Promesa electoral del Presidente Barak Obama que el mundo le reclama cumplir, incluyendo la población de su propio país ante la pésima imagen que esta prisión de incalificables torturas, en arrendado suelo cubano, le ha causado a la imagen de Estados Unidos, en especial durante la presidencia de George W. Bush, al comenzar la invasión ilegal y no aprobada por las Naciones Unidas a Irak.
Son unos 210 encarcelados, se les acusa de terrorismo, mientras la Administración actual busca nuevo sitio de reclusión y el inicio de procesos judiciales, 40 de éstos en cortes civiles o militares, con unos cinco en la Corte Federal de Nueva York. Para la mayoría, sin embargo, no existen pruebas que justifiquen su privación de libertad, quizás alguna vez significaban peligro a la seguridad de Estados Unidos, pero realmente merecen ser enviados a sus países de origen en plena libertad. Sería en parte el comienzo de una gestión de recuperación de la dañada imagen.
Aun se recuerda las palabras de BUSH cuando decretaba que el planeta completo era sitio de batalla contra el “terrorismo” y quién quiera arrestado sería acusado de ese cargo para ser juzgado en cortes militares. ¿Y quién define quién es qué? Simplemente el Pentágono gringo.
Son alrededor de 350 personas que están sentenciados por terrorismo en cárceles estadounidenses, incluyendo los que procedieron a destruir en 1993 las Torres Gemelas de la ciudad de Nueva York, aunque son muchas las opiniones de que no se esta totalmente seguro de que ese acto criminal realmente haya sido el producto de un complot terrorista.
El Congreso Demócrata, sin embargo, en estos días votó por no aportar financiamiento para el cierre de Guantánamo, hecho increíble ante años que estuvo solicitando este importante paso a favor de los derechos humanos, ante el pasado Congreso Republicano. Así como Patricia Janiot de CNN en Español se auto proclamó “la jueza de la democracia” en su visita preelectoral a Honduras, siempre se pregunta el mundo, el por qué Estados Unidos desea desempañar ese mismo papel ante todas las dificultades que tiene por delante, en especial en el área socioeconómica y mas recientemente en el fracaso de sus gestiones ante la Convención realizada en Dinamarca para buscar soluciones a mediano y largo plazo al cambio climatológico que sufre el mundo.
El inmediato y necesario cierre de esta Centro de torturas es importante para el Presidente Obama ante el declive que ha tenido el entusiasmo que causó mundialmente su llegada a Washington y luego en especial sus palabras en Puerto España, Trinidad, a los lideres de este Continente indio americano que “el pasado era el pasado y que lo que ahora tenía por delante era el respeto a las soberanías de cada uno de ellos”.
Este incumplimiento con bases militares en Colombia y otras negociaciones turbias como el Golpe de Estado en Honduras ha provocado una decepción enorme. Con algo tendrá que empezar para redescubrir sus verdaderos aliados en el crecimiento y la solución de los problemas mundiales, reconociendo el cambio radical que se esta viviendo en las nuevas sociedades, la batalla sin cuartel al capitalismo SALVAJE. El cierre de GUANTANAMO es uno de ellos. DIOS BENDIGA A VENEZUELA.
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