Con respeto por quienes consideran que antes de la pandemia siglo XXI el mundo gozaba de bienestar, y de aquí en adelante por lo ocurrido con el coronavirus se extingue esa condición, tienen derecho a opinar, pero considero que hay en sí mismos una confusión con intención capitalista, víctimas de la egoísta formación psicológica mezquina, controladora, amenazante, y en líneas generales capaz de vender el alma al diablo, sin que ello parezca inmoral, en aras de sacarle algo se autojustifican "no seas pendejo aprovecha".
La explotación mercenaria oculta por la oposición demócrata representativa, no extraña por vergüenza el temor de hacer más claro el fracaso mundial. Aumentan desesperados el apoyo tácito a la decepción, acudiendo al mito, en la historia tradición oral que explica por narración acciones de seres que encarnan de forma simbólica fuerzas de la naturaleza, y aspectos de la condición humana, en esencia acciones de los dioses o héroes de la antigüedad.
Los mitos alteran verdaderas cualidades de una persona o cosa y les da más valor del que tienen. En la oposición dentro y fuera del territorio patrio los mitos los promocionan, reprograman, repiten y atosigan a punto que destrozan por ineptos en el desempeño político uno que otro argumento con tinte de convencimiento. En definitiva, defraudan a quienes terminan pensando para sí mismos "aquella promesa de éxito era un mito".
Amantes de la paz y enamorados de elecciones como somos los venezolanos, la oposición se aísla de nuevo solicitando no votar el 6-D 2020, desean agrandar las penurias miserables que padecemos cumpliendo órdenes de factores extranjeros, estrategia vil para derrocar el modelo socialista, vidiotizados y mafiosos de la ultra derecha que por encima de las tumbas de chavistas, opositores e independientes, niños, ancianos, hombres y féminas, no les importa afectarnos a la disposición de un proyecto extranjero destinado a tutelarnos, y en el que nosotros pondremos los muertos.
Por ahora, hay que ser bien p ene pen de guayaba, decían en mis tiempos mozos, para no darse cuenta que el Presidente de Venezuela con intervención en la ONU el 23 de Septiembre 2020, es Nicolás Alejandro Maduro Moros, y así se retirasen de la ONU gobernantes temerosos a Washington y sus sanciones, es el reconocimiento del ente que agrupa las naciones del mundo al auténtico Presidente del estado venezolano
Entretanto la ONU espera enviar acompañantes a las elecciones del 6 de Diciembre, en aras de la paz sin mitomanía, el silencio cómplice de jefes de estado cobardes y la desmesura gangsteril contra Venezuela, fue expuesta al orbe por el Presidente Maduro, invitado al concierto de naciones que en 40 minutos oyó nuestra verdad bolivariana, orgullo venezolano que nos coloca en el ojo del huracán de la política mundial, Maduro Moros siguió el legado de Chávez Frías, con soberanía de quienes somos hijos del antiimperialista Simón Bolívar de pie y con envidiable dignidad valiente y decidida.