El gobierno bolivariano de Venezuela, debe proceder urgentemente a un equilibrio interno de su economía con ajuste severo, para tener oportunidad de enfrentar la economía emergente del eje occidental, teniendo como marco referencial la tributación e ingreso fiscal. Es el tiempo de la planificación a largo plazo para lograr desacelerar los negocios ilícitos de índole agroalimentario, que, esta dañando las redes de crecimiento y de empleo temporal, asumiendo que nos encontramos frente a una demanda muy limitada de bienes en inversión para el comercio.
Hay que establecer prioridades desde el sentido laboral hasta gerencial. Tenemos que ir a una madurez en el sentido socialista y democrático para ejercer influencia ante el Estado y las empresas bolivarianas para lograr un equilibrio necesario en todos los niveles de poder. Para lograr el éxito de estos ajustes, debemos asumir decisiones viables que fortalezcan al equipo ministerial en todos sus ámbitos.
El discurso político en nuestro país debe incidir en una planificación clara sobre los datos dados, teniendo como base la experiencia y el conocimiento de las distintas áreas que movilizan los bloques privados y públicos, determinando la defensa de los intereses del capitalismo y las propuestas socialistas, hacia la defensa social del ciudadano. La clase trabajadora debe unificar criterios para recuperar su credibilidad y abrirse para lograr el control de la CTV, no es posible que una persona se encuentre ejerciendo la presidencia durante tantos años, cuando un lapso de tres años es suficiente.
Lo importante s impulsar los ingresos del gobierno y alivianar los trastornos de la economía, para lograr una recuperación sostenible. Las repúblicas del sur han sostenido presiones alcistas debido a la afluencia de capitales provenientes de los nidos globalizados, dañando el curso del crecimiento económico sostenible. A pesar de estos desajustes y devaluaciones de índole mundial, se espera una recuperación, atacando el consumo desmedido y un acceso justo a las divisas.
Lo importante es lograr la estabilidad de los precios e ir hacia una calificación de la mano de obra, para evitar imprecisiones. La idea es acabar con el déficit del país y garantizarles los estudios clínicos a los ciudadanos dependientes del Estado Bolivariano para lograr un mejor desempeño en sus funciones laborales. Es necesario repensar sobre nuestro perfil ante los países desarrollados., no dejemos que el discurso externo nos debilite, sobretodo de los pésimos izquierdazos del pasado. Debemos aprovechar nuestras potencialidades para evitar pesadillas que debiliten un país en crecimiento tecnológico, es el momento de abrirnos hacia las tendencias del mercado.
Hay que adquirir rubros internos como el ñame, apio y ocumo para nuestra ingesta diaria, debido al costo elevado del trigo y el maíz. Estos productos deben posesionarse de nuestra dieta diaria junto a los granos. Tomando en cuenta el aumento del dólar y sus inundaciones en el mercado internacional. Existe una caída internacional del cultivo de cereales que ya alcanza los tres puntos por los cambios climáticos y la dirección de los vientos apluvionales asiáticos.
La idea, es no seguir estafando al consumidor, como lo hace una cadena de farmacias que nunca ha colocado etiquetas de valor de venta en cada uno de sus productos y confunde al comprador cuando éste cancela en caja. Así funciona el comercio privado en todo el país, dañando las redes de comercialización y que perjudica al consumidor final pagando de tres a cinco veces más por lo comprado.
La idea es evitar los abusos que se crean alrededor de una red asumiendo el criterio de la globalización. Esto es nefasto y una mentira más de quienes dicen poseer el control del capital en el país, debemos ir a una sinceracion de precios en esas factorías.
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