hecha (ya la he escrito en otros medios): "Sabino VIVE", o "los que mueren por la vida no pueden llamarse muertos", también podría ser "Sabino nos marca el camino", y "Sabino somos muchos"... un largo etcétera; podría, pero no me lo permite el cansancio de repetir las historias, de reportar la muerte de los imprescindibles, no me deja.
Podría florear su tumba, pero el dolor no me deja. Hay que empuñar la flecha.
"Id veloces a vengar al muerto,
a dar vida al moribundo,
soltura al oprimido
y Libertad a todos".
indiracarpio@gmail.com
(1) Remitamos nuestras dudas al respecto a la cantidad de -más de 280- campesinos muertos por la misma causa.
(2) En: https://www.youtube.com/watch?
(3) En: http://www.avn.info.ve/node/
(4) En:Entrevista a Sabino Romero: “Si me matan, los indígenas se van a alzar en la Sierra de Perijá”