Vergüenza debería darle a la FAPUV por el llamado a paro de 24 horas convocado para el próximo jueves, aduciendo la liberación de ¿3000? estudiantes detenidos por “protestar pacíficamente”, cuando los datos suministrados por la Fiscalía y el ministro Rodríguez Torres señalan 2600 de los cuales sólo el 7% son estudiantes. La dirigencia de esta organización reaccionaria y perezosa, el mayo pasado llamó a la suspensión de actividades académicas provocando la pérdida del semestre en la mayoría de las llamadas universidades autónomas. Las razones fueron un ajuste salarial que ya había sido aprobado por el gobierno nacional con incrementos superiores a los exigidos por esta organización profesoral maula. Hasta la saciedad ha informado el ministro Ramírez Torres del número de detenidos, que no por el hecho de ser estudiantes debe la sociedad venezolana y el Estado Nacional darles una patente de corso para seguir incurriendo en actos contrarios a la paz pública. La FAPUV nuevamente, obedeciendo a líneas conspirativas de los sectores más reaccionarios y violentos de la MUD, llama a un paro, que simplemente no beneficia a la comunidad universitaria sino a los mandatos generadores de violencia. Cómo se sabe - ya que sus conductas “gremiales” son predictivas- dentro de pocos días llamarán a un paro más prolongado y así consecutivamente hasta perder un nuevo semestre mientras los salarios de estos “profesores y profesoras” son depositados religiosamente y casi que con precisión matemática. Siento pena por ell@s. Algun@s fueron mis profesor@s y en esos tiempos su discurso nos envolvía, convenciéndonos de la necesidad de luchar por la transformación y por la justicia social, por la honestidad; cuestionaban también a los sindicatos adecos y copeyanos que habían traicionado los derechos de l@s trabajador@s, hoy lastimosamente forman parte de ellos. Est@s personajes se convirtieron en íconos, en figuras importantes que estimularon la vida académica y política. La vida nos enseñó, años después, que no siempre se es fiel a los principios y que la ignorancia ilustrada le hace un juguete de pasiones que ni siquiera son propias. Esos personajes en algún momento merecieron nuestro respeto, pero la realidad le descubrió los pies de barro.
No tengo la menor duda, que ese paro está condenado al fracaso. Cada día, no obstante las posiciones ideológicas, prevalece el sentido común de la comunidad universitaria que quiere normalizar las actividades regulares de docencia, investigación y extensión, sin embargo los niveles rectorales de estas universidades “autónomas” acatarán y estimularan el paro. Igualmente, los medios de información harán su sucio trabajo mediático difundiendo el “éxito” de dicha jornada. Trabajo en una institución donde la APUNESR, triste gremio holgazán, es tan inútil, que ni siquiera tiene la fuerza ni la voluntad de realizar semejante convocatoria, ya saben que la gran masa de sus afiliados no se sumaría a semejante exabrupto, además que esta asociación no cuenta con la fuerza y legitimidad suficiente. Los personajillos de esta dirigencia gremial rinden culto al mínimo esfuerzo y a la máxima ganancia y por lo general viven en un paro continuo, pocas veces se encuentran en la institución, suelen asistir de cuando en vez a las actividades académicas, realizan pocas evaluaciones, no publican trabajos; su orientación es el beneficio personal y familiar y siempre están en desacuerdo con las propuestas gubernamentales, la mayoría de las veces sin analizarlas apropiadamente. Si el gobierno estimula la discusión de la ley de la gravedad, con seguridad llamarían a paro y estarían en contra de la ley.
*Sociólogo, Facilitador UNESR, núcleo Valera
morrocoynosubepalo@hotmail.com
