Carlos Machado Villanueva / El Peatón

14/02/2014

La situación que se observa actualmente con la puesta en venta al público del modelo de celular (teléfono móvil) Evolutión III, no deja de generar suspicacias en la opinión pública, y estas apuntan a que la empresa estatal Movilnet, prestadora de este tipo de servicio de telefonía, estaría siendo objeto de un plan de sabotaje interno enmarcado dentro del plan general de desestabilización puesto en marcha por sectores de oposición de extrema derecha contra el gobierno del presidente Nicolás Maduro.

Son muchas las dudas, pero también las sospechas, que surgen al respecto. Una de estas tiene que ver con que supuestamente la empresa Movilnet anunció públicamente la salida al mercado de este equipo de la generación “Androide”, de alta demanda, cuando al parecer la cantidad producida fue muy limitada para satisfacerla, siendo finalmente desbordada con creces.

Por lo observado el pasado sábado 9 de febrero en la Plaza Bolívar en a jornada de venta al público que debió organizar Movilnet ante denuncias de los usuarios de que el venía siendo vendido por una mafia existente al interior de esta empresa y en complicidad con otra mafia actuando desde afuera, vía internet, en 17 mil bolívares, la situación continuó dejando mal parada a la estatal telefónica.

Estas jornadas de venta al público del Evolutión III en plazas de diferentes ciudades del país, obedecería a que usuarios molestos abrían causado astrosos en un concesionario del centro de Caracas, específicamente en el centro comercial Metro Center, cuando luego de larga espera les dijeron que sólo habían 50 equipos para la venta, que fue lo enviado supuestamente por Movilnet.

Aunque muchos compradores se dirigieron desde altas horas de la madrugada de ese sábado para intentar adquirir uno de esos modernísimos equipos celulares, estos debieron regresar a sus casas mascullando su molestia y frustración pues ya individuos, actuando de forma mafiosa igualmente, se habían apostado con varios “amigos acompañantes” en los primeros lugares de las colas para adquirir varios equipos, que una vez en su poder revenderían al mismo precio especulativo de 17 mil bolívares, aunque como se sabe, Movilnet fijó un precio solidario de venta al público de 2.450 bolívares.

Vitrinas vacías

Otra situación que reforzaría el temor de que Movilnet pueda estar siendo víctima de un plan de sabotaje desde adentro, cual caballo de Troya, es que hasta la fecha varios concesionarios visitados muestran sus vitrinas vacías y desoladas (Esta táctica fue utilizada para derrocar a Allende). Un concesionario, llevándose las manos a la cabeza, expresa ante ese cuadro: “Hemos perdido 15 años de trabajo…”.

Y es que al parecer, los asociados de negocios (concesionarios de la franquicia) de esta empresa llevan esperando semanas y hasta meses por que se los surtan de equipos celulares de diferentes modelos y precios, lo cual no sucede. Con el agravante de que supuestamente estos estarían impedidos de vender equipos adquiridos a otras empresas importadoras.

Ahora bien, si se repara en el hecho de que estos establecimientos son en cierto modo la imagen de una empresa de telefonía celular como Movilnet, que atiende 15 millones de usuarios, ya podremos imaginar la imagen negativa que tal situación estaría generando.

Pero mas grave aún, esta situación vendría a coincidir, ¿casualmente?, con las acciones de guerra económica contra el gobierno bolivariano, parte de la cual consiste en posicionar ante la opinión pública que no hay tal guerra económica sino que la crisis económica obedece a la ineficiencia de este, al igual que el desabastecimiento y escasez de diversos rubros de consumo masivo.

Ello a pesar de que, como es público y notorio, el gobierno bolivariano instaló dos empresas fabricantes de equipos celulares en el país, Orinoquia y Vetelca, contra las cuales también apuntaría esta campaña de descrédito por parte de sectores opositores en medio de su guerra económica.

Más rápido desde Europa

Para reforzar esta imagen, surgen denuncias de que a diferencia de lo que sucede con un pedido relativamente mediano hecho a una empresa proveedora de equipos similares, ubicada en Europa, por ejemplo, dura a lo sumo dos días en llegar al establecimiento comprador, los que son solicitados a Movilnet duran en llegar 15 días y más desde el depósito de la estatal telefónica ubicado en la zona industrial La Yaguara, al suroeste de la ciudad.

Finalmente, las venezolanas y venezolanos fueron testigos de cómo una clase gerencial corrupta, llamada la “Gente del petróleo”, se prestó para la conspiración golpista del llamado paro-sabotaje petrolero de 2002-2003, y no pocos en Venezuela creen aún que en estas empresas estratégicas todavía se ocultan gente de esta misma calaña, la cual no duda en cumplir directrices golpistas. Movilnet no parece ser la excepción por estos días.

“Yo a un gerente que esté así actuando en contra de mi empresa lo despido inmediatamente”, expresó el propietario de un concesionario de Caracas, consultado respecto a la situación.