Con mucha sorpresa recibió la comunidad carabobeña la visita que hiciera el gobernador del estado Francisco Ameliach a la Universidad de Carabobo, nuestra querida Alma Mater. Allí, acompañado por las altas autoridades Ucistas, profesores, estudiantes y egresados, y en cumplimiento de sus funciones oficiales, recorrió las instalaciones del comedor universitario y se comprometió a transferir los recursos necesarios para finalizar su remodelación, gestión que la comunidad estudiantil aplaude y la sociedad carabobeña observa con beneplácito.
Y repito: causó sorpresa en el pueblo carabobeño dicha visita. Y me atrevo a asegurar que dos tipos de sorpresa!! Por un lado, amplios sectores de la sociedad aplauden este acercamiento entre el gobernador bolivariano de Carabobo y la Universidad. Es una forma de decir, que mas allá de las divergencias y la pluralidad de pensamiento, aun subyace en nuestra universidad la posibilidad de anteponer la academia por sobre los intereses políticos, lo que ayuda en el proceso de construccion de la Paz tan necesaria en este momento. Para estos sectores, la sorpresa es agradable y la apuesta es por profundizar los lazos, por transitar juntos el camino de la construccion de una sociedad mas justa y humana donde el papel de la universidad es necesario, importante y preponderante.
Pero tenemos tambien la sorpresa de otro sector, minoritario pero fuertemente activo: el sector que apuesta a la violencia en contra del gobierno legitimo de Nicolás Maduro y que utiliza la universidad y sus espacios para fomentar el caos y la desestabilización. Ese sector quedó sorprendido ante la audacia de nuestro gobernador o como dirían en el argot futbolístico, quedó "fuera de lugar" cuando vio a Francisco Ameliach en el corazón mismo del campus universitario, rodeado de pueblo y academia, construyendo los puentes del entendimiento y tejiendo los lazos de la unidad carabobeña.
Esos sectores que se abrogan la "mayoria universitaria" y que en su nombre manipulan y mienten, que desconocen el juego democrático y que se embarcaron en una aventura golpista sin importarles para nada las consecuencias negativas que trae a la universidad misma, quedaron con los ojos claros y sin vista ante el avance de las fuerzas progresistas que pugnan por la Paz, con Francisco Ameliach al frente. Y es que el camino de la Paz no puede hacer distinciones, no puede aceptar condiciones.
Repito: entendemos la expresión politica de la universidad actual, repudiamos al sector violento que se expresa desde allí, reconocemos a quienes pensando distinto expresan sus diferencias con pleno respeto al orden juridico y en el marco de la democracia, apoyamos a los sectores universitarios que creen en el socialismo bolivariano y que desde la universidad acompañan al proceso revolucionario, pero tambien vemos a la Universidad de Carabobo como un todo al cual hay que llegarle y al cual por encima de cualquier cosa debemos incorporar al desarrollo del país. No puede la universidad seguir aislada, ser un espacio sin relación con la realidad actual. Mas aun cuando lo que se plantea es la búsqueda de consensos que permitan que nuestro país avance en paz.
He ahí la importancia de la acción del gobernador Francisco Ameliach y de la valentía con que la asume, al entender que la paz solo es posible con todos y para todos. Y la universidad, nuestra querida Universidad de Carabobo, no podía quedar fuera de la propuesta, la mas importante en este momento, esa que se escribe tan solo con tres letras: Paz.!!