En estos momentos cuando continua el debate sobre la propuesta de lo que será la Ley Orgánica de Educación, conviene hacer algunas precisiones de carácter histórico que se han dado en el devenir de la educación en Venezuela desde comienzos de siglo XX, precisiones que intentan orientar la ubicación dentro del espacio y tiempo en han venido ocurriendo y que no podemos perder de a la vista a la hora de la confrontación del momento histórico que vive la República Bolivariana de Venezuela.
Rubén González trajo a Venezuela el sistema educativo francés que era fundamentalmente humanístico, en el cual se hacían cuatro años en primaria y luego se pasaba a la escuela federal para completar el llamado bachillerato.
La primera ley de educación se crea realmente en 1940, cuando Arturo Uslar Pietri y Rafael Vega, crearon lo que dieron en llamar la ley moderna de educación, donde aparece por primera vez la educación "superior": la universidad y los institutos pedagógicos, estando vigente hasta 1945 cuando el sectarismo adeco derroca al gobierno del general Isaías Medina Angarita.
A partir de 1945, la junta de gobierno (trienio adeco) nombra a Humberto Arocha como Ministro de Educación, quien lleva adelante la tesis sobre El ESTADO DOCENTE, del Dr. Luís Beltrán Prieto Figueroa. Lo cual trajo como inevitable consecuencia el alzamiento y subversión de los colegios católicos, quienes apoyados por la oligarquía presionan logrando suspender el decreto sobre el Estado Docente y la destitución del Ministro Arocha.
Más adelante, en plena dictadura de Pérez Jiménez, se aprueba en 1955 la ley de educación, que ha sido una de las más atrasadas, pero sin embargo incluía un artículo que planteaba la posibilidad de realizar algunas actividades experimentales en la escolaridad.
En 1961, luego de instaurarse el régimen de la democracia representativa, se crea, se propone la Ley Orgánica de Educación con la inspiración fundamental de Luís Beltrán Prieto Figueroa, pero pasarían veinte largos años para que el congreso adeco copeyano apátrida aprobara dicha ley, en su defecto un gobierno que se autodenominaba democrático aplico en su tiempo la ley de educación de la dictadura.
Ahora, podemos preguntarnos por qué el congreso adeco copeyano no aprobó la ley propuesta por Prieto Figueroa?
La no aprobación, se fundamento en el rechazo a tres artículos que ofendían y afectaba los intereses económicos, religiosos y de control de masas.
En dicha ley se reflejaba que todos los medios de comunicación tenían que ser supervisados por el Ministerio de Educación, lo cual era inaceptable para los dueños de los recién creados monopolios de los medios.
Otro de los artículos rechazados, era que en cada fábrica deberían de existir guarderías para los hijos de los trabajadores, tamaña ofensa para los "empresarios" que han crecido a costa del Estado, como lo ha sido FEDECAMARAS.
Y por último, y no por eso menos importante, se prohibía en las escuelas la enseñanza religiosa, lo cual afecto a la curia y al OPUS DEI no fue sino hasta 1980 cuando por un madrugonazo de traición, se aprueba la Ley Orgánica de Educación pero cambiando previamente el sentido determinante de todo el articulado propuesto en la ley de Prieto Figueroa, sin tener además disposiciones transitorias.
Es de apuntar, que la ley de 1980 sin embargo generó muchas contradicciones: Se crea la Unidad generadora de Aprendizaje (UGA) donde el docente tenía la obligación de hacer trabajo comunitario; se crea la escuela básica de nueve años, dividida en tres etapas.
A partir de 1961, junto al pacto de punto fijo, pacto que significó exclusión social y política, comenzó el fraude en la educación, con un gobierno que se declaraba "democrático", antiperijimenista, pero durante veinte años aplicaron la ley de la dictadura, de lo que se infiere que no tuvieron contradicción o concepciones diferentes con la dictadura que los acorralo, los torturo y liquido a los mejores cuadros de la resistencia política; los "dirigentes sindicales se convirtieron al mercantilismo, transformándose en pesados fardos para la administración publica y convirtieron a los educadores en pegadores de afiches, de allí viene la expresión: un carguito aunque sea de "maestrita".
Por otro lado, parte del fraude continua en 1980, cuando a partir de ese momento, en la LOE, se habla sistema educativo y más adelante se refiere a sistema en niveles y modalidades.
Desde el punto de vista conceptual, la LOE comienza con un error conceptual, ya que un sistema no tiene niveles ni modalidades, porque según la teoría de sistemas, un sistema es un todo integrado, y en consecuencia tiene subsistemas, de allí se desprende que como sistema lo cuantitativo organizado determina lo cualitativo, que en el caso de sistema organizado en subsistemas emerge un proceso que llamamos EDUCACIÖN, que es un producto de un sistema organizado.
Si se hace la comparación con un sistema químico organizado como lo es el agua, podemos decir H2O compuesto por dos gases, en cual H es gas combustible y O gas comburente; este ejemplo desea mostrar como lo cualitativo (el agua) es el resultado de lo cuantitativo organizado: 2H y un oxigeno
Por esta razón el sistema educativo debe de organizarse en subsistemas ya que el sistema educativo es un todo organizado del cual emerge una cualidad que se llama educación, que en el caso concreto de nuestro tiempo revolucionario se llama educación Bolivariana para construir Patria y Socialismo.
En torno a la supuesta neutralidad de la educación, que tanto preocupa a la reacción, es obligante manifestar que la educación debe orientarse hacia la formación del nuevo republicano y esto se define dentro de la concepción de hombre y sociedad que se desea ; al respecto cabe preguntarse lo siguiente: ¿Quién debe decidir lo que el estudiante debe estudiar? ¿Donde debe trabajar el obrero? ¿Qué clase de misa ha de rezar el cura? ¿Que clase de orden debe velar el policía?
Las respuestas a esas y otras interrogantes llevan a plantearnos definitivamente la no existencia de una pedagogía neutral y en la búsqueda de una educación liberadora.
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